Esta Noche Te Cuento. Concurso de relatos cortos

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FEB68. 50 000 MAESTROS DEPURADOS, de Jesús Redondo Lavín

Hace unos meses, llegó a mis manos un retrato a lápiz sobre una cuartilla cuadriculada. Era una caricatura de mi abuelo Dionisio, sí, el maestro del que ya os he hablado en otras ocasiones. El dibujo estaba en la que fue casa de su hermano, Zenón Redondo, también maestro, en el fondo de una caja de zapatos, de esas en las que las abuelas guardan fotos, cartas y recetas de cocina.

Efectivamente era mi abuelo, con su eterno cigarrillo de “caldo”, liado a mano por aquellos largos dedos amarillentos de nicotina.
Admiré el parecido, pero cuando me percaté de la inscripción que figuraba en la esquina inferior derecha, medio escondida en un pliegue del papel, aquella caricatura cobró valor histórico; reveló angustia, desgracia, piedad y también nobleza:
“ESCOLAPIOS XXXVIII”. Firma: Paco
El retrato se hizo en el colegio-cárcel de los Escolapios de Bilbao, en el año 1938.
Llevo meses reconstruyendo en mi cabeza la escena. Es una prueba palpable del paso de mi abuelo, por las cárceles de la represión y del inicio de su vida de “depurado” y perseguido maestro.
¿Quién fue Paco?…, ¿otro más de los 50.000?…
-Dionisio, póngase de perfil; por favor, permanezca así unos minutos;así.

41 Responses

  1. Aprovechando el caso…
    Si alguien quiere que acompañemos su relato con una ilustración propia… no hay problema, ya lo hemos hecho antes… hasta con un youtube creo recordar; sólo advertiros que su presencia NO se valorará por el jurado y que si es elegido el relato NO nos compromtemos a incluirlo en la edición.

  2. Por la ventanita enrejada del dibujo sí que parece una prisión. Vaya, Jesús, además de tener buena memoria te llegan legajos de hace 75 años, qué joyas. Cuida ese patrimonio y sigue escribiendo sobre él.
    Un abrazo.

    1. Jesús Alfonso Redondo Lavín

      Mi abuela Lola, ya viuda, me contaba que en la cárcel, que yo siembre pensé que era la de Larrínaga, el abuelo era el encargado del reparto de los envíos de alimentos que los familiares de los presos les mandaban. Es pues coherente el dibujo de cestas y viandas que están en el suelo. También me contó que muchos de los alimentos terminaban en manos de los carceleros.
      Un abrazo, Susana.

  3. Estaba echando de menos un relato de Jesús. Lo que no esperaba es que fuera tan verdadero testimonio. Me quedo de piedra. Si no nos engañas, Jesús, y el retrato es auténtico, este relato tiene muchísimo valor, y no solamente sentimental.

    Por cierto, no se si te refieres a la cárcel de la Galera, porque me sonaba que esa era del Berriotxoa, pero si es esa, todos los jueves voy allí a clase, no se si sabes que ahora es una Escuela de Música Municipal. A lo peor comparto celda con Dionisio, del que guardo muy en la memoria su crucifijo.

    1. Jesús Alfonso Redondo Lavín

      En 2011, Ascensión Badiola publicó un libro (una verdadera tésis) con el título «Cárceles y Campos de Concentración en Bizcaya(1937-1940)». Es en ese libro donde ví el nombre de mi abuelo (Dionisio Redondo Muñoz) destinado a la cárcel de los escolapios, trasladado desde la cárcel-hospital de la Universidad de Deusto.Casualmente despues de este descubrimiento, me mandó la prima de mi padre, María Teresa Redondo Román,el dibujo en cuestión. Recordé que mi abuela hizo, alguna vez, mención al colegio de «sordomudos», que está cerca del de La Salle y los Escolapios.
      Badiola señala los siguientes centros y personal detenido, según censo de 15 de QAbril de 1938:
      Campo de concentración del Hospital Militar de Prisioneros de Guerra de la Universidad de Deusto:3.000 prisioneros.
      Escolapios (creo que se trata de los de Deusto en la cuesta del Marqués de Zubiria n(Sarriko):5.000 prisioneros
      Carcel de Larrínaga: 2.800 prisioneros
      Barco UPO-MENDI:600 prisioneros
      Carmelo de Begoña: 1.500 prisioneros
      Chalet de Orue, Adoratrices, Balmaseda,Guernica y Marquina: 2,500 mujeres prisioneras.
      Un beso Aurora.

