51. Revuelo
La tormenta explotó. Las amigas caminaban por el paseo central de la feria; pronto se volvió lago. La música calló. Las estrellas se ocultaron. Luces de farolas y atracciones dejaron de brillar. Una ola de granizo golpeaba; en esa oscuridad sombría intentaban no separarse.
La muchedumbre, despavorida como ellas, pretendía protegerse. Se pisaban unos a otros sin detenerse ante nada.
Primero gritó María; alguien la abrazaba tirando de ella. Elena, en un esfuerzo desesperado e inútil intentó agarrarla. Carlos su novio, que soportaba empujones en la salida multitudinaria de una atracción, la buscaba paranoico con la luz del móvil; Elena, sin éxito, intentaba avanzar hacia él, y acercarse a las amigas.
La camisa empapada la hacía sentirse desnuda; se avergonzaba. Tropezó. Rodaba torpemente entre los charcos. Un hombre joven, asiéndola por la cintura la puso en pie. Excitado, le manoseaba el pecho; la empujó hasta el suelo de la espesa arboleda.
Tumbada junto a ella reconoció a María; embarrada y desnuda parecía muerta.
El adolescente forzó a Elena. Enloquecido intentaba violar de nuevo a su amiga inerte, pero aparecieron otros muchachos. Se pelearon entre ellos por las chicas; abusaron de ellas.
El agua ahogaba a las jóvenes bajo la tormenta.
En esta feria se ha formado un revuelo de terror para estas chicas, estos depravados aprovechan cualquier circunstancia para sus fechorías. Terrible historias nos cuenta este mes Calamanda, suerte.
Saludos.
Beto, si, me ha salido una historia trágica con este tema. Saludos y gracias.
Dios bendito, que panorama más desasosegante has dibujado.
Que asco me dan las bestias de dos piernas.
Brutal. Un relato brutal en todos los sentidos.
Abrazo gordote y suerte.
Modes, se les puede llamar bestias porque lo son. En ocasiones así se comportan peor que ellas. Besos y gracias.
Que atrocidad, Calamanda. Que una noche de feria se convierta en semejante tragedia. Según iba leyendo aumentaba mi angustia con tus descripciones de la escena.
Un saludo y mucha suerte
María Elena, estas historias crean desasosiego, es verdad. Pero a veces, como me ha ocurrido a mi, salen del ordenador de forma espontanea. Saludos y gracias.
Un relato que nos recuerda atrocidades semejantes que han pasado en la realidad, como lo que les pasó a las chicas de Alcácer.
Lorenzo, si, aquello fue bestial, como lo que ocurre en esta historia. Por ellas, quiza inconscientemente, pudo emerger esto. Gracias y saludos.
Un relato lleno de angustia. Me ha causado un gran impacto. Desde luego no deja indeferente. Mucha suerte.
Gracias, Juan Antonio.
Ana, Si, en situaciones extraordinarias se dan circunstancias, afortunadamente muy poco, de este estilo. Abrazos y saludos. Gracias.
Juan Antonio, historias así dejan su impacto. Vendran otras mas alegres y nos haran olvidar esta. Gracias y saludos.
Los buenos escritores tienen capacidad para abordar todo tipo de temas, cuando toca ser crudo, hay que saber serlo como tú lo has sido. A todos los que hemos leído este relato nos ha dado ganas de salir corriendo en defensa de las pobres muchachas. Un texto que, como han dicho en otro comentario, no deja indiferente, te golpea y bien fuerte.
Un saludo y suerte.
Ángel, estas historias, aún ficticias, suelen golpear. Gracias por tu comentario y apreciaciones positivas. Saludos
Una historia terrible, Calamanda. Me ha dejado impresionada. No puedo soportar ese tipo de conductas, no las entiendo… Uf, este mes me has impactado.
Abrazos, Calamanda.
Inés, gracias. Con tus relatos normalmente me impactas. Lo terrible es tener que leer, o escuchar, historias como estas. Abrazos.
Calamanda, duro relato el que has escrito, por desgracia esta jauría de desalmados que has reflejado son reales. Muy buen relato. Abrazos.
Salvador, gracias. Por desgracia ocurren estas cosas. Abrazos
Un relato duro; duele leerlo. Quisiera haber estado allí para abrazarlas,para rescatarlas. Muy bueno.Saludos.
María José, es así, dariamos cualquier cosa por evitar estas desgracias. Saludos y gracias.
¿Por qué se les llamará bestias a semejantes energúmenos?
Si, ya se que viene en el diccionario, pero me repatea.
Tenemos viva la memoria de demonios de este calibre, que encima se ríen de los familiares de sus victimas.
Saludos.
Virtudes, Hay demasiados nombres que hemos conocido por ser victimas de desalmados como estos. Saludos y gracias
Se me viene a la cabeza una palabra al leer tu relato expeluznante. A los violadores deberian de castrarlos.Sorprende.
Un beso
Esther, es triste pensar en ellos como fieras pero se comportan peor que ellas. Besos y gracias
Una historia cargada de tristeza y dolor, me parece muy realista por la angustia que transmite.
Un abrazo
Rosa
Rosa, gracias. Si, me ha salido -hiper realista- Abrazos
Hola, Calamanda.
Una situación espantosa la que nos traes… A mí, como mujer y como madre, me duelen este tipo de actos violentos de degenerados. Me ha llegado la angustia de las chicas.
Un abrazo, guapa.
Towanda, estos sucesos, tengo la impresión, nos llegan más a las mujeres; quiza porque estamos más espuestas a ellos. Abrazos y gracias.
¡Qué duro esta vez el micro! Bien descrita y detallada la situación. Es imposible leerlo sin que te den escalofríos.
Besos
Izaskun, gracias. Esa situación, efectivamente, es escalofriante. Besos
Hola Calamanda,
El tema del mes se presta también para las historias de esta clase, es impresionante el vuelco que le das al relato, un verdadero «Revuelo». Abrazo y saludos.
Óscar Si el tema se presta, efectivamente, Cuando se busca hacer daño estas situaciones son idoneas. gracias y saludos
Madre mía Calamanda,
Qué historia tan horrible nos cuentas, pobres chicas! Imagino ese revuelo en la zona de la feria.
Un abrazo
Blanca, es dolorosa la situación si; me costó contarla, pero ahí está. Gracias y abrazos
Un vertiginoso relato que llena de angustia, es todo muy visual, así que nos has hecho sufrir.
Además, es totaomente realista, cuántas fiestas acabarán de forma parecida.
Buen relato,
Besos
asun, es verdad, estas cosas dan vertigo. Gracias y saludos
Vértigo, angustia, asco, horror. lo has reflejado muy bien. Una historia cruda.
suerte. Besos
Anna gracias; si, da un poco de vertigo imaginar algo asi. Saludos
Relato que me produce malestar, hay temas de los que no me gusta leer. Mucha acción en tan pocas palabras. Suerte.