Esta Noche Te Cuento. Concurso de relatos cortos

Single Blog Title

This is a single blog caption

DIC30. RESTAURACIÓN, de María Elejoste Larrucea (Mel)

Oh sí, le recuerdo. En esta foto está más joven y aseado pero es él. ¿Cómo se llamaba?… ¡Charlie! Sí, eso. No, no, estuvo solo unos días, luego se fue sin despedirse, es lo normal ¿sabe? Esta gente… Verá, el padre Carmelo, que es un santo, por Navidad siempre acoge a un pobre, un vagabundo. Le da cama, comida y le aloja en la casa cural. A cambio solo pide que limpien el altar de los Ángeles, ellos también se merecen un regalo en estas fechas. Durante el año se acumula polvo y los angelotes se vuelven grises. Dirá usted que me hago mayor, pero yo hasta diría que empeoran, se les ve… demacrados, escuálidos. Todos los años lo mismo sí, yo llevo aquí en la parroquia… veinte años. Es ya una tradición. Vienen familias necesitadas de los pueblos de alrededor, pero Don Carmelo les remite a servicios sociales. Insiste en que sea un joven de estos solitarios… sí, joven, hay que estar ágil para subir al retablo ¿sabe? No sé cómo, llámelo milagro, espíritu navideño… en fin, caridad por caridad, siempre hacen un buen trabajo. Fíjese señor inspector, vea que regordetes y sonrosados están los angelitos.

http://melodiasdecuentos.blogspot.com.es/

64 Responses

  1. Mel! Amiga, me gusta pero… no sé por qué! Tiene el toque ese de misterio bañado de escenas bonitas tan difícil de conseguir. Me gusta mucho y no saber el motivo exacto sólo hace que me guste más y más… Un súper abrazo!

    1. ja ja ja. mi hija me ha dicho : amá cada día escribes cosas más raras. Hum yo me fijaría en el título que tiene varias acepciones?? Te deseo unas felices fiestas, cena de nochebuena incluida.

  2. Tu lo que tiés es mu mala lesssshhhhheeeeee!!!!!!!!!!!!

    Me ha recordado una cancioncita…. «….. de esos que hinchan los carrillos en los cuaaaaaa / dros de Murilloooooo!!!!!!!!!»»

    Hala, que siga Anita U, que a mi se me sonroja el alma, se me sonrojaaaaaaaa!!!!!

    Abrazosssssssssss.

  3. Creo que con esta perorata de la protagonista, el inspector atará algunos cabos que pondrán en aprietos al padre Carmelo. ¿Dónde estará Charlie? Buen relato, me gusta la forma ingenua de contar de este personaje, hace que uno intuya que cosas terribles ocurren dentro de la iglesia. ¡Suerte!

    Saludos.

    1. Menudo comentario!!, eskerrik asko Izaskun. Eso, a la imaginación del lector. Si te ha inquietado me alegro, eso pretendía, sugerir, intrigar, que la imaginación complete la escena.

  4. Me ha recordado una escena de la peli Hellraiser, una pared de la que salen cabezas caníbales en su jugo, puagff.
    Mel, viva el espíritu navideño. Te van a decir, amá, que tenemos hoy para comer ji jiji.
    Un beso y feliz comida

    1. Epi, prometo no ver esa peli, puagggg. Ay las comidas navideñas, por cierto hace muchossss años estuve en Madrid en un restaurante erótico, donde toda la comida tenía formas anatómico-sabrosas. Felices fiestas.

    1. ya veo que no soy la única con ideas macabras…podría ser que cada mendigo acabase en el «reino de los ángeles», el retablo cada vez más lleno, interesante sí, gracias Salvador!!!

  5. Pues, no sé quién será el vagabundo ese que deja tan lustrosos a los angelitos… porque, en veinte años… no será es el mismo, no? Quizá un escultor que vuelve del pasado a cuidar de su obra??? jajajaj ¡me doy!.
    Un abrazo, Mel.
    Rosy

    1. Buenooo me confieso. Es un guiño a «los ángeles de Charlie». En aquella serie nadie sabía si Charlie existía de verdad o no, solo conocíamos a las «ángelas».
      Restauración: Actividad de quien tiene o explota un restaurante.
      El Charlie anual, cada año un vagabundo, desaparece por que los ángeles se lo comen -es su cena navideña- vale tengo el espíritu navideño un poco alterado… es que me faltaba hacer un relato intrigante con historia oculta… Besos Rosy no¿?

    2. Vaya y yo complicándome la vida…. desestimé lo de las comidas y a «los Ángeles de Charlie» no los ubicaba en un micro de navidad.
      ¡Vaya imaginación y «rebuscación» Mel, claro, ahora se entiende que estén tan gorditos!
      (aunque lo del cirujano de prótesis en paro tampoco está nada mal… jeje)
      Más besos, Mel.

  6. ¿Dónde estará Charlie? Yo creo que se fue a escribir tu historia y otros cuantos cuentos de Navidad, je, je…

    Muy bueno, como dicen por ahí, el tono coloquial, la narración directa… esconden algo muy oscuro… al cura le gustan los jóvenes… los angelotes están muy limpios… ay.ay.ayyyyy… no sé yo…

    Intriga servida para Nochebuenaaa!!!

    Zorionaaaak!!!!
    Muxu
    Marta

  7. Yo lo que veo es que el cura es un tío fresco. Y agarrao no te digo ná. O sea que se pasa todo el año dando de comer el polvo a los pobres angelotes, y luego con la escusa de una cena le hace de sacar brillo a un pipiolo. Y todo con la idea de atiborrar a los susodichos para todo el año.
    Lo que yo digo Un cura con mucha jeta.
    Este año de cena nada con plumas por si acaso.
    Un abrazo

  8. A mí me ha parecido muy divertido y, desde luego, original, agarrando el espíritu navideño y tragándoselo de un bocado. Joé, en este país ya hasta los ángeles pasan hambre… Besos y suerte.

  9. Se llama canibalismo angelical mEL. Buena historia y bien desarrollada, no le falta de nada, ni polvo, ni brillo, ni caridad, en fin un mosaico navideño. Besote. Felicidades y suerte.

  10. Ay Ana, vaya interpretación que se te ha ocurrido, no dudo que exista de eso en la realidad, pero aquí en este micro la explicación era mucho peor y más fantástica. Te deseo lo mismo, abrazos

    1. Gracias Esther, se me ha hecho curioso, lo dejé abierto, inquietante… a propósito pero creía que la explicación estaba claramente insinuada… y resulta que da para muchas interpretaciones. Más abrazos,

  11. Hola, Mel.

    No he podido evitar ir leyendo los comentarios…
    Ya el padre Carmelo me ofrecía ciertas dudas por eso de preferir siempre a jóvenes solitarios y, a poder ser, sin familia. Jó, qué bueno, y qué macabro texto.

    Un abrazo, guapa.

  12. Se queda en el aire para que cada uno ponga la guinda que le apetezca. Y yo me pienso lo peor y desconfío del curilla, que a saber la causa de que le haya dado sólo por los ángeles con olvido del resto de los santos de la iglesia y posibles crucifijos, pinturas, confesionarios, reclinatorios y demás mobiliario místico.
    Me ha agradado mucho su tono coloquial; lo hace muy próximo al lector.
    Un beso y mucha suerte, Mel.

Leave a Reply