Esta Noche Te Cuento. Concurso de relatos cortos

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ENE102. LA BALLENA, de José Vicente Pérez Bris

-¡Por allí resopla!-gritó el marinero acodado a mi lado en la chalupa.
Brincábamos sobre olas enormes, en pos del animal más bello que vieran mis ojos. El arponero preparó la saeta y los músculos del brazo se le tensaron como cuerdas de violín.
Cuando el monstruo cabalgó sobre la siguiente cresta de espuma, dejando al descubierto su costado, el cazador lanzó la muerte desde lejos.
El acero templado penetró en su carne como mantequilla, hundiéndose hasta el mango.
Yo baldeaba la soga del arpón para que no se quemase, mientras ésta volaba arrastrada por el cetáceo.
-Sigue así, pequeña Jane-gritó el timonel animándome. Era la primera mujer enrolada en un ballenero y deseaba hacer carrera en la mar.
La ballena viró en redondo súbitamente, abalanzándose contra el bote. Su resoplido se hizo intenso, ensordecedor. Lo último que pude ver fue la mole gris que nos sepultaba bajo las olas para siempre. Sentí toneladas de presión sobre mi pecho.
Entonces fue cuando desperté sobresaltada, bajo el peso de mi marido, que resoplaba roncando con un auténtico ballenato.

32 Responses

  1. Ángeles Sánchez Gandarillas

    Ja, ja, ja… Después de «embarcarme» a bordo del ballenero, me sacas sin salvavidas a la realidad.
    Ha sido muy interesante, mucho. Muy buenas esas letras que me zarandearon en los reflujos de la imaginación.
    Lines

  2. Anonymous

    Gracias por tu comentario Lines. Me apetecía mucho escribir algo que ponga una sonrisa en la cuesta de enero.

    Besos. Jose

  3. Anonymous

    Muy bien ambientada la narración sobre la caza de la ballena, el léxico, los movimientos, me ha encantado lo de tensarse los músculos como las cuerdas de un violín, recreas imágenes de manera muy directa, visual.

    Y el giro final, fantástico!!!

    Has conseguido dibujar más que una sonrisa. Mucha suerte y te mando un saludo.
    Marta Trutxuelo

    1. Anonymous

      Muchas gracias, Jose! me alegro mucho de que te gusten mis relatos, jo… qué ilusión!!!

      La verdad es que no me da mucho tiempo a leer todos los de los abogados… ¿te sueles presentar? Ya estaré al tanto… cada vez cuesta más que te seleccionen el cuento del mes, pero, bueno, es un reto al final, ¿no?

      Gracias mil y que tengas mucha suerte!!!
      Como te he dicho, has empleado figuras muy originales y visuales!!! Además, el lenguaje técnico relacionado con la caza de la ballena está perfectamente elegido (tuve que hacer un trabajo sobre la caza de la ballena en el pueblito costero de Orio, Gipuzkoa, y me tocó empaparme del tooooodo el léxico referente a dichos cetáceos, así que, doy fe… je, je…).
      Un abrazo!!!
      Marta

  4. Mercedes Jiménez

    ¡Qué bonito, Vicente! Me has transportado a lomos de tu particular Moby Dick directamente a mi infancia y a esos fantásticos libros de aventuras de Melville, Julio Verne, Mark Twain y otros muchos que no me cansaba de leer. La caza de la ballena está narrada de forma estupenda con viveza, dinamismo y léxico e imágenes muy apropiadas. El giro final es muy divertido, yo,con los años, me he convertido en un temible ballenato, mis ronquidos ahuyentan al más curtido marinero jaja :-)Un beso y suerte.

    1. Anonymous

      ¡Qué buen rollo tienes, Mercedes!
      Da gusto tomarse la vida un poquito a broma
      Yo creo que todos roncamos y el qué no es que duerme solo y no se lo cuentan.
      Besos
      Jose

  5. Luisa Rodríguez

    Me gusta la parte de aventura y el humor del giro final. La ballena blanca estaba allí,en su cama, y Ahab persiguiéndola por todos los océanos… Un abrazo y suerte,José

  6. La historia engancha, una prosa muy cuidada, con reminiscencias Moby Dick, para terminar con un golpe que hace que todo el peso del relato se torne en carcajada. Deja muy buen sabor, enhorabuena.

    Un saludo.

  7. Mayte González-Mozos

    Leyendo tu relato me convenzo que la ficción debiera ser asignatura obligada. Y los ronquidos motivo de divorcio.
    Suerte.

  8. Pequeña Jane, yo miraría a ver cual era la soga que baldeabas
    para que no se quemase, aunque creo que eso motivó más a la ballena, como pudiste comprobar.
    Te veo con el gorro y el impermeable amarillo 🙂
    Suerte con tu aventura.

  9. Jijijijijijiji… qué bueno, relato reivindicativo por partida doble!! Esa pequeña Jane, lanzando la muerte desde lejos -me ha encantado- y su marido el gordo, roncando como un bestia; seguro que le hubiera ido mejor en la mar, con un master and comander estilo Russell Crowe!!

  10. Me ha encantado este relato ballenero tan bien narrado, con un léxico más que apropiado, tanta acción y un final tan inesperado como desternillante. Imaginación, buen hacer y humor, ¿qué más se puede pedir? Un saludo y enhorabuena.

  11. Fco Manuel Marcos

    Ok, encantaoo de leerlo. Una sonrisa vale más que nada. Divertido, audaz y grácil. Enhorabuena por tu escrito.

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