OCT11. OSCURA ES LA NOCHE, de José Ángel Gozalo
Tengo tanto frío que no me siento las manos. Un viento helado se cuela dentro del vagón entrando por todas sus rendijas. Nos apiñamos los unos contra los otros intentando mantener el calor pero todo es inútil, en el exterior, el crudo invierno lo cubre todo con su manto blanco de nieve. Cuando el tren no pude pasar nos bajan obligándonos a despejar el camino con palas. El traqueteo rítmico de las ruedas contra la vía incita a dormir, pero me aterra cerrar los ojos porque entonces lo recuerdo todo. Recuerdo que estábamos cenando todos juntos, celebrando mi cumpleaños. Yo estaba a punto de soplar las velas cuando de pronto, tiraron la puerta abajo, recuerdo como me escondisteis dentro del armario, recuerdo los alaridos excitados de los perros, recuerdo las risas crueles de los soldados, recuerdo vuestros gritos de terror, vuestras súplicas desesperadas implorando clemencia y como en el último momento mirasteis hacia el armario donde yo estaba, despidiéndoos de mí. El olor a sangre todavía me acompaña.
Por entre los tablones de la pared solo se divisan tres estrellas en la oscuridad de la noche. Quiero pensar que sois vosotros, padre, madre, hermano, que me protegéis desde el cielo.
conmoción…
espero no lo hayas vivido tú mismo porque ¡¡parece tan real!!…
muy bien escrito, muy visual…
Hola Kistila, no te preocupes soy muy joven para haber vivido algo así. Es todo fruto de esta imaginación mia que me hace meterme en la piel de los personajes.
Gracias por comentarlo, un saludo y mucha suerte con tus tres estrellas este mes.
cierto que eres joven pero no es solamente imaginación se ve que tienes mucha empatía hacia las desgracias de los demás…
espero que nunca vos toque a vosotros jóvenes lo que les toca a otros de vuestra edad en tantos países…
Lo mio es por escribir una novela. Arriba tengo un Ángel y abajo el satanás, vaya vecinos.
“Con todo respeto amigo Javier”. Ángel, precioso relato, me ha tocado el alma. Te deseo mucha suerte, Sotirios.
Vengo de leer tu relato Sotirios, me ha gustado mucho. (Luego te dejare el comentario) Gracias por comentar el mio, me alegro de que te haya llegado.
Un saludo de tu vecino y que tengas mucha suerte tu también.
Es triste,duro. Pero muy bello a la vez.
Un abrazo, José Ángel.
Ines, en unas pocas palabras has descrito muy bien tus impresiones sobre el relato. Gracias por tu comentario.
Saludos
Tienes un principio muy potente y que va acelerándose con el avance del tren. Podría muy bien ser el comienzo de una novela de aventuras,. Me trajo a la memoria la estepa rusa del doctor Zhivago, a épocas y lugares históricos. Luego se vuelve íntimo y ahí vuelves a informar con ritmo y precisión.
Un final ya más emotivo y obligado por el tema.
Escribes bien y me gustó la voz en primera persona. Le da fuerza y credibilidad. Un abrazo.
Antonia, muchas gracias por tus palabras. Significa mucho para mi que alguien como tu piense que escribo bien. Me alegro de que leyendo el relato hayas evocado esas imágenes.
Un saludo y suerte este mes.
Bellisimo el relato,a la vez que muy triste.Enhorabuena y mucha suerte.
Hola Anónimo gracias por comentar. Te deseo mucha suerte a ti tambien.
Un saludo.
Triste y, desgraciadamente, real.
Buena suerte, apañero!
Vidal
Gracias Vidal, no se porque pero se me da mejor escribir sobre cosas tristes. Quizás el mes que viene cambie el registro.
Saludos compañero
Engancha de principio a fin. Me ha gustado mucho. Nuria.
Hola Nuria, me alegro de que pienses asi. Cuando escribo siempre lo hago intentando captar la atención del lector. Me doy por satisfecho con haberlo logrado contigo.
