DIC75. FANTASMAS EN NAVIDAD, de Raúl David Márquez Casique
Aquellas navidades, de niño, solía visitar a los abuelos, que entonces vivían en una finca. Era un lugar encantador; ambiente propicio para historias de fantasmas y aparecidos. Una noche, luego de que el abuelo nos contara una leyenda, no pude dormir, pues ruidos extraños provenientes de la sala, me mantuvieron en vilo hasta la madrugada.
Al siguiente día, le comenté a la tía Adela. Ésta se puso colorada, se sobresaltó, y me dijo, entre dientes, que no le contara nada al abuelo. «Mire, Raulito, mejor no diga nada, pues el abuelo lo va a tomar por pendejo. Oyó. Mejor rece un Padrenuestro y verá que se le va el miedo…» Le hice caso a la tía y, efectivamente, durante las siguientes noches no escuché nada raro y además me dormí tranquilo y como un roble.
Tiempo después, mi tía llegó a la ciudad. Se quedó en casa. Estaba más gorda que antes. Con el paso de los días, su vientre se fue hinchando como un globo. Me extrañó que el día del nacimiento, en el hospital, estuviera el señor Camilo, un obrero de la finca de los abuelos. Con los años lo supe, y rio al recordarlo.
¡ jejejeje¡ una picardía como tantas a las que el paso de los años pone nombre.
Me ha gustado.
Bonito relato, muy pícaro!
Saludos, Blanca
Divertida historia de Navidad, pero al parecer fue la tía quien tuvo su «noche buena».
¡Saludos!
Gracias a todos… Y a Javier Ximens por animarme a participar…
Muy bueno tu micro Raúl. Quizás me sobra la última frase, pero es sólo por ponerle alguna pega. Me encanta volver a leerte. ¡Suerte!
Desde Córdoba, atento a los ruidos.
Raúl, los recuerdos que llaman a otros recuerdos. Lo que de niños da miedo de grandes risa. Muy bueno.
abrazos
Con razón no quería que se lo contara alabuelo.
Besicos muchos.
¡Qué bello relato condimentado por la inocencia de un niño!
Me ha encantado la forma de narrar es hecho y el remate del protagonista adulto, muy bueno.
Jeje, Raúl, me has hecho reír: ¡caramba con la tía Adela! Creas suspense al principio y además con las oraciones salen los fantasmas. La voz del narrador muy creíble. Venga, que tengas suerte.
Muy divertido, Raúl. Me ha gustado la manera de contarlo desde la visión de un niño para llegar y igual que él a entender lo que pasaba realmente ya como adulto. Gracias por las risas.
Besitos
GRacias, muchachos, por sus energías positivas… SAludos