Esta Noche Te Cuento. Concurso de relatos cortos

Single Blog Title

This is a single blog caption

122. LA NIÑA CANDELA (Ana Tomás García)

La niña Candela se volvía invisible de lo silenciosa que podía llegar a ser. Nadie hacía cuentas con ella porque desde que nació nadie la tuvo en cuenta. Se alimentó a base de cuentos de viejas y leyendas y aprendió a gatear imitando a los gatos que ronroneaban siempre alrededor de ella. No era fantasma, más bien parecía una sombra de esas  que a nadie asusta. Fue por aquel entonces que el General Grandiosa llegó asolando aquellas tierras y el que no salió huyendo pereció bajo el fuego y la tiranía de aquel delirio de grandeza, que nublaba la mente de un loco que quería convertir en Imperio aquella República Bananera. Ante la alarma de los vecinos que gritaban: ¡Ya llega!¡ya llega!, la niña Candela se escondió en el hueco de un árbol envolviéndose entre las páginas amarillentas de una gaceta. Fue con el correr de los años, al poner de nuevo en pie las barracas de los indios y limpiar de brozas los aledaños de la hacienda ruinosa, que dieron con el hueco del árbol y sacaron de sus entrañas aquel milagro. La niña silenciosa abrió sus grandes ojos de almendra y dijo con voz queda: Me llamo Candela.

19 Responses

  1. calamanda

    Ana, bonita historia de esta niña superviviente;es el tipo de cuento que gusta contar a los niños. Suerte y saludos

    1. Ana Tomas Garcia

      Gracias Juan Antonio, este mes lo he mandado casi con la lengua fuera, todavía no he leído casi ninguno de los vuestros. Saludos.

  2. Muy bien escrito, con un toque mágico. El principio del relato me ha hecho pensar en Matilda de Roald Dahl, autosuficiente e ignorada por los suyos, igual que tu Candela.
    Me ha gustado mucho esta niña que se alimentaba de leyendas.
    Suerte y abrazos

  3. Genial la atmósfera mágica que has creado Ana, arrastra al lector a través del relato y lo acerca a esa niña silenciosa. Candela. Me gusta. Mucha suerte con la criatura!
    Un abrazo microlunático.

  4. Rafa Heredero

    Un relato que bien podría ilustrar cualquier entrada relacionada con el realismo mágico.
    Suerte y saludos.

Leave a Reply