Un saludo.
Hace sentir… Mucho…
Enhorabuena José.
lines
Lines, muchas gracias por comentar mi relato. Me alegro mucho de verte por aqui.
Un saludo.
Ya ves José Ángel que somos muchos los que opinamos que escribes bien, por algo será.
Un abrazo
Mira quien fue ha hablar!
Alejandro, a mi también me gusta mucho como escribes. Con tus relatos has conseguido arrancarme muchas risas. Además también te mueves muy bien en otros ámbitos como es del terror y el relato erótico.
Gracias por comentarme siempre, también en el blog.
Un saludo.
Me dejó una sensación de esperanza en medio de tanto dolor, muy bien plasmado, felicitaciones y que tengas mucha suerte José Ángel.
Hola Teresa, que despistado soy!
No había visto tu comentario hasta ahora. Gracias por comentar y por tus buenos deseos, me alegro de que te haya gustado el relato.
Un saludo.
Tu historia me ha recordado la novela «Piezas en fuga» y mi imaginación ha volado a los terribles trenes que transportaron a los judios hacia la muerte.
No sé si era ese el tema del relato, pero así lo he leído yo.
Me ha gustado mucho, tiene muy buen ritmo y un final emotivo.
Hola Paloma, has acertado. Estaba pensando justo en eso cuando lo escribi.
Me alegro de que te haya gustado.
Saludos
Muy oscura es tu noche, muy bonito relato, escrito perfectamente, con un ritmo envolvente: recuerdo esto, recuerdo lo otro. Coincido de pleno con Paloma en su comentario anterior. El título lo dice todo. Por los detalles de la nieve, soldados, perros etc a mi me lleva sin dudas a los trenes nazis cargados de judios. Sólo hay una cosita que se me hace extraña, el tema del armario, evidentemente no sirvió de nada esconder al niño ya que acaba en el tren, entonces ¿por qué lo nombras?, yo es que lo que no entendiendo lo pregunto, quizás por mostrar la impotencia de los padres… pero si tiran la puerta abajo les dió tiempo? . Lo dicho me ha guistado mucho y que no veamos más noches oscuras de la humanidad.
Hola Maria, me alegro de que te guste el relato. Me has dejado helado con tu pregunta. Justo esas lagunas de la historia las tuve que pasar por alto pues en doscientas palabras no se podia contar todo. No pense que fuera tan obvio. Tu comentario me es de gran ayuda, tengo que tener en cuenta que si algo no termina de cuadrar no solo lo verde yo si no que el lector también se dara cuenta.
Es verdad, el relato se refiere a uno de los trenes de la muerte que transportaban judíos a los campos de concentracion. Consiguen esconder al niño con el tiempo justo aquella noche pero mas adelante es apresado.
Voy a buscar tu relato para leerlo. Llevo varios dias sin aparecer por aqui y veo que me he perdido mucho.
Saludos
Una imagen muy nítida de todo aquello que pasó y por desgracia pasa hoy y nadie habla.
Gracias Ramón, es verdad siempre habrá guerras y la gente seguirá sufriendo.
Un saludo
Escalofriante es la palabra, José Ángel. Has trasmitido el miedo a la incertidumbre y a mi por lo menos me has dejado fatal. Y lo peor: no aprendemos, no, tiene siempre que haber poderosos sin ningún escrúpulo. El objetivo es: dominar y forrarse, qué asco.
Suerte y un abrazo.
Gracias por comentar Susana. Hay quien sostiene que en un futuro no muy lejano el mundo estará gobernado por corporaciones y empresas que tendrán mas dinero que los estados. Se ha escrito mucho sobre el tema y tambien se han rodado algunas películas con ese argumento. Espero que eso no suceda jamás pero tal y como van las cosas quien sabe…
Te deseo suerte para el concurso.
