435. EL PARAISO, de Abeto
7.45 horas. La estación de cercanías de aquella ciudad de impronunciable nombre se atesta de gente que espera la llegada del tren para acudir al... Read More
434. EN EL BOSQUE SIN SALIDA (minicuento a cuatro manos), de Orang Pendek y Perenquén
Si en medio del bosque te encuentras una pitillera metálica con tu nombre, y tiene un pendrive dentro, se genera una inquietud repentina, proporcional a... Read More
433. EL BOSQUE DE NUESTROS OTOÑOS, de El Otoño
Se fueron acumulando tantos otoños en los caminos que conducen al bosque de nuestros amoríos secretos, que la luna aún está encima de los viejos... Read More
432. EL VIEJECILLO ERMITAÑO QUE VIVÍA EN LO MÁS INTRINCADO DEL BOSQUE, de Hiedra
En esas noches de largas vacaciones tíos y abuelos solían contarnos hermosas narraciones o terroríficos aconteceres. Y ocurrió que en uno de esos días nuestra... Read More
431. ALLÁ POR EL SUR PATAGÓNICO, de Hiedra 3
Como siempre algún familiar o amigo disperso en el suelo Argentino, cuando vuelvan para festejar el Fin de Año, nos relatan interesantes historias de extensos... Read More
430. PINTORESCOS ANIMALITOS SUREÑOS, de Hiedra 3
Viajando por esas rutas sureñas, pude apreciar bellezas: enormes montículos petrificados, suelos cubiertos de espartillares, serían como flores del camino que festonean a esos extensos... Read More
429. EL DUENDE DE LA RIBERA, de La Liebre
Cierta tarde, paseando por la orilla del mar, cuando estuve veraneando en San Vicente de la Barquera, me sorprendió y, no debo ocultar que me... Read More
428. EL DUENDE CUCUDRULU, de La Liebre
Cuando ves por primera vez un duende: el mecanismo de defensa física se te dispara automáticamente, calculando los riesgos posibles, con objeto de adelantarse a... Read More
428. EL CRIMEN, de Musgo 4
En el espléndido sol de la mañana, el gigante se hallaba dormitando plácidamente absorviendo la tibieza de sus rayos. Sus mil brazos parecían querer estrecharse... Read More
427. LA FIESTA, de Musgo 4
En un claro, en medio de aquel frondoso bosque al pie de las montañas, esa tarde era todo baile, risa y celebración. Los gnomos danzaban... Read More