OCT71. TRES AMIGAS, de Marga González Acinas
Era una noche cálida.
En ese tiempo un verano era el inmenso espacio que se extendía desde el día que te daban las vacaciones hasta la vuelta al colegio.
Recuerdo que estábamos tumbadas en el jardín mirando el cielo y soñando con el mañana; vimos tres estrellas que brillaban como chinchetas clavadas en el universo y nos las repartimos, me sentía feliz.
Pero llegó la vida y sus aguas nos arrastraron sin remedio; teníamos una tarea que cumplir y lo hicimos; había que vivir.
Hubo momentos felices y otros de frustración. Hemos cantado, reído, sufrido y dudado; como ustedes, como todos.
Pero nosotras hemos logrado permanecer como inseparables aún estando separadas y esa ha sido nuestra suerte: tenernos, conservarnos, disfrutarnos.
Esta noche he salido a la terraza y el cielo me ha recordado al de aquella lejana noche, pero hoy, solo he podido encontrar dos estrellas… una extraña congoja se ha apoderado de mí y he sabido que a partir de ahora el futuro será un poco más triste y tendré que afrontarlo un poco más sola.
Me ha gustado tu historia, es verdad que los amigos son estrellas, nos dan su luz aunque estén lejos, y tambien que «algo se muere en el alma cuando un amigo se va». Me encanta la frase de «Pero llegó la vida…» así es , y también la mención de permanecer inseparables estando separadas, a mí me pasa algo parecido, una de mis mejores amigas vive en el extranjero, hablo con ella cada día y la siento muy cercana y está a miles de kilómetros.
en otro órden de cosas, yo suelo tener dudas con los puntos y comas, aquí he visto unos cuantos y me ha llamado la atención, creo que el anterior a «como ustedes» sería mejor un : no¿?, si alguien lo tiene claro y nos lo quieres explicar será bien recibido. Gracias.
Muchas Gracias María, efectivamente tengo siempre lios de puntuación, además como soy un poco loca, escribo y no repasa, así que pasa lo que pasa.
Un abrazo.
Gracias Ana, yo creo que los amigos que me han acompañado a lo largo de la vida (tengo la suertaza de conservar muchos de la infancia) han hecho de mí lo que soy, sin ellos o con otros, hoy sería otra persona.
me gustó, Marga, por jugar muy bien con lo que callas y lo que cuentas. Suerte.