Saludos
No es ficción ni mucho menos. Está todo más que orquestado. Ejemplo de actualidad: ayer venía en la prensa la pasta que invierten «algunos» en la campaña electoral de EEUU, y no es por afinidad, es por el puto poder. Las ideologias no existen ya, estamos abocados al mismísimo abismo por culpa de un puñado de canallas sin escrúpulos.
Yo esto lo tengo claro y aunque soy insomne a veces siempre me voy a dormir con la conciencia tranquila.
Un abrazo.
José Angel, visual y cinematográfico me llega tu relato; con un recuerdo para tantos niños de la guerra. Un saludo.
Hola calamanda, gracias por comemtar. El pasado fue terrible y muchos niños como el del relato tuvieron que hacerse hombres de golpe.
Saludos.
Uy, es cierto, nuestros relatos se parecen, judíos, niños, y el invierno como testigo mudo. Buen relato, un bofetón de realidad, muy crudo (tal vez demasiado, aunque se entiende porque aquello fue un horror). El detalle del armario me ha recordado a «La llave de Sarah». Vaya, me da cosa coincidir en el tema, por lo de no resultar tan original, pero también me alegra, porque si no no hubieras comentado mi relato ni yo hubiera leído el tuyo posiblemente, son tantos!!! Un besote.
Hola Merchi, tu relato si que es original porque es una versión totalmente diferente al mio, aunque el trasfondo sea el mismo.
Gracias por dejarme tu comentario. Tienes razon son muchos relatos y es difícil leerlos todos.
Saludos
Qué dolor da leer tu relato. Cuántas familias podrían habernos contado una historia parecida. Cuando la realidad y la ficción se dan la mano y el narrador sabe con qué palabras expresarlo, el resultado es tan bueno como tu relato.
Saludos
Paloma Hidalgo
Gracias por comentar Paloma, aqui y también en el blog.
Me alegro de que te guste el relato, tus palabras me han subido el animo.
Saludos, nos leemos
No encuentro palabras. Dolor, rabia, crueldad… Tu micro remueve el estómago, algo por dentro se rebela, rebota doliendo, y nos haces recuerdar noticias de la televisión, y consigues realismo y verosimilitud en tu relato.
Tres estrellas para una buena inspiración.
Un abrazo, José Ángel.
Hola Petra me alegro de que te haya gustado el relato y de que te resulte verosímil. Muchas gracias por dejarme tu comentario. No es verdad que no encuentres palabras. Siempre lo haces, y además las justas.
Un saludo.
Muy buen relato del horror. Mientras este tipo de historias nos siguan removiendo, resultando insólitas y aborrecibles habrá esperanza.
Jesús, gracias por comentar. Es verdad, debemos tener la esperanza de que algo asi no volverá a pasar jamás.
Saludos.
A mi también me ha transportado rápidamente a los trenes cargados de judíos en el holocausto nazi. Relato que refleja muy bien el horror y el dolor.
Suerte,
Esperanza, gracias por dejarme tu comentario y por desearme suerte.
Me alegro de que te llegara tan bien el relato.
Saludos.
Hola Jose Angel, no sabes el mal cuerpo que me has dejado…efectivamente me ha recordado a todos los deportados, sean de un lugar o de otro. Encima, estoy leyendo «La estepa infinita» que narra las vicisitudes de una familia judía y polaca en Siberia. Y cómo está basado en un hecho real, pues el tuyo me ha estremecido, porque me he quedado pensando en cuántos y cuántos mirarían con desolación el cielo a través de esos maderos mal clavados.
¡Buena historia! y mucha suerte para el concurso.
besos desde mis palabras.
Gracias Laura, el niño del relato podría ser uno de los miles que sufrieron la crueldad de los nazis. Por mucho q pueda imaginar no me acerco ni mucho menos a la realidad. Me alegro de que el relato te haya transmitido sensaciones, aunque sean malas.
Quizás yo también me lea el libro que estas leyendo. Yo acabo de comenzar El invierno del mundo de Menos Follet pero apenas tengo tiempo para dedicarle.
Gracias por comentar, un saludo.