Esta Noche Te Cuento. Concurso de relatos cortos

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DIC56. CIRUGIA NAVIDEÑA, de Nicoleta Ionescu

– Me he decidido, doctor. El número 24. Es el más caro, más doloroso, pero vale la pena. Lo necesito, doctor.
– Muy bién, señora, vamos a fijar los detalles.
– Sí, doctor. Olor a resina – sí; abeto inmenso, adornado con globos relucientes – sí; Papá Noel con trineo y renos – sí; mamá y papá felices, junto a mí, abrazándome – sí; un montón de regalos en el salón – sí. ¿Cómo? ¿Qué regalos, doctor? Pues… una muñeca muy grande, como la de Mercedes, un pequeño piano rosado, de plástico, como el de Teresita, accesorios de hada: diadema, varita mágica, con una estrellita en su punta…. Y… zapatillos color de rosa, con  florecitas blancas, un vestidito plateado, con lazos y volantes… Mira, aquí vienen todas mis amiguitas, mamá… Soy una princesa….  Estoy de pié en la silla… Mira la gran tarta, mamá…. las siete velas encendidas…  Soplo y ….
– Cuidado, señora, no está permitido sobreponer los injertos, son muy delicados y no se prenderán bien. El implante de memoria de cumpleaños salió muy bién. Pero éste de Navidad es algo más difícil. Necesita anestesia. Lo ingresaremos aquí, en este espacio vacío, que tiene Ud. junto al corazón.

 http://cesariarey.wordpress.com/

41 Responses

    1. Nicoleta

      Muchas gracias, Susana. Tienes razón, hay personas que tuvieron una infancia austera que dejó espacios vacíos en sus almas.
      Un abrazo.

    1. Nicoleta

      Gracias, Calamanda. Me gustaría existir tal doctores, que hagan cirugía estética en las almas mutiladas o simplemente infelices.
      Felices fiestas a ti también.

  1. Inés Z*

    Nicoleta, tu relato es tremendamente original y futurista; pero pobre mujer, es triste tener espacios vacíos junto al corazón.

    Un beso!!

    1. Nicoleta

      Gracias, Inés, por tu comentario. Tal como esta mujer hay mucha gente. Quise imaginar una solución optimista, creo que si un@ coloca una imágen feliz de sí mismo, aunque falsa, en uno de aquellos espacios vacíos, puede mejorar un poco su vida.
      Un abrazo.

  2. ¡Muy original la idea Nicoleta, me ha parecido estupenda! Te confieso que al empezar a leer pensé que pretendías extirpar definitivamente determinados días festivos de la vida de la protagonista, sé de más de una persona que le gustaría que no estuvieran en el caklendario ;o)) Felicidades y suerte. Un bico.

    1. Nicoleta

      Me alegro de que te haya gustado, Eva. Muchas gracias por leer y comentar. En cuanto a tu idea, cada uno quiere lo que no tiene: hay personas que son hartas de fiestas y notan solo la hipocresía de éstas y hay otros que necesitan vivir las alegrías que no tuvieron a su tiempo.
      Un abrazo.

  3. Nicoleta

    P.S. Después de enviar el relato noté que me falta el acento en el título (cirugía) y puse acentos donde no hay (pie, bien);si notáis otras faltas, por favor, decídmelo; las voy a corregir en el cuento de mi blog.
    Gracias.

  4. Sotirios.

    Nicoleta, un relato satírico combinando Navidad y cirugía estética. Muy original y divertido. Te deseo unas felices fiestas, Sotirios.

    1. Nicoleta

      Gracias, Sotirios. Me sorprenden y me alegran las opiniones opuestas de los que leyeron mi relato. Algunos descubren la inmensa tristeza de la mujer, otros, como tú, leen un cuento divertido y satírico.
      Creo que esta ambivalencia existe en el texto, porque existe en la vida misma.
      Un abrazo.

  5. Ginette Gilart

    Tristemente estamos obnubilados por la publicidad y confundimos felicidad con abundancia.Es lo que le pasa a tu protagonista y a ciertas personas que recurren a la cirugía estética( en ese caso para modificar su cuerpo según ciertos cánones de belleza).
    Un abrazo, Nicoleta y Felices Fiestas.

    1. Nicoleta

      Gracias, Ginette, por tu comentario. Los artifícios representan 90% del ser humano, o más. Solo los animales son naturales. ¿Cuántos de estos artifícios son necesarios y cuántos son fútiles? Existe una cirugía estética reparatoria y una que crea muñecas Barbie monstruosas. No sé si mi personaje quiere una prótesis para compensar una ivalididez del alma o solo quiere mistificar su pasado para vivir entre ilusiones.
      Cierto es que hay una zona gris allá, en su vida.
      Un abrazo.

