Ronda 2 – Poltrona 6
Los participantes con el alias : PARCA– AMULETO– EXORCISTA
deberán escribir un relato :
- El pecado de la pereza NO debe aparecer. Tema libre.
- Plazo : hasta el domingo 24 a las 23:59 hora peninsular de España
- Extensión: 123 palabras EXACTAS (título NO incluido)
- Con las palabras : cartas del tarot y patito de goma
Dejad vuestro relato en este enlace
Podéis votar en este otro
PARCA – Resbalón afortunado
Las cartas del tarot anunciaron que mi vida cambiaría con el color amarillo. Viajé a China buscando emociones, perseguí a los Minions de cine en cine, comí bananas en Brasil mientras jugaba la Carioca y pinté la casa del color de los limones. Visité las islas afortunadas de donde me traje varios canarios para que me despertaran cada mañana. Y nada parecía suceder en mi agitada vida solitaria hasta que un día tropecé con un pato de goma, de esos amarillos tan de moda, cayendo en brazos de un desconocido.
Esta tarde nos diremos “Sí quiero” y nos daremos un baño lleno de patitos de goma en la piscina del pueblo mientras el arroz vuele por los aires esperando terminar en la paella.
AMULETO – Patoso
Deambulaba por el parque durante otra tarde de ocio obligado y fracaso vital, como todas las suyas. Sin nada mejor que hacer, se acercó a una vidente. Las cartas del tarot describieron pasado y actualidad de un individuo inadaptado a su pesar, torpe para trabajos y relaciones humanas. En la baraja, al intentar predecir su futuro, apareció una imagen de un patito de goma. “Lo siento, es un cromo traspapelado de mi hijo”, se disculpó ella.
Tras sentarse en el borde del estanque el hombre se dejó caer, preso de un desconsuelo infinito. Desmañado hasta el final, ni siquiera supo hundirse como pretendía. Al escuchar un graznido su cuerpo reaccionó.
Desde el principio ocupó un lugar preferente en la bandada, camino del sur.
EXORCISTA – Algo del pasado
Allá en Leshoto, una echadora de cartas de tarot profetizó tres cosas: que su esposo moriría de manera fulminante, que no concebiría hijo alguno y que, en su vejez, junto a un torrente de aguas cálidas, una pasión del pasado regresaría para continuar algo que un día interrumpieron.
Pierre murió atragantado durante el golpe militar que asoló el país y su vientre, pese a haber flirteado con hombres apuestos, no había conseguido el sueño de la maternidad. Sin duda, dos de las tres profecías se habían cumplido. Ahora, en el ocaso de su vida, sumergida en un baño de espuma, rememora la tercera y sonríe negando con la cabeza… sin vislumbrar siquiera cómo un patito de goma se abre camino entre sus piernas.