50. VIDAS CRUZADAS (Javier Puchades)
Una mañana de lluvia de un día cualquiera. Unos padres. Una llamada a la puerta. Unas palabras acuchillando el instante. Un grito sordo. Un dolor irrespirable. Sollozos que adormecen el silencio. Un ¿cómo?, un ¿cuándo?, un ¿dónde?, un ¿por qué? Un millón de preguntas con pocas respuestas. Vidas que el azar cruza y el destino convierte en recuerdo imborrable.
Él sigue mirando hacia atrás cada vez que pasa, huyendo de nuevo, escapando como aquel día, cuando bajo brumas de alcohol y lluvia aceleró lejos de allí. Dejó enterradas en aquella esquina muchas vidas: la de la niña, la de los padres y la suya.
Javier, un relato muy visual, con frases como flashes con las que a fogonazos nos vas contando la historia de trágico final.
Se ajusta perfectamente a la imagen y aunque se prescinda de ella se entiende muy bien.
Enhorabuena y mucha suerte.
Besos muy muy apretados.
Pilar, muchas gracias por tu comentario.
Me gusta eso de los flashes, describe muy bien lo que mi primer párrafo va diciendo. Yo también creo que mi relato tiene la misma fuerza sin la fotografía.
Muchos besos.
Una tragedia agazapada en cada pregunta.
Una triste historia que conlleva tanta realidad que duele.
La esencia de una sombra que no tiene cura.
Un abrazoooo, Javier.
Me gusta leerte en diferentes sitios 🙂
Amparo, muchas gracias por tu comentario. Me gustan esas frases con las que has descrito mi relato.
A mí también me encanta leerte por los diverso lugares donde coincidimos.
Un abrazoooooo.
A veces todo termina cuando alguien se cruza con quien no debe en el momento más inoportuno. Destino se le llama a lo que sucede de improviso y hace que todo cambie. Las consecuencias son tan tremendas que, tras la perplejidad, afloran preguntas, cuya respuesta solo conoce quien ha causado el daño, de cuya mala conciencia nunca podrá escapar por mucho que huya, ni la lluvia podrá limpiar la negrura que ha provocado.
Un tragedia bajo dos puntos de vista, la de las víctimas en el primer párrafo, que se rematan con la del verdugo en las últimas líneas.
Un abrazo grande, Javier, Suerte
Ángel, muchas gracias por tu comentario, has visto muy bien lo que he querido plasmar en mi relato.
Un abrazo enorme.
Como novato recién llegado, te diré que me ha encantado tu relato . Se ve perfectamente todo lo que nos narras. Un abrazo.
Luis, muchas gracias por tu comentario.
Un abrazo.
Se cruzan las vidas de manera trágica como se cruzan los dos párrafos que estructuran tu historia. El accidente provoca miles de preguntas para las que ya no hay respuesta. Y arranca, junto a la vida de la niña, el sentido de la vida para los padres y la conciencia limpia del conductor borracho.
Muy bien contado, Javier. Me encanta el ritmo que consigues con las frases breves de la primera parte.
Enhorabuena y besos.
Carmen, muchas gracias por tu comentario. En la primera parte con esas frases he querido mostrar la reacción de unos padres ante una noticia inesperada y dura, espero haberlo conseguido.
Besos.
Javier, relato trágico y cargado de preguntas. Suerte y saludos. Suerte y saludos
Calamanda, muchas gracias por tu comentario.
Un saludo.
Conductor borracho se da a la fuga, uf, qué duro relato y qué bien narrado, Javier, qué bien nos haces llegar tantas emociones entremezcladas. En dos párrafos, dos caras de la misma moneda, la tragedia que ya nunca podrá olvidarse.
Muy buena historia, mucha suerte con ella. Saludos.
Maribel, muchas gracias por tu comentario. Me ha gustado eso que has dicho de dos caras de una misma moneda, define muy bien mi relato.
Un saludo.
Tu relato golpea, con esas frases cortas, esas preguntas. Son como flashes que iluminan la escena que no queremos ver. Primero desde el punto de vista de unos padres destrozados y luego desde la piel del culpable. Todo dolor.
Genial.
Suerte y abrazos
Anna, muchas gracias por tu comentario. Tienes razón, con esas frases cortas he querido marcar el ritmo del principio del relato, como tú muy bien dices son como flashes.
Un abrazo.