PREFERIRÍA PRESENTAROSLO…
Tal vez la obra más completa de Melville sea su impresionante Moby Dyck (por eso vamos a aprovechar la ballenita en el grafismo de la inspiración), pero casi sin quererlo, Melville nos dejó un relato que está considerado como una de las mejores obras del género corto de todos los tiempos: Bartleby el escribiente.
La obra homenajeada es desconocida para mucha gente, pero no he conocido a nadie del ámbito literario que haya quedado indiferente ante este Bartleby. Un personaje fuera de lo común que «inventó» la resistencia pasiva, desmontando todos los esquemas de una sociedad en la que el sacrificio y el progreso no tienen rival alguno, y su renuncia es absolutamente descabellado. También es ese relato en el que podemos leer que la honestidad como principio puede terminar destruyéndonos y que solo la hipocresía «controlada» permite la convivencia. Entre la lastima y la pena, entre la cobardía y la más particular valentía, entre el surrealismo y la denuncia social… Bartleby es todo un personaje, y tal vez la mayor demostración sea el proceso por el que atraviesa el narrador en su trato con el personaje: admiración, desesperación, lástima, rabia…
Es un buen momento para releerlo, es corto, y aquí abajo os dejamos una copia gratis…
Me han pedido que os mandara una copia a cada uno, pero yo… preferiría no hacerlo…
Algún apunte del autor, Heman Melville
El relato de Bartleby completo
Una interesante reseña de las 1000 posibles
Una revista literaria curiosa, PNH (colaboran autores de ENTC)
Hola Jams, buena propuesta. Una cosa el link a Bartleby esta mal apunta a este mismo blog…
Eso se llama onanilink 🙂
Terminé ahora mismo la lectura, y debo decir que el personaje me parece, efectivamente, un modelo de la resistencia pasiva, aunque tiene en común con los luchadores muy poco, pues en realidad todo parte de un claro desorden emocional. La reforma laboral de hoy en día acabaría con él en la calle y en la cárcel, efectivamente, pero creo que no lo compararía nadie con Gandhi.
En un tipo entrañable, pero tan insondable que desespera.
Un abrazo
Juan M (JMSM)
Terminé ahora mismo la lectura, y debo decir que el personaje me parece, efectivamente, un modelo de la resistencia pasiva, aunque tiene en común con los luchadores muy poco, pues en realidad todo parte de un claro desorden emocional. La reforma laboral de hoy en día acabaría con él en la calle y en la cárcel, efectivamente, pero creo que no lo compararía nadie con Gandhi.
En un tipo entrañable, pero tan insondable que desespera.
Un abrazo
Juan M (JMSM)