71. ONDAS DE MELODÍA (Mª Belén Mateos)
Cuando encendí la radio sus ondas se expandieron por la habitación. Nada nuevo aportaban, nada de interés. Los mismos comentarios y noticias día tras día. Música, anuncios y algún que otro consejo banal con el que rellenar el espacio abierto para la audiencia.
Esperé a las cinco en punto; maquillada, vestida de rojo y con un perfume de setenta euros el frasco. Y así, tan dispuesta, aumenté el volumen con el botón izquierdo de aquella caja de madera con tanta historia. Tras ello comenzó la melodía del programa. Unas notas que me invitaban a tararear o a acompasarlas con un movimiento torpe y tímido. Luego… aquellas palabras que me embriagaban a cada latido de su voz. Me arrellané en el sillón disfrutándolas, y tras la pausa, volví a ponerlas con la grabación de mi móvil. Un éxtasis quiso que por una vez más las hiciera mías.
Han pasado treinta años en la onda media de su voz.
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Esto si que es fidelidad. Algo ha de tener esa voz para ser capaz de convocar a una mujer durante tantos años, para propiciar que se alhaje con sus mejores galas, en la esperanza de que los efluvios de ese caro perfume, tan invisible y real como las ondas, se mezcle con ellas en una fusión, que sólo puede propiciar la radio, sin el inconveniente de la convivencia y del estrecho margen de un cuerpo físico. Qué buena melodía has compuesto, María Belén.
Un abrazo fuerte y suerte
Para bueno tu comentario Ángel. Toda una historia con la que hacer un nuevo relato.
Lo físico se pierde en las ondas, y lo real se hace eco en las palabras que salen de esa radio de antaño que ha sobrevivido a los años. Todo un deleite para ella que ha saboreado cada instante de la retransmisión de sus programas. Quizás hubo algo más que palabras entre ellos.. quizás una relación más allá de un programa de radio.
Gracias siempre. Abrazos y besos.
Mª Belén, esta chica (mujer ya) es fiel a esa voz de la radio que lleva 30 años día a día sin faltar a la cita de las cinco.
Bonita historia llena de ondas.
Un beso y suerte!
Una cita que traspasa más allá del tiempo y de las ondas. Un querer en secreto y un disfrutar en la soledad de su estancia.
Gracias compi preciosa.
Un beso grade.
MªBelén, bonita idea la de este amor platónico para tu cuento. Suerte y saludos
Gracias Calamanda. Un amor que viaja por las ondas y cada día llena su estancia.
Un vivir en ellas.
Un beso grande.
Qué historia tan elegante y original, y qué bien la has ambientado con tantos detalles deliciosos. Es precioso tu relato, tocaya poeta. Mucha suerte y besos.
Una historia sencilla, con una protagonista sencilla que vive a través de esas ondas. Quizás en su día fueron algo más que eso y ahora se alimenta de aquello que vivió. Todo un mundo radiofónico y real o no…
Gracias siempre preciosa tocaya. Un beso inmenso.
La veo enganchadilla a esa voz. Abrazos y suerte
Enganchadilla y no haciendo ganchillo que es bastante distinto, jajajajaja… Gracias Manuel. Una voz puede llenarte entera, su melodía, su tono, su sensualidad al pronunciar… es como ese perfume que te embriaga y aún no has llegado a mirar a quien lo lleva. Todo un mundo de sentidos que le dan, de vez en cuando, sentido a la vida.
Un beso grande.
Cuántas vidas se pueden construir alrededor de una voz, o de una melodía. La protagonista de tu relato ha construido la suya, creando una atmósfera propia y un tanto irreal.
Un punto muy diferente para el tema del mes.
Besos.
La voz y las miradas tienen un imán especial para atraer, seducir y conquistar.
Te puedes enamorar de un sencilla y modulada palabra y hacerla tuya y recrearte en ella. Lo platónico es siempre bello y la imaginación te hace soñar con una sonrisa en los labios.
Gracias preciosa Asunción. Un beso.
Qué bien escribe esta chica…
Que buen lector es este chico…jajajajja… Gracias Vicente, siempre aprendiz de todo.
Abrazos y besos.
Queda claro, con tu relato, que el amor también es capaz de viajar a caballo de las ondas radiofónicas.
Lindo. Que tengas suerte,
Ton.
El amor es capaz de viajar en las ondas, en el tiempo…en todo aquello que le haga llegar hasta él o le haga, simplemente, sentirlo.
Gracias Ton. Abrazos.
Me parece un bonito homenaje a esas voces radiofónicas que todos tenemos grabadas en los oídos y que han conquistado a más de uno y una con su modulación armoniosa. Besos y suerte, María Belén.
Esas voces que antes eran un todo. Te envolvían, te divertían, te informaban…Eran parte del día a día y si además su tono era melodioso e insinuante bien podías enamorarte de ella y dejar volar a la imaginación como sería el rostro de quien las pronunciaban.
Gracias Ana. Besos y besos.
Aprecio que esa voz seductora inunda a la oyente y la embarga de sensaciones y emociones, que la hacen desbordarse en el sentido más erótico y sensual de la palabra. Y así durante treinta años. Un idilio a través de las ondas que alcanza en cada emisión la plenitud. Muy logrado, Mª Belén. Besos y suerte.
Has apreciado de manera estupenda y certera Juana Mª. Enamorada de forma platónica toda una vida. Aferrada a esa voz modulada y llena de sensualidad que le proporcionaba un placer tras las ondas. Escucharlas una y otra vez hasta hacer suyas esas palabras.
Gracias. Besos.
Sin duda una voz cautivadora. Casi tanto como tus letras, poesía en prosa.
Suerte con abrazo.
Una voz bien modulada puede resultar uno de los mayores atractivos, te seduce y te conquista.
Gracias Rafa por sentir ese fondo de poesía.
Un abrazo grande.
Las voces como las miradas tienen una magia que nos envuelven. Cada palabra modulada y pronunciada de cierta manera puede enamorarte por completo.
Gracias Ana. Un besito.
Lo que más me gusta es que esta mujer se cuide y acicale tanto para un hombre que no la verá, no la olerá, pero que de algún modo sabrá que ella está allí. Porque si no estuviera no tendría a quien hablarle. Y que a su vez, a ella no parezca importarle cómo viste, cómo huele ese hombre, que le alcance con conocer todos los matices de su voz. Una bella historia de amor. Enhorabuena, guapa!
Así es Patricia. Ella cada día de su vida se acicala para su eterna cita platónica. No importa la vista, el aroma, el tacto…solo el sentido de oír su voz y perderse en él.
Gracias preciosa. Un beso grande.
Hola, María Belén.
Debía ser una voz hermosísima para esa fidelidad tan duradera.
Uf, qué ganas tenía de leer y comentar.
Es un relato cargado de amor, fidelidad y de ilusión hacia una voz, Y sin conocer al dueño/dueña. Eso es amor!!
Felicidades, me gusta mucho tu historia.
Besazos.
Ufff,, Que ganas tenía de saber de ti.
Las voces envuelven y quieren ser envueltas en esa voz que goza de melodía, en un mundo que no está hecho para percibirlas. Solo quien es sensible a ellas está expuesto a recibirlas.
Amor platónico en ondas…
Gracias bombón. Un beso inmenso Towanda.
Premio ondas para la mejor voz escrita.
Y un beso.
Gracias Margarita, mejor premio no me podrías haber dado, jajajajja…Tienes una onda de encanto que te envuelve toda, todita entera.
Un beso y un abrazo de viva voz preciosa.
Estupendo relato, como siempre, Belén.
Suerte
Muchas gracias por acercarte a leerme María Jesús. Las ondas nos envuelven, esta vez, entre letras.
Un beso guapa.
Todas estas historias de radio me fascinan, ¡es tan bonita la radio!!, como tu micro que me ha gustado mucho. Historia llena de historia y de vida.
Besicos muchos.
La radio siempre ha contado historias y nosotros nos hemos dejado llevar por ellas, por su voz, su melodía…Toda una vida dentro de esas ondas que tanto fascinan.
Gracias Nani. Un besito.
El reencuentro con una voz, con sus matices, con sus recuerdos. Tu relato nos embriaga y nos traslada de la mano de nuestra imaginación a historias pasadas. Me ha gustado mucho, Mª Belén. Abrazos.
la voz, igual que los olores, nos hacen evocar tiempos pasados. Nos embriagan y nos conducen a soñar. Podemos enamorarnos de ellos sin ni siquiera conocer el rostro que los contiene.
Gracias Salvador por tus bonitas palabras.
Un abrazo grande.
Cada vez más, pienso que para construir una buena historia primero es preciso dar con un buen personaje. Luego, naturalmente, están la mirada, la intención, el ritmo y, cómo no, las palabras. Pero lo primero -pienso- es el personaje. Y hete aquí, Belén, que nos regalas a una mujer capaz de engalanarse por un amor (¿platónico?, ¿secreto? ¿onanístico?) que jamás podrá verla. El resto de la historia, como decía, vienen rodando.
Besos.
Así es Carles. Una vez que has creado el personaje en tu mente, él nos va narrando la historia que quiere ser contada. Luego, con la voz de nuestras palabras vamos trazándola y llenándola de ritmo.
Amor platónico en una onda que sigue durante años.
Gracias. Un beso enorme.
Ondas medias que suenan a un enamoramiento de hace años. Increíble final. Como siempre, Mª Belén, un gran relato.
Besos.
Pablo.
Un amor platónico, una voz, una onda, un programa… Tiempo de espera, ilusión y sueños. Toda una vida vivida tras esa mágica cajita de madera.
Gracias Pablo.
Besos y abrazos.
Ohh M.Belen… para mí es una historia muyyy triste… ese amor tan fiel sólo oyendo su voz… treinta años!
Si me lo permites, me imaginaré que una vez ha oído el programa y la repetición grabada, oirá las llaves girar en la puerta – será ese locutor tan querido llegando a casa, y cogiendo a su mujer de la cintura le preguntará «He estado bien hoy, querida?»
Un beso.
Permiso concedido M Carme. Vamos a imaginar ese final adornado con el encuentro de los dos enamorados. Que bailaran al compás de las ondas que quiera regalarles la radio.
Gracias por tu sugerencia y por ponerle la nota alegre que le faltaba. Un beso guapa.
Una fidelidad nunca recompensada por desconocimiento. Ese acicalamiento es digno de premio. Una historia de amor preciosa.
Mucha suerte querida
Como en todo amor visible o invisible engalanarte para disfrutarlo es todo un arte y una premisa para acentuar ese instante de un encuentro físico o en ondas de melodía.
Gracias Elena. Un beso bonita.
Hace años hubo en Radio Granada un locutor que las tenía enamoradas a todas, hasta que se divulgó su imagen física. Al parecer tu pareja ya pasó con éxito esa prueba de fuego y puede que incluso esté de vuelta de muchas cosas. Me sorprende que a pesar de todo los sentimentos de ella, al menos, continúen intactos. Me encanta esta apuesta tuya por el amor en toda su pureza.
Muy bello relato, Mª Belén, muy bien contado y, como toda la prosa que escribes, lleno de poesía.
Enhorabuena y un abrazo.
Quizás se conocieron en algún tiempo atrás, o quizás ha sido siempre una amor platónico llevado por esas ondas melodiosas de voz. Lo que sí es cierto es que la pureza de ello hace que cada día sienta ser esa mujer enamorada de ese hombre que quizás lo fue una vez. Hay que apostar por amores sinceros en días en los que todo parece un suspiro.
Gracias Enrique siempre un encanto.
Un beso y un abrazo.
Qué frase final tan bonita. Me ha gustado Mª Belen y me ha enternecido tu protagonista.
¡Precioso!
Un besote.
Me alegra saber que has sentido esa fragilidad y ternura de la protagonista. Ese amor vivido tras las ondas de una voz modulada y llena de melodía.
Un beso Rosy.
Ninguna cita debe ser tomada a menos, y como bien demuestras, ni tan siquiera cuando uno de los dos no estará en persona. Un homenaje a la fidelidad, a la coquetería y a esa radio que ha acudido puntual durante tanto tiempo a agasajar a su oyente. Me ha gustado mucho. Nos vemos pronto (y según me cuentan) cerca. Mucha suerte 🙂
Así es, toda cita merece una muestra de coquetería y un estar puntual a la cita.
Un placer tu comentario.
Deseo que pronto nos conozcamos en persona, Santander aún es un interrogante en mi vida pero Zaragoza te espera.
Abrazos y besos. Gracias Juan Antonio. 🙂
Lo he leído tres veces y no lo entiendo. Cada vez estoy más torpe. Graba la voz del locutor en el móvil y las vuelve a escuchar. ¿Las lleva grabando 30 años? Debe ser eso, una tipa que graba durante treinta años la voz y palabras del locutor. Esta está peor que Felipe VI. En fin, cada vez tengo más dudas sobre qué es un microrrelato.
La torpeza estaría en mi manera de contar de la historia, nunca en tu lectura.
No es más que una sencilla historia de amor platónico que a través de los años continua. Sigue conservando la vieja radio de madera pero ahora, con los nuevos tiempos, puede grabar su voz con el móvil y escucharla cuantas veces quiera. Desde luego un poco locuela sí que está, jajaja…
Gracias por tu insistencia en leerlo. No siempre se acierta, pero hay que aprender de ello y crecer.
Nada de dudas sobre microrrelatos, tú lo tienes muy claro.
Un abrazo Javier.
Que bonitos gestos de amor, absurdos por supuesto, como todo lo que rodea ese sentimiento loco: acicalarse, vestirse de rojo, ponerse bonita para escuchar «su» voz. Has conseguido mezclar todos los sentidos en torno a la radio, que a priori solo parece alimentarse de uno de ellos.
Gracias Reve. Por amor se pueden llegar a hacer las mayores tonterías. Por un amor que además es platónico aún más. Todo sentimiento suyo se mezcla con aromas y con ondas de radio. Toda una vida para amar desde el otro lado.
Gracias. Un beso.
Otra voz que arrasa corazones ( y bolsillos, al parecer), qué peligro. Besos y suerte, Belén.
la voz al igual que la mirada, tiene un poder especial para la seducción. Y ese peligro está, en dejarte envolver por ella.
Gracias Eva. Un beso.
la voz al igual que la mirada, tiene un poder especial para la seducción. Y ese peligro está, en dejarte envolver por ella.
Gracias Eva. Un beso.
La voz, puede ser un elemento muy importante para la seducción, puede llegar a lo más profundo, por su calidad, por sus matices, por lo que dice, por lo que puede generar en nuestra mente. Así, que no es de extrañar que cree fantasías, pasiones, adicciones. es una bonita historia de amor aunque sea quizás no real, pero al final soñar tampoco es mala manera de vivir.
Lo has narrado muy bien. Me quedo con la parte central, por su ritmo y su contenido. Y ese final que suena tan bien.
Suerte y abrazo.
Como bien dices Antonia, la voz bien modulada puede tener un gran poder de seducción. Esos amores tras la onda o los platónicos, son irreales en esta realidad que nos rodea, pero siempre te hacen soñar y eso también es pasión.
Gracias guapa, un beso.