  4. Este relato tiene la fuerza de la veracidad y del testimonio: aún en el caso de que no fuese la verdadera historia del abuelo de Jesús sí que es la historia de muchos otros. Al hilo de lo que dice Aurora, el verano pasado yo asistí a un curso en el antiguo penal militar en el que estuvo recluído mi abuelo, ahora reconvertido en dependencias de la universidad, y la sensación es ciertamente extraña. Gracias por traernos este relato, Jesús.

    1. Jesús Alfonso Redondo Lavín

      Si me lo permitís seguiré contando cosas de mi abuelo y otros, que sufrieron aquellos años a los que espero nadie nos empuje de nuevo.
      Gracias por tu comentario Ana y felicidades por tus éxitos literarios, son muy merecidos.
      Un abrazo.

  5. Calamanda Nevado

    Jesús, cuantos abuelos vivieron esas experiencias. Tienes su testimonio y en esa foto parte de su quehacer. Es fácil que, a menudo, recres escenas de antaño y parte de las anecdotas que le conoces. En ese sentido eres afortunado. Suerte y saludos.

    1. Jesús Alfonso Redondo Lavín

      No creas que era fácil que te relatasen sus experiencias. Todo se silenciaba. El estigma de estar represaliado, ya lo contaré alguna vez, le duró 13 años a mi abueloy con él a su familia. Todos lo sabían pero a los pequeños nada se nos contaba.
      Un abrazo.

  6. Anonymous

    Es importante que no se olviden esas historias de vidas truncadas por la guerra y la represión. Son un recuerdo de lo que pasó y sirven de testimonio para las generaciones futuras. Enhorabuena por tu micro y por compartir tus vivencias y de tu familia con los demás. Gloría Arcos

    1. Jesús Alfonso Redondo Lavín.

      Gracias, Gloria por pasarte por aquí. El novio de mi hija también se apellida Arcos, bueno él dice «de Arcos».
      Espero que sirva para las generaciones futuras, aunque a veces dudo que hayamos aprendido a convivir en este país, y que no valoremos los riesgos.
      Saludos.

  7. Ginette Gilart

    Hola Jesús. Enhorabuena por tu relato, muy emotivo por cierto. También yo tuve un abuelo en la cárcel. Él no era maestro pero tenía tres hijos jóvenes (uno de ellos, mi padre) que lucharon en la contienda y tuvieron que exiliarse. En represalia cogieron al abuelo; de la cárcel no salió vivo.
    Tenía escrito un relato para el mes de enero con el tema «Despertó», pero al ver la ilustración de Mercedes cambié de idea; mi relato era demasiado duro y triste.
    Así que decidí (como diría Kistila) reír y cogí a Clooney de protagonista, jajaja.
    Un abrazo y felicitaciones por la mención.

    1. Jesús Alfonso Redondo Lavín

      Peor lo pasó un hermanos de mi abuela. Lo escribí en el «pago del pescadero» cuando el lema de ENTC era «No hubo flores».
      Gracias Ginette.

  8. Ricardo

    Erguido, orgulloso. A este no le doblegaron.
    Es la impresión que tuve cuando vi el original.
    Retrato de una muchas vidas propias y ajenas.
    Otra vez gracias por tus historias.

