72. Viaje geosentimental por los alrededores del corazón
Todo iba bien hasta que ella se fue a Sevilla. Cuando volvió, me hice el sueco. Bajito y moreno, me pilló enseguida y se armó la de San Quintín. Intenté irme por los Cerros de Úbeda y acabé durmiendo a la luna de Valencia. Pero París bien vale una misa y, después de pasar un tiempo entre Pinto y Valdemoro, lo volvimos a intentar. Fue salir de Málaga y meternos en Malagón. Al final ella puso pies en Polvorosa, provincia de Palencia, y yo, para intentar olvidarla, aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid, tomé las de Villadiego, dirección Burgos. Ancha es Castilla y, sin embargo, el mundo no deja de ser un pañuelo, porque no hemos tardado demasiado en volvernos a encontrar. Ahora los dos estamos en Babia. Y mañana… ¡que salga el sol por Antequera! Por algo dicen que todos los caminos conducen a Roma, que es amor pero al revés.
Caray, Ernesto. Creo que te has esmerado con esta muestra de ejercicio literario, pero que, a la vez, esconde mucho sentido y belleza formal. Enhorabuena y suerte. Un saludo.
Jajaja me ha encantado. Eres de los mios,mis amigos siempre me dicen que tengo un refranillo para cada ocasión. Confieso que es herencia paterna.
Tú has aprovechado de forma genial todos estos dichos populares que están en boca de todos.
Te felicito porque te ha quedado un micro redondo y divertido. Me encanta estar en babia en el sentido figurado de la palabra y soy forofa de esperar a que salga el sol por Antequera.
Felicidades y gracias por hacerme pasar tan buen rato.
Genial desde el título
Eres el Covarrubias del amor. Tus cuentos… un tesoro.
Enhorabuena!!!
Abrzssss!!!
Me encanta lo bien que hilvanas estos relatos tuyos tan bien llevados. Un ejercicio de ingenio para una enredada historia de amor con final redondo. Genial!
Entonces… ¿ella se fue a Sevilla?, jó, pues peor para ella, porque además de perder la silla perdió un tiempo precioso para disfrutar de tus letras y tu imaginación. ¡Sombrerazo! ¡Enhorabuena Ernesto!
Buenísimo de principio a fin.
Ya lo han dicho todos: ¡genial! Muchas felicidades.
Oleee!!!
Como de gustos no hay nada escrito, nobleza obliga decir que tu micro es excelente, y además como quien calla otorga, yo me callo y me quito el sombrero. ¡»Chapeau», Ernesto!
Ernesto, fenomenal juego de situaciones y final redondo. Suerte y saludos
Menudo recorrido, me ha encantado!! Suerte
Besicos muchos.