OCT46. COSAS DE LA GUERRA, de Sandra Monteverde Ghuisolfi
La guerra es una putada por donde la mires, pero cuando llegas al frente de combate, te percatas de inmediato de que salvo una fortuita descoordinación de horarios con la parca, tienes indefectiblemente una cita con la muerte. Hasta ese momento, el mayor problema en una contienda es el exceso de ocio. A las tres semanas ya lo has probado todo y si no estás matando, evitando que te maten o practicando para matar, te aburres como una ostra.
El capitán de mi unidad, hombre medianamente ilustrado y con algunos conocimientos médicos, ideó unas conferencias educativas, orientativas y de apoyo buscando atenuar el tedio. Dado que mis compañeros las calificaban de eclécticas, un martes a la tarde me presenté en la sala auditorio, dispuesto a satisfacer mi curiosidad. Quedé perplejo al leer el título de la charla de ese día: “Peligros de la halitosis en el combate cuerpo a cuerpo”
No he podido evitar la carcajada e imaginarme a Gila monologando este relato, si lo que pretendías es hacernos sonreír conmigo lo has conseguido. Un saludo.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Mil gracias por tu comentario Ana!! Y sí, creo que la risa sigue siendo el remedio infalible para todo!! Un saludo cordial.
Jajajajaja, Sandra, eso se llama desmontar al personaje o personajes. Tus soldados viriles quedan al albur del uso de una buena pasta de dientes jajajaa.
Rebueno.
http://montesinadas.blogspot.com.es/
No se por qué pero yo también he pensado en Gila… vamos que en la guerra si no te matan o te mueres de aburrimiento o de un alientazo a quemaropa, je je
Si que haces que la guerra parezca de risa… Aunque realmente, si, es una putada. Y respecto a la halitosis, en muchas ocasiones, se codea, por su potencia, con un arma de destrucción masiva!!.
Un relato muy bien llevado, Sandra. Me gusta mucho. Un abrazo.
Gracias a todos por los comentarios!! y me alegro de haber cumplido con mi cometido principal: haceros reir!!!
Has conseguido un micro gracioso banalizando la muerte, o más bien matar. «Si no estás matando, evitando que te maten o practicando para matar, te aburres como una ostra». La segunda persona, el gerundio y la expresión coloquial le imprimen ese tono jocoso.
Un abrazo.
Gracias por tus comentarios Susana! Y enhorabuena por tu triunfo del mes pasado: Estupendamente gélido tu Medallón!