    1. Nicoleta

      Gracias, Maria. Los implantes de cualquier tipo despertan un problema moral. ¿Qué es mejor? Aceptar con dignidad lo que recibes – fatalismo, o tomar iniciativa para cambiar lo que es posible – activismo.
      Un abrazo.

  6. Al empezar a leer, pensaba que iba de lo contrario, esto es, que quería que le quitasen los recuerdos de la nochebuena, es lo que haría yo, así que me ha sorprendido que se los quiera implantar. Y en el hueco vacío junto al corazón ¡Qué horror! Por que con ese recuerdo feliz, la comparativa tiene que ser tristísima, creo yo. Si no quieres taza, toma tazón. Ocurrente, original, pero ¡tan triste!

    1. Nicoleta

      Gracias, Aurora. Los implantes que desea la mujer son de los momentos de la infancia en que es necesario mostrar la niño que es muy importante para su familia, que es el más importante y que merece ser amado y celebrado. Y no solo a los niños. A los viejos, a los padres, a los hermanos etc.
      Un abrazo.

  7. Mercedes Jiménez

    Nicoleta, me ha gustado mucho tu relato.Como dicen todos es muy original y está muy bien hilado, con ese ritmo atropellado al final que encaja tan bien con los injertos superpuestos.Por cierto, buen invento el de los implantes de memoria, yo me pido para los reyes un implante de memoria de una velada romántica con George Clooney,jiji.Suerte y felices fiestas, Nicoleta.

    1. Nicoleta

      Mercedes, gracias por tu comentario, me hiciste reír al final. ¿Cómo sería un almacen de donde se comprasen chips o tarjetas de bellos recuerdos para implantarlos en el cerebro después de borrar o dar «eject» a los que nos molestan?
      Un abrazo.

  8. Te podría decir muchas cosas, pero resumidas te digo «chapeau».
    Es original, bien narrado, con sorpresa final grande y sobre todo, de que manera más bien ambientada has plasmado una falta de cariño y recuerdos de infancia.
    Me da mucha pena esa persona.Lo del espacio vaío junto al corazón es brutal.
    Un beso y mucha suerte.

  9. Anonymous

    Hola, Nicoleta!

    Duro y a la vez conmovedor relato. Muy bien narrado y con un ritmo frenético que se mantiene hasta el final, que se va anunciando.
    Triste y poético, carencias afectivas que se llenan con objetos materiales, coincido con otros compañeros que ya han comentado lo del «vacío cerca del corazón», desolador!

    Me ha encantado!!!

    Mucha suerte y que pases muy buenas fiestas!!!
    Un fuerte abrazo
    Marta

  10. Nicoleta

    Gracias, Ana, tu comentario me halaga demasiado. Te admiro por la sagacidad de cada comentario que haces, a todos los relatos, por el brillo de tus palabras y la bondad que ofreces a todos, incluso a mí.
    Felices Fiestas, Ana.

  11. Lo siento, no llego a entender el relato, problema mío, sin duda. Lo he leído hasta tres veces y algo se me escapa. ¿Hacen la cirugía a la madre, junto al corazón?

  12. Nicoleta, un relato futurista y muy original.
    Realmente me sorprendes porque lo mismo escribes sobre la historia del pasado que imaginas un mañana donde todo es posible.
    Hagas lo que hagas el resultado siempre me gusta.
    Quizás algun dia lo que cuentas se haga realidad. ¿Quien sabe?

    Que tengas mucha suerte. Felices fiestas!

  13. Nicoleta

    Gracias, José Ángel. Si curar el cuepo es dificil, curar el alma de este modo es algo raro hoy día, pero tienes razón, ¿quién sabe que será mañana?
    Felices Fiestas

  14. Original relato Nicoleta. Si todo fuera así de fácil ¿verdad? quedaría fuera de la seguridad social y al alcance de pocos. Lo bueno que tiene la memoria selectiva es que aunque haya poco bueno es lo que destaca sobre lo malo, aunque esta mujer parece que no lo tuvo y termina comprándolo. Menos mal que queda dentro de la ciencial ficción.
    Suerte y feliz año nuevo.

  15. Jesús Alfonso Redondo Lavín

    Dentro de poco, cuando sacrifiquen a unas cuantas más ratas de laboratorio, esa ficción que describes puede ser posible. Me ha recordado a aquel que, al contrario que en tu relato, quería lograr ser más vasco con sucesivas lobotomías y al final se pasó en sus deseos y resultó ser Más, pero no vasco.
    Mis deseos de felicidad para 2013, Nicoleta.

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