65. Parte de guerra
Cuando el móvil vibra en mi bolso no puedo evitar el vuelco en el estómago. Al ver tu nombre en la pantalla respiro hondo para no parecer preocupada. Igual tengo que salir corriendo como la última vez.
Escucho tus palabras que, en su atropello, carecen de significado. Las frases se ahogan y se desordenan. Debe ser que la sal de las lágrimas hace océanos en tu boca. Pero escucho alto y claro el final:
— Esta vez he ganado yo.
Recorren mi mente días de cardenales en recuerdos, paredes blancas de hospital, la negación absoluta a la denuncia, la justificación y la autoinculpación… Ahora eso se ha terminado, hija mía, ya lo verás, me digo a mí misma. Y a ver qué hacemos con el cadáver.
Esa guerra que aún debemos ganar las personas decentes sigue causando bajas y mucho daño, hasta el punto de justificar revanchas impensables.
Un saludo
JM
Es una revancha «involuntaria». Y problablemente justificada. Gracias por comentar.
Tremendo, pero, ¿qué quires que te diga? Pues que me gusta y mucho.
Un abrazo fuerte.
Gracias, Patricia.
Otro abrazo.
Tremenda guerra la que has planteado, con frentes en todas partes, igual muy cerca.
Muy bueno, Ignacio.
Saludos
Y cada una distinta…
Saludos, Ángel.
Muy bueno, justicia poética.
Gracias, M Carmen.
Jesús, parece que se plantearon eso de … a Grandes males grandes remedios. Suerte y saludos
Hola calamanda, lo cierto es que el planteamiento, el mío al escribirlo, es que ocurra de modo casual. Así que me apunto en el «debe» el hecho de que parezca premeditado.
Gracias.
Muchísimas gracias, Ana.
Me has hecho temblar con tu texto con frases como esta «Debe ser que la sal de las lágrimas hace océanos en tu boca. »
Me gustaría otro final, pero entre los posibles, me quedo con este.
Das una clara imagen del dolor, padecimiento y preocupación de una madre, ante los malos tratos que sufre su hija. todo ha acabado de manera trágica como no puede ser de otra manera, pero esta vez por lo menos alguien mató al culpable.
Buen relato, un abrazo Jesús
Un relato en que su fin justifica ¿el medio del relato? Vaya lío me he hecho yo mismo.
A veces no se puede encontrar otra salida. Está tan bien escrita que se lee como si se viera.
Has concentrando muchas cosas en pocas palabras pero al final la visión de todo lo que cuentas cobra sentido a la perfección (en mi caso y dada mi espesura mental) con una segunda lectura. Escabrosa la batalla que cuentas, en la que por desgracia y al contrario de tu protagonista lo habitual es perder y de qué manera. Mucha suerte 🙂
La venganza se mastica en el relato, no la justifico pero la haces humana con frase como «las lágrimas hace océanos en tu boca. «.
Muy bueno me encantó.
Abrazos y suerte.