SEP183. ESTHER, de Francesc Barberá Pascual
Hace ya unos meses que me mudé a Stherling con la esperanza de rehacer mi vida. Sin embargo, cualquier intento por conseguirlo ha resultado esthéril. Todo me recuerda a ella. Por las noches duermo sobre su estherilla de playa. Veo una y otra vez aquellas películas con las que nos desthernillábamos de risa. Me sigo poniendo el jersey de poliésther que tanto le gustaba. Y por si fuera poco, he acabado cayendo en sus mismas adicciones. Ahora me fumo dos paquetes de Chesther al día y como sin ningún control. Me he abandonado totalmente. Apenas salgo de este esthercolero en el que se ha convertido mi casa. Ya no sé qué hacer. Ayer fui al médico para ver si me podía ayudar. Me dijo que vigilara el colestherol y me recetó unos estheroides para el asma. Además, me ha aconsejado que cambie mis hábitos y emplee el tiempo en otros menestheres. Lo he intentado, pero no puedo quitármela de la cabeza. Creo que ha llegado el momento de volver a encontrarme con ella,
pienso mientras me coloco el cuchillo a la altura del esthernón, dispuesto a escuchar, por última vez, los esthertores de la muerte.
Joder, Barberá, te superas día a día. A mí me ha encantado y me ha despertado una sonrisa, pero lo hubiera hecho más cortito, el relato!
Enhorabuena!!!
Un saludo de La Marca Amarilla!!
Muchas gracias, La Marca, o mejor dicho Miguel Ángel. Me doy por satisfecho si te ha hecho sonreir. Acostumbro a hacerlos más cortos, pero en esta ocasión no sabía por dónde cortar. Gracias por el consejo. Un saludo!
Pobre Esther!!! Bravo Francesc!!!
Besos desde el aire
Pobre protagonista, diría yo! Gracias, Rosa! Un beso.
The ha quedado estupendamenthe. Y la sonrisa tiene un valor añadido.
Suerte y recibe mi saludo.
Gracias, Anna. Con tu sonrisa ya me vale. Un saludo.
Y yo me he desthernillado de risa por tanta gracia en esthe relato. Es lo que tiene la cosa que hay nombres que dan mucho juego o juegos que dan mucho nombre. Te deseo suerte por tu imaginación y trabajo.Abrazo.
p.d. La próxima chica mira que no lleve nada intercalado o sí.
Muchas gracias, Antonia. He de decir que la idea del relato se la pedí prestada a Jorge Fernández-Bermejo. Él escribió «El anacoreta», que juega con el nombre de Ana. Y se me ocurrió hacer lo propio con Esther. Un abrazo.
Buen juego con el nombre, aunque como te sugiere mi tocayo, yo lo habría podado un poco. El final apoteósico. Suerte.
Gracias, Miguelángel. Es verdad que me ha quedado un poco largo, pero no sabía por dónde cortarlo. Un abrazo.
Le hubieras quitado las haches 😛 A mí no me sobró nada.
Es genial, Francesc. Aunque existe el nombre Ester sin hache (así es mi segundo nombre 🙂 sin duda tu micro gana con esa hache intercalada que hace más patente y potente el nombre de la chica y su constante recuerdo.
El texto se lee con una sonrisa hasta el trágico final.
Un abrazo.
Incluido el trágico final, diria yo. Gracioso, divertido, original e imaginativo. Un abrazo
Gracias, Sara. Precisamente, en un principio lo titulé Ester y las palabras que conteían el nombre, no llevaban la hache intercalada. Pero lo di a leer a varias personas y practicamente nadie se percataba del juego de palabras, así que lo cambié. Un abrazo.
Gracias, Aurora. Un abrazo.
Es genial el juego de palabras y muy buen relato, con sorpresa final y trágica
Gracias, Lorena. He intentado darle un toque tragicómico. Un abrazo.
Jo Francesc, un traje de alta costura en esta pasarela de entc. Trabajado al detalle detalle. La guinda del pastel de este mes. Bravo.
Un abrazo.
Muchas gracias, Susana. La verdad es que empecé a escribirlo a partir de una lista de palabras que contenían «ester» y que no tenían nada que ver entre sí. Así que tuve que darle bastantes vueltas a la cabeza. Un abrazo.
Uyyyyyyyyyy que sorprendente tu micro, me ha gustado mucho!!
Suerte.
Besicos michos.
Muchas gracias. Besos!
¡Pero que bruta soy. Leyendo el comentario de Sara me he dado cuenta de que la historia es triste, pero es tan original el texto que no vi, o no quise ver ese final tan tristón. A veces una es mala lectora.
Buen relato de todas formas.
No creo que lo hayas entendido mal. Es un relato triste y al mismo tiempo cómico. Todo depende del punto de vista del lector.
Cierre de lujo para el mes, Francesc. Buena suerte.
Gracias, Miguel Ángel. Suerte a ti también en el caso de que hayas participado.
Ingenioso y formalmente revolucionario. Una potente combinación de fondo y forma, Espectacular Francesc.
Muchas gracias, Arantza. Como dije antes, la idea se la tomé prestada a Jorge Fernández-Bermejo. De todas formas no ha sido fácil conjugar fondo y forma. Un abrazo.
En tu línea…estupendo Fransesc!
Mucha suerte.
Gracias, Paloma! 🙂
Muy originhel tu relato. Enhorabuena.
Gracias, Gloria.
Francesc, el juego de esa consonante nos lleva por el relato anunciando un nombre que cada uno imagina. Suerte y saludos. Calamanda
Gracias, Calamanda. Un saludo.
Muy divertido, me ha gustado mucho.
Muy divertido, me ha gustado mucho.
Si te ha parecido divertido me doy por satisfecho, es lo que pretendía. Un saludo.
Que me ha gustado bastante Francesc, muy original este juego con la palabra Esther, sin descuidar el fondo de la historia. Suerte.
Un saludo indio
Mitakuye oyasin
Gracias, David. Es lo que he intentado: no descuidar la historia. Un saludo.
Muy bueno Francesc y muy original. Has hecho una propuesta llena de ingenio.
Suerte y abrazos.
http://montesinadas.blogspot.com.es/
Se agradece el comentario. Un abrazo y suerte!
Muy bueno. Bueno, creo que ya te lo dije… Genial, Francesc.
Un abrazo
Muchas gracias, Miguel Ángel! Sí, fuiste una de las personas a las que le pedí opinión. Un abrazo y suerte!
De nada, Franc Esc. Jeje.
Prototipo de relato que me encanta y cautiva, no solo cuentas una historia estupenda sino que encima bailas con ls palabras y letras, magnífico. A ver si vuelves al podium.
Gracias, Mel. Lo de volver al podio está difícil. Me conformo con que te guste. Un saludo.
¡Bravo!, muy buen relato.
Abrazos.
Gracias, María. Un abrazo.
Hola Francesc, en este «menesther» de comentar decirte que me quedé sorprendida del gran amor por Esther que siente el protagonista. Lo has dejado patente durante todo el relato hasta ese final tan trágico. Te felicito.
Un saludo
Rosa.