SEP77. AMOR DE VERANO, de Blanca Oteiza Corujo
Como fruta madura me deja un sabor dulce el recuerdo del verano ya pasado. Contemplo el aire vacío desde el balcón de mi casa y no puedo sino imaginar las olas del mar agitándose al frente. Los coches pasan bajo mis pies sonando las bocinas y derrapando en la rotonda pero yo no hago sino escuchar el canto de las olas rompiendo en el puerto. Las gentes pasan con prisa por la acera pero mi mente viaja a los paseos en el ocaso del día cogidos de la mano. La ciudad se extiende hasta perderse en el horizonte, mas mis ojos miran al infinito de la reminiscencia del aroma de las noches de verano. Dulce recuerdo el que me deja el beso de despedida.
Dulce sabor, el de un amor de verano. Creo que a tu «prota» le va a resultar difícil olvidarlo.
Un beso, Blanca.
Qué bonito!!! Es sensacional poder mantener vivos los buenos recuerdos, prolongar los momentos de felicidad.
Suerte!!!
Un abrazo!!!
Gracias chicas.
Un saludo, Blanca
Blanca, este amor de verano es de este año??.
Recuérdalos, los míos son del siglo pasado.
Muy bonito.
Un beso
Epísis, no este amor de verano no es de este año. Pero me he inspirado en los que tuve hace algunos años.
Saludos, Blanca
Dulces recuerdos los besos de despedida aunque sean de amores lejanos, conmovedor.
Una tilde en el más final, pero no tiene mucha importancia. Buenos recuerdos.
Hola Ricardo,
El mas del final lo he escrito como un pero, así que no lleva tilde, quizás lo que sobre sea la coma que le precede.
Un saludo, blanca