25. ¡Monstruo!
Rafa se movía de un lado a otro de la cama con la frente repleta de sudor. Eran las cuatro de la madrugada,cuando entre pesadillas se le escapó un grito de auxilio.Su madre acudió preocupada y quiso saber qué le ocurría. Carraspeando, le contó que tenía miedo de los monstruos que dormían bajo su cama y le visitaban en sueños. Su madre lo tranquilizó diciéndole que los verdaderos monstruos visten con traje y corbata y no se llevan a los niños sino a sus ilusiones y, por supuesto, no viven debajo de la cama sino en los bancos. El chico se mostró aun más atemorizado pero su madre le dijo que esos hombres eran solo marionetas del verdadero monstruo, el dinero.
¡Qué razón tiene esa madre! Estamos rodeados de monstruos ávidos de ese monstruo mayor que es el dinero y dan ganas de pedir auxilio. Mucha suerte.
Muchas gracias, no siempre los monstruos son producto de la imaginación y esta madre lo sabe
A mí me encantan los relatos que meten caña a los vampiros y ya por eso lo seleccionaba. Le pondría tilde a un qué de por ahí, pero eso ya es otra historia. Mucha suerte.
Me gusta mucho escribir relatos que critiquen la sociedad y sus aspectos más negativos. En cuanto al qué, lapsus del oficio ya está corregido, gracias