57. YXY
Josemari despliega su paraguas en una calle de cristales en acecho y visillos despiadados. Arrastra su ambigüedad por una ciudad de fantasmas y mercurio. Una sombra le persigue. Su propia sombra desgajada. Aquella maldita sombra quejumbrosa y contumaz que llamaban Marijose.
Tan breve como preciso y directo. Me ha gustado, Luís.
Suerte y un abrazo.
Hola, Luis.
Contundente!!!
Escueto, sin desperdicio, sorprendente.
Un buen relato!!!!
Un abrazooo
Luis, escueta y curiosa la historia de esta Marijose. Suerte y saludos
Para que luego digan que el orden de los factores no altera el producto
Abrazos
Una mujer elige la naturaleza que prefiere, pero la anterior también le pide cuentas por abandono. El texto juega con el lector, con un título que causa curiosidad y la palabra «ambigüedad» en la mitad, pero no es hasta el golpe final cuando todo encaja y consigue el objetivo de sorprender.
Un relato que podría haber sido una historia más larga, pero no hubiera sido tan rotundo, un mazazo muy bien traído.
Un abrazo. Luis. Suerte
Los cromosonas son así de caprichosos aunque a veces hay algún intruso, Ángel
Me encanta, Luis. Muy bien escrito, preciso y contundente.
Suerte.
Tan breve como rotundo, y es que no hacen falta más palabras.
Mucha suerte Luis.
El pasado pide cuentas…genial, me encanta. Suerte.
Una maravilla de relato, desde el título al final. La primera frase ya es de las que calan hondo.
Solo a modo de apunte, por si te interesa el tema, creo que en el plano científico igual no sería muy correcto lo que planteas. Las características físicas de una persona XYY serían de hombre, no serían ambiguas. Si bien todos sabemos que la identidad de género tiene poco que ver con lo que parecemos físicamente ni genéticamente.
Un abrazo y mucha suerte,
Querer ser y no ser, creo entender. No sé bien si te he entendido, escueto y dejado a la imaginación del lector.
Suerte.
Besicos muchos.