5. 6 de enero
-Hay pisadas en la nieve. Son de alguien que se ha ido. ¿No son tres?
-Se turnan. ¿Sabes cuantos niños hay en el pueblo?
-¿Como llegan?
-Son magos.
-Si solo ha venido uno, porqué se ha bebido casi toda la botella de whisky?
-Hace frío y tiene mucho trabajo en una noche.
-Padre dijo que tendría un gran regalo y solo hay dos sobres.
-¿Qué pone en los sobres?
-En uno Sr. Notario y en otro Sr. Juez. ¿Cual es el mío?
Ricardo, me gusta mucho. No falta nada y no sobra nada. Para mí ahí está lo absurdo de la tradición en épocas en las que la salida puede ser hasta el suicidio, la ilusión truncada, la inocencia original. Perfecto.
Como la vida misma, Marcos. Más de un@ habrá pensado en una salida así.
Buena apuesta dialogada porque al no haber descripciones directas resulta más urgente, como enmarcando la búsqueda. Suerte.
Tienes razón. Creo que es más descriptivo así. Deja mucho más campo a la imaginación. Lo veremos desde nuestro propio punto de vista.
Gracias Pablo.
Me sugiere que el regalo es el lanzamiento. Qué pena.
En este caso es otro el motivo. El notario deberá repartir la pobre herencia. La pena puede que sea la opresión de nuestras vidas de papa’s noeles, santas clauses, olentzeros, reyes magos y sueldos bajos que incapacitan cumplir con las obligaciones de padres consumistas
Ricardo mal día para suicidarse, más bien, creo que no hay día bueno, es como lo de «mal día he elegido para dejar de fumar».
Un abrazo
Yo pienso que este es uno de los días en que la gente en estas situaniones se siente más frustrada. Estoy convencido que puede ser potencialmente peligroso. Malo, muy malo.
Abrazo Alejandro
Ricardo, cruda realidad por desgracia cada vez más frecuente. Muy buen relato. Un abrazo.
Pese a lo expuesto en mis contestaciones a vuestros comentarios no he podido constatar que haya habido un repunte en la desesperación del la ciudadanía. Tengamos un poco de confianza en la cordura de las personas humanas (hay personas inhumanas, me consta)
Muchas gracias Salvador.
Creo que ha sido el «regalito» que muchas personas han recibido estos reyes.
Buena crítica.
Un abrazo.
Muchas, muchas personas preferirían no tener regalos. Lo malo es que este niño lo tendrá aún mucho peor, sin ninguna duda. ¿Pesimismo o realismo?
Grazas y un abrazo, Belén.
Ufff que giro al final, me has sorprendido del todo. Humor que acaba de repelús, enhorabuena!!
Es nuestro sino. Una vida feliz y un desenlace desesperante. Yo veo este ciclo cada vez más corto.
Gracias Mel.
Cortito, sugerente, muy conciso, perfecto. Ricardo, ni te conocía ni te imaginaba. Una sorpresa la tuya que me obliga a cambiar la ficha que tenía de ti. ¡Suerte que tengo!.
¡Has vuelto, amigo Miguel! Tengo mucha suerte al poder sorprender a alguien a estas alturas. Puede que no me imaginases pero estoy seguro que me cococias. Seguiremos discutiendo mucho tiempo y espero que sea paseando.
¡¡Abrazo!!
Qué duro, Ricardo. Últimamente te rodea el tánatos. Está muy bien sugerido el final pero le dejas al niño peor que aquel que quedo con sus abarcas vacías, con sus abarcas desiertas.
Un abrazo sukaldari.
Este queda con herencia que es algo. Ante el dilema de no dejar nada o que lo disfruten los vivos yo también me lo pensaría. No creo que sea cruel. Él medita y decidide.
Un abrazo.
Nos dirás cómo has tardado tanto en confesarnos que eras tú quien escribió El Quijote,Y ahora en serio, descubro en tí al escritor ágil, al periodista de reseña ácida y urgente, al reseñador de última hora que cuenta o seduce o entretiene; al que denuncia,… versátil y camaleónico Ricardo,un abrazo
He pensado más de una vez en enviar mis relatos a los medios antes que al blog. Sería inutil. Me inspira la desigualdad, y la maldad. El poder incontrolable. Vivimos con el permiso de alguien al que no conoceremos nunca. Deberíamos hacernos a la idea. Sí disponemos de una ventaja, ellos son diablos y nosotros viejos.
Muy bueno, el giro final es sorprente y la aleja de la típica historia naif de navidad.
Saludos y suerte
Ángel. Me motiva tu comentario y lo agradezco.
Un saludo.
Gracias por tu comentario. Me alaga el matiz.
Un saludo Ana