Ronda 4 – Cofre 6
Los participantes con el alias : VAMPIRO – DESTRIPADOR – PSICÓPATA
deberán escribir un relato :
- el tema central del micro será la AVARICIA
- el protagonista será : Harpagón (El avaro de Molier) para ilustrar el mito/ historia del personaje os dejamos este enlace: https://www.wikiteka.com/apuntes/el-avaro-moliere/
- relato de 123 palabras MÁXIMO (título no incluido)
- TÍTULO de una sola palabra que NO puede ser ni ‘Avaricia’ ni ninguno de sus sinónimos ni tampoco el nombre del personaje.
- Plazo : hasta el domingo 8 de octubre a las 23:59 hora peninsular española.
Podéis subir vuestro relato con este enlace
y votar en este otro
Mensaje para los monstruos en concurso:
Leed bien las bases, pone que «el protagonista será: XXX» así que XX debe ser el protagonista del relato. No vale que se mencione a XX pero no aparezca en el texto, ni que XX se haya muerto y hablen de él, ni que haya una foto del susodicho en la pared ni … protagonista es protagonista.
DESTRIPADOR – Mariana
La idea me ronda la cabeza y no me deja tomar el pendingue desde que murió el bigardo de mi hijo Cleanto. Jamás conocí a mujer más recatada, austera, sencilla y completa. ¡Es una viuda desconsolada!
Hice bien no casándome con ