OCT140. SEGUNDAS LECTURAS, de Evelyn Pérez
Trémula a su contacto tiembla como una vela.
Brotan amapolas en su carne a cada latido.
Suspira rendida.
Y es por él.
– ¿Qué hemos hecho para merecer esta suerte?
Las palabras lo atraviesan todo (garganta, aire, cuerpo)
– Esperarte cada tarde a la salida de clase. Recorrer contigo el camino hasta tu casa. Llevarte cogida de la mano. Prender tu beso en mi solapa donde todos pudieran ver que era mío. Construirte un palacio. Guardarte dentro para que ni el viento te rozase. Regalarte cada mañana la flor que había marchitado el día anterior…
– Cállate ya. A eso le llamaste amor y lo usaste para hacerme daño. Dispara de nuevo y esta vez, por favor, acierta.
Trémula a su contacto tiembla como una vela.
Brotan amapolas en su carne a cada latido.
Suspira rendida.
Y es por él.
Tiene reminiscencia de Bécquert, me gusta.Héctor suerte
Brotan amapolas en su carne, preciosa imagen y buen relato, negro, siniestro y al mismo tiempo romántico,estoy con Héctor en su comentario hay reminiscencias.
Abrazos y suerte
http://montesinadas.blogspot.com.es/