1FC. ENCUENTRO 11
21 Macarena Abilleira
22 Elena Casero
Los participantes aquí señalados tendrán que publicar en el espacio reservado a los comentarios de esta entrada del blog, un relato INÉDITO de un máximo de 100 palabras antes del plazo fijado. En esta ocasión reduciremos las condiciones a una sola, y aprovecharemos para hacerle un pequeño homenaje a esas canciones de los años 80 y 90 que ya son eco de una época.
EL TITULO del RELATO será: Pongamos que hablo de Madrid
PLAZO: antes de las 20 horas del LUNES 2 de febrero.
Cumplido el plazo, recibiréis en vuestro mail un enlace para que votéis a un relato de otro encuentro (se os asignará al azar)
El resultado de este encuentro se hará público en una entrada general de la sección EnoTiCias.
Pongamos que hablo de Madrid
Llevaba dos días desaparecida. No se había llevado nada. Junto al teléfono solamente una frase escrita.
«Allá donde se cruzan los caminos»
Comenzó la búsqueda esa noche, se multiplicaban los puntos de luces por el campo aledaño a la casa de la muchacha. Alguien alcanza otro papel.
«La muerte viaja en ambulancias blancas».
– ¡Al hospital! – ordena el detective – esa frase…
Estaba viviendo en un puzzle; el tiempo se le escurría.
– La joven dejó esto – dice el doctor.
«La vida un metro a punto de partir».
Llegaron para verla caer entre las vías… y devolverla al sur como pide la canción.
Muy visual e impactante tu relato, Macarena. Has sacado buen partido de esa magnífica canción. Suerte!
Pongamos que hablo de Madrid
En esta plaza, que llaman Mayor, cruce de caminos, transcurren mis días inmóviles desde hace unos siglos. No hay estrellas en las noches, pero yo desciendo de mi estatua y me mezclo con Malas compañías: Un tipo con la voz rota que si muere marchará al sur. Una chulapa y un barquillero. Un manco con golilla que rezonga algo sobre sus huesos. La enana Mari Bárbola y mi nieta, la infanta Margarita.
La vida pasa deprisa y esta ciudad se me hace ajena.
Otro amanecer turbio. Siempre regreso a mi montura, como el fugitivo que busca sus raíces.
Gracias, Concha, por tu comentario! Suerte para ti también!
me gusta el relato de mi contrincante, creo que me lo has puesto difícil Macarena. Sea lo que sea lo que decida el jurado, tu relato es impactante.
Un abrazo
Elena, te agradezco el mimo pero tú eres muy buena narradora, he leído otros relatos tuyos.
Este tiene muchos datos locales que para mí, que nunca fui a Madrid son un aprendizaje, por eso cuando lo leí no supe qué comentarte.Tienes en el último enunciado una metáfora unida a una comparación sumamente expresivas.
Más que seguir en la contienda,(hipócrita sería si te dijera que no lo deseo),atesoro cada comentario y la posibilidad de leer a mis compañeros.
Un cariñoso abrazo y celebraré con alegría si el resultado te favorece, como si fuera propio.
No es mimo, Macarena, es la verdad. Cuando lo leí, pensé: me toca estrujarme el cerebro. Creo que has sacado muy buen partido de la letra de la canción. Verás como tienes suerte. A partir de la letra mantienes la intriga en poco espacio. A mí me ha gustado.
Otro duelo del que no quisiera ser jurado bajo ningún concepto. Aquí no hay que tomar partido, pero los dos tienen cosas estupendas.
Será difícil. Suerte
Gracias una vez más, Elena!!! Abrazo.
Luis, gracias por tu comentario! 🙂
Pues captáis las dos muy bien el espíritu de sitio de todos y de nadie. Me gusta cómo usa las pistas de la propia canción Macarena y el toque fantástico de Elena. Suerte.
Muchas gracias Pablo. Veremos a qué nos conduce la fantasía.
Un abrazo
Gracias, Pablo, por tus deseos de suerte y valoración de ambos textos.
Hola chicas,
Dos buenos relatos y los dos merecen premio. Para que también Macarena tenga su momento de gloria he colgado su texto en Melotemía con la famosa canción de Sabina. Espero que os guste.
Un abrazo.