    1. Jesús Alfonso Redondo Lavín

      Eso parece, aunque la abuela me contaba que cuando le visitaba se derrumbaba y le decía con desesperación
      -!Lola sácame de aquí¡
      El abuelo, antes de la guerra, realizaba algunos escritos, no sin evitar ciertas protestas de la abuela Lola, que no esperaba nada bueno de las actividades políticas de su marido, para el periódico de la asociación de maestros, utilizando el seudónimo de DONREDON. Así que la abuela, de sangre maragata,(Dolores Botas), impotente y con un injusto toque de reproche le contestaba:
      – Dioni, sé fuerte, mantén ahora la misma valentía que tuviste cuando escribiste aquellos artículos.
      De esas cárceles salió enfermo. finalmente fue un cáncer. El estómago le ardía constantemente y le recuerdo tomando bicarbonato a puñados.

  9. Nieves M:M.

    Desde el arranque que has escogido como comienzo hasta
    el retrato , del que nos llega el aroma del tiempo, todo ello hacen de este relato un texto marca de la casa: redondo.un abrazo

    1. Jesús Alfonso Redondo Lavín

      Gracias, Nieves.Ya ves, suplo la falta de imaginación con la memoria de los recuerdos. No sé salirme de las sugerencias de esas cajas de zapatos de nuestras abuelas. Marca de la casa, como tú dices.
      Besos.

    1. Jesús Alfonso Redondo Lavín

      María, maestra de lo breve, te agradezco mucho que se pares a leer mi relato. A mí me gusta apurar hasta la palabra 200, ni una menos. Es como si jugara a ganar a las siete y media; si te pasas no sales y si no llegas puede haber otro que te supere.
      Gracias. Es un placer ampliar el grupo de amigos mediante este blog.

  10. No sé cómo se puede conseguir, cada relato aporta algo diferente al anterior, conservando en todo caso las líneas maestras, en esta ocasión con inclusión de documento gráfico; relato fácil de leer, ni sobra ni falta nada, con las ideas claras, precisas y preciosas, directo hasta llegar al final. Y por si quedaba alguna duda se amplía la información con toda clase de datos.

    1. Jesús Alfonso Redondo Lavín

      Muchas gracias Koldo.
      Me aligro de que te animes a comentar y más me alegraría si te animas a relatar. Nos vemos.

  11. kistila

    ¡me gusto mucho este testimonio!…

    poco a poco, por entregas, Jesús Alfonso nos esta haciendo descubrir no solamente su familia, su entorno pero también la historia de España… cuando publiques un libro recopilando tales testimonios no dejes de avisarnos porque cuentas muy bien…

    también recogí muchas historias que me contaron miembros de la familia de mi marido, de la familia de amigos así que de vecinos… ¡por cierto gente de los dos bandos!…

    yo estaba acostumbrada en Francia a testimonios sobre la guerra de 14-18 y guerra 39-45… al llegar aquí me cogieron todos por banda contándome sus historias particulares, haciéndome testigo de esta lacra que fue la guerra civil y la pos guerra…

    1. Jesús Alfonso Redondo Lavín

      Espero que saques ese relato algún mes. Yo también estoy preparando uno o dos que tocan los desastres de la primera guerra mundial. Tengo un vecino, Fermín, nacido en Ipres, que todos los años me lo recuerda con su flor de tela en la solapa.
      Besos.

  12. Tiene toda la pinta de ser un relato realista, que el autor está narrando hechos ocurridos. El dibujo es fantástico y las «depuraciones» no están, aún, castigadas. Venga, suerte a fin de mes.

    1. Jesús Alfonso Redondo Lavín

      Gracias, Ximens. Te repito, que tú lo comentes, da valor al relato.
      Muy bueno el tuyo de este mes, y los de los meses anteriores también, por supuesto.

  13. Un tal Miguel

    Jesús, aunque no ganes a final de mes, sabes que has recogido el cariño y la complicidad de todos tus lectores. Bueno el relato, completa la historia, suelta la redacción, la figura a lápiz da otra dimensión añadida. Además de tener una personalidad muy tuya, este relato se destaca del listado de escritos del blog por la historia recluida en él. Y con eso ya has ganado este mes.

    1. Jesús Alfonso Redondo Lavín

      Miguel, te hiciste de rogar para comentar y te la he pagado con hacerme de rogar para agradecertelo.
      Pue eso, que te agradezco que mantengas, el hilo, que coño hilo, la maroma de nuestra amistad, también mediante estos diálogos.
      Que sigamos vivos y pronto jubilados durante muchos años.
      Un abrazo.

    2. Un tal Miguel

      He leído tu comentario sobre las castas de Bilbao, desde las chabolas del monte Banderas hasta los envidiados niños neguríticos. Tus comentarios (tan ricos como tus escritos) se llenan de historias y recuerdos y se abren como el cuerno de la abundancia de nuestras vidas. Y lo haces bien. Funcionas como los «palabristas», los cuentacuentos, los oráculos o los encargados de transmitir la tradición oral, tan necesaria como ya sabemos. Pero a mi me tienes como en el diván del psicólogo, escuchándote y analizando en qué casta estábamos los que jugábamos a indios y espadachines. Nosotros unos niños y tú analizando, analizando. ¡Venga, Jesús, no te canses, sigue pensando!

  14. Sotirios.

    Jesús, el relato es precioso me ha gustado mucho. En Grecia tenemos el teatro de sobras. Sobre una sábana blanca se mueven los personajes de papel. Es muy difícil de explicarlo pero es muy famoso en toda Grecia se llama Caragiozis. Resulta uno de los personajes se llama Dionisio es de una isla griega creo Corfú o Zakinzos no recuerdo ahora. Lo raro es que tiene una nariz enorme.Caragiozis(el protagonista)cuando le saluda le coge por la nariz y dice encantado saludarte. Estoy muy curioso si existe alguna relación con tú personaje de dibujo.(por cierto esta clavado)Un fuerte abrazo y enhorabuena por el relato, Sotirios.

    1. Jesús Alfonso Redondo Lavín

      En este blog aprendemos de todo. Es real lo que comentas. Me pasado por la wikipedia y el Karagiozis (el del ojo negro) dice que es el personaje principal de un tradicional greco-turco «sadow puppet theatre».
      Pues te agradezco el comentario sobre Dionisio. Parece que es un personaje agraciasdo.
      “DIONYSOS (NIONIOS)
      Dionysos comes from the Zakynthos, an Ionian island in the western part of Greece. Dionysos is a handsome, more western oriented person that is dressed in european style. He even speeks greek with an italian accent. He is Karagiozis friend, even if Karagiozis teezes him and makes jokes about him. Even if he is well dressed, he is poor, but he doesn’t want to admit this, as he thinks that he is very attractive to women.”
      Gracias, esto es muy entretenido.

    2. Jesús Alfonso Redondo Lavín

      Suele dar verguenza a la gente, a mí no. Esto no es cultura, es pura Wikipedia» que dura en la máquina de mi senil memoria lo que un azucarillo en un café. Epero que al menos quede el sabor. Te agradezco que hayas excitado mi curiosidad.
      Un abrazo.

  15. Jesús Alfonso, me maravilla la de historias que hay en tu familia más tu capacidad de recordarlas y de darle vida en forma de relato , sois unos privilegiados… Bueno retrato de una época a través de una caricatura. Desconocía que Escolapios hubiese sido cárcel, lo que aprende una. Esi sí, efectivamente mi abuela también guardaba cosas en las casa de zapatos. Me gusta tu cuento-historia-crónica.

  16. Jesús Alfonso Redondo Lavín

    Estoy de acuerdo. ¿Recuerdas aquellos episodios que se produjeron despues del año 1975 que denominaron, «los Topos»?. Fue espeluznante, aún en esas fechas salieron de sus agujeros personas literalmente emparedadas durante más de 35 años.
    Besos

  17. Jesús Alfonso Redondo Lavín

    Es todo verdad. El abuelo frisaba los 42 años cuando le hicieron este retrato y empezó a los 22 años su profesión de maestro en Orejo (Cantabria). En 1934 se trasladó a Bilbao y dio clases en la escuela de Solocoeche junto a la carcel y a la maternidad en aquel tiempo- También trabajó en una academia que fundó con otros compañeros; la Academia Minerva. Sé que dió clases de matemáticas, su asignatura favorita, en la Universidad de Deusto.
    ¿Quién puede saber si Paco fue compañero o alumno?. Tus conjeturas pueden ser válidas.
    Besos y oroldi.
    ¡Qué frio hace!.

  18. Jesús Alfonso Redondo Lavín

    Ahora ya tengo dudas de qué colegio de escolapios se trataba, Que yo sepa hay dos en Bilbao el de Deusto, en la cuesta que llamábamos del Conde de Zubiría, y el de Recalde. Al igual que los dos de la Salle, Santiago Apóstol, frente a la Alóndiga y el de Deusto. Estos frailes, de una y otra marca, en mi memora infantil tenía un “cole” para niños bien y otro para humildes en el extrarradio. Recuerdo la indignación popular que producía el saber que el colegio del Sagrado Corazón, de chicas, que estaba donde hoy está el Corte Inglés de Bilbao, con doble entrada y doble uniforme para niñas de pago y niñas humildes. Yo empecé en el humilde de la Salle de Deusto y como mi rendimiento era bueno y la cartera de mi padre empezó a engordar, pude pasarme al de los niños bien, hasta cursar “preu”.
    Volviendo a la investigación, yo estoy convencido, alguno lo sabrá ciertamente, que la cárcel de los escolapios era el que, cuando yo iba al colegio de la Salle de Deusto llamábamos “sordomudos”. Se trataba, hace mucho que no paso por allí, de un internado para niños sordos, mudos y ciegos, cerrado por un alto muro. Todos los días pasábamos al lado de ese muro; dos caminatas de ida, tras pasar los barrizales de las obras del canal de Deusto en plenas obras, y sendos viajes de vuelta dado que teníamos que comer en casa. Solíamos “resquilar” por el muro y observar a los ciegos jugar con una gran pelota hecha de trapos con varios cascabeles cosidos para localizarla. Supimos el nombre de alguno de los internados y nos cruzábamos insultos cariñosos tras el muro.
    Gracias Mel por interesarte.

  19. kistila

    ¡¡¡»con doble entrada y doble uniforme para niñas de pago y niñas humildes. «!!!

    ¡que barbaridad!… y que sea la iglesia que haya sido capaz de comportarse así…

    sigue contándonos… estas cosas no tienen de caer en el olvido…

    1. Jesús Alfonso Redondo Lavín

      Pues, si el Bilbao de los «Neguríticos» existió, pero también las castas; como en la India. Había,sobre el barrio de San Ingnacio de Deusto, un monte plagado de chabolas, el Monte Banderas . Los de la parte alta del monte eran considerados de inferior casta que los de la parte baja, estos a su vez lo eran con respecto a los que vivíamos en la parte alta de San Ignacio y nosotros de inferior categoría que los que vivían en la parte baja, que a su vez eran inferiores a los que vivían en Deusto, y estos a los que vivían en Bilbao Por supuesto todos ellos eran muy inferiores a los de Neguri.
      No estaba bien visto ligar con chicas de las castas superiores.

  20. Ginette Gilart

    Muy interesante y tremendo lo que nos cuentas, Jesús. Pero si es cierto que existen distinciones dentro de una misma clase social; hoy en día también, tal vez no tan brutalmente pero sigue existiendo.

  21. Hola Jesús,me gustaría tener algo más de información sobre la vida de tu abuelo Dionisio Redondo Muñoz. He localizado tu blog buscando información en Google, pues han caido en mis manos varias fotos de su estancia como maestro en Marina de Cudeyo y me gustaría compartirlas contigo.
    Siento no haber descubierto antes este blog.
    Un abrazo muy fuerte.
    José María

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