31. PEPITO GRILLO (Virtudes Torres)
Jamás se separa de mí ni un instante. Siempre está alerta esperando que yo tome una decisión para, en un instante y duramente, hacerme cambiar de idea.
Constantemente me come la cabeza con frases como “pero quién te crees que eres”, “lo tuyo es oír, ver y callar”, “tu no mereces hacer ese viaje”, “¿comprarte ropa? puedes pasar con lo que tienes”…
Después desaparece dejándome hecha un mar de lágrimas. A veces escucho sus risas y sus comentarios sarcásticos: “¡qué mierda es! siempre va a hacer las cosas a mi manera, no tiene personalidad, me da un asco…”
Sentí vocación religiosa a lo que argumentó: ”menudo disgusto le vas a dar a tus padres”… “cásate”. Y me casé… con el hombre equivocado. En mil ocasiones quise abandonarlo. No lo permitió, su voz repetía sin cesar “aguanta, aguanta”, “¿dónde vas a ir?”, “tienes lo que te mereces”
Hoy vamos en el coche a tomar el aire. Es lo que le he hecho creer. Cuando esté cerca del acantilado pisaré a fondo el acelerador. No habrá tiempo para cambiar de idea. Será lo último que haga, pero lo haré a mi manera.
Muy apropiado para el día 25 que se acerca. La falta de libertad solo puede traer insatisfacciones. Ni siquiera le hubiera hecho falta planear algo tan desesperado y descabellado, para volver a tomar las riendas de su vida pero, tratándose de una ficción puede pasar.
Suerte Virtudes y feliz noche.
`No le quedaba otra. Su conciencia era su peor enemiga.
Un beso y gracias amiga por tu visita.
Hola Virtudes. Historia durilla.
Veo que tu protagonista está harta y los tiene bien puestos. Zanjará el asunto, a pesar de acabar también con su vida, mandando al otro cabrón a criar malvas.
Si puedes modifica ese «echa un mar..». Se trata del verbo hacer.
Encantado de echarte una mano.
Abrazos y suerte,
Ton.
Hola Ton
Al fin puedo conectar. Tengo por costumbre hacer una copia en papel y hoy al leerla casi me he quedado ciega al ver la falta de ortografía con lo que soy yo. Ya mandé a Jams que me lo corrigiese
Gracias por pasarte. Un abrazo.
Cuentas con mucha verisimilitud los malos tratos a una mujer y el desenlace fatal.
Saludos.
Ay María Jesús que yo no quería relatar malos tratos. Que lo mío va por otro camino.
Si te fijas en el título Pepito Grillo es la conciencia.
Mi protagonista se maltrata desde su interior.
Es una lucha entre ella y su conciencia.
Un beso.
Lo siento Virtudes, es lo que me llegó. Tal vez no puse demasiada atención en el título, debo reconocerlo.
Otro beso para ti
Tendemos a creer que los enemigos están fuera y así es en muchos casos, por suerte o por desgracia nunca faltan, pero nuestro peor oponente podemos ser nosotros mismos, a menudo nos cerramos el camino de forma inconsciente y después echamos la culpa a los demás. Tu protagonista, finalmente, ha logrado desoír esos cantos negros interiores y hacer las cosas a su manera, lástima que esa decisión, ya por fin plenamente suya, sea la última.
Un abrazo y suerte
Así es Ángel, no hay peor enemigo que uno mismo cuando está en desacuerdo con lo que hace.
La solución no podía ser otra.
Gracias por comentar.
Abrazos.
Adelante a mi morada amigo Juan.
Te explico: Pepito Grillo vive con ella desde que nació. Sólo cuando empezó a tomar decisiones fue cuando se manifestó.
Ella es débil y deja que su conciencia se apodere de ella.
Aunque dice que «se casó con el hombre equivocado», en ningún momento dice que le diera malos tratos.
Es ella misma la que se maltrata con sus pensamientos.
¡Qué se le va a hacer! Se veía venir este final.
Un abrazo muy fuerte.
Totalmente de acuerdo. Al Cesar lo que es del Cesar.
Abrazos y besos.
Virtudes, relato que describe muy bien los malos tratos no sólo físicos, sino los sicológicos que van minando la moral. Perfecto para el día de hoy.
Un beso
Sin proponérmelo he rendido un pequeño homenaje a esas mujeres aisladas.
Esta encerrada en un mundo interior que la va consumiendo.
Si el exterior también se le pone mal, es carne de cañón.
Un abrazo y un beso,
A veces somos nosotros mismos nuestro peor enemigo. Las inseguridades y complejos nos amarran impidiéndonos avanzar. Es una triste historia que me deja una duda. ¿De verdad es ella quién toma las riendas precipitándose al vacío o de nuevo es «la otra» que busca su destrucción?
Duda que comparto, «la otra» es la dominante y lo sabe todo.
Saludos.
«Serás lo que debas ser o no serás nada». Ella eligió lo último. La lucha con su conciencia que no puede dominar. Un final desacertado e ilógico.
Excelente relato Virtudes.
Un abrazo y suerte.
Me alegro de que te guste mi relato.
Creo que mi protagonista estaba muy quemada.
Un abrazo y gracias por pasar.
Ana tu comentario no sólo no me molesta sino que agrada leer puntos de vista diferentes.
Y estoy de acuerdo contigo en que hay personas más influenciables que otras. Son débiles y todo lo de alrededor les afecta.
Gracias Ana por tu visita. Besos.
Ay, madre mía! ¿Qué maneras son esas, Virtudes? Piénsalo un poquito más. No merece la pena. Esa voz, forjada en lo profundo de la infancia, es la que hay que hacer callar! Jaja!! Muy buen relato, Virtudes. Como siempre, aunque ahora terrible… Muchas felicidades!!! Me encantas!
Si ya se lo estaba yo diciendo, ve a un psicólogo que te ayude, pero nada.
Es que me ha salido muy apocada. Lo más triste es que hay gente así.
Un abrazo simpática.
Buen texto; siempre he pensado que las peores batallas se producen dentro de uno mismo…
Un abrazo y suerte, Virtudes.
Y si no se saca al exterior va carcomiendo a la persona.
Muchas gracias por tu visita y comentario.
Un abrazo Cristina.
Virtudes, lastima que se reafirme en esa fatal decisión. Hablas con claridad y ritmo de una manera de llevar la vida que no conduce a nada. Suerte y saludos
Esa forma de vivir es morir en vida. La angustia y la poca estima que de ella tiene la van consumiendo.
Un abrazo fuerte para ti Cala y gracias por tu comentario.
Nos has planteado de manera muy acertada esa conciencia que en cada momento y antes de actuar nos bombardea con preguntas, dudas, exigencias… la debilidad le hace rendirse ante ella, y dejar atrás cualquier atisbo de felicidad propia. Un acto de valentía final, por fin callará a esa pesadilla y volará hacia la libertad.
original forma de abordar el tema, me encanta Virtudes.
Un beso preciosa.
Hola Mª Belén. Aciertas de pleno. Una mujer débil que al fin saca fuerzas de flaqueza y reúne la valentía necesaria para poner el punto final.
Aunque podría haber reunido esas fuerzas para ignorar la voz de su conciencia, seguro que le habría ido mejor.
Besos para ti amiga.
Me gusta mucho, y especialmente, como dibujas la victimización aprendida de la protagonista. Para mucha gente es complicado separar los errores propios de las injusticias a las que se ven sometidas. Mucha suerte con el relato Virtudes 🙂
Que pases por aquí es para mí un honor y si encima me dices que te gusta mucho mi relato, bueno, no sabes lo feliz que me haces con ese comentario.
Gracias un abrazo.
Nuestra conciencia tiene que discernir entre el bien y el mal, pero cuando inhibe y encadena nuestras decisiones se convierte en nuestro peor enemigo. La protagonista de tu relato ha sido esclava de ella, aunque, tristemente, en un último acto asume el control. Me ha gustado mucho, Virtudes. Abrazos y felices fiestas.
Cuando se echa todo el peso y culpa sobre sí misma, es difícil salir de esa bola en la que se va sumergiendo la persona.
El desenlace pocas veces puede ser positivo.
Gracias por tu comentario y por tu visita.
También para ti y los tuyos unas felices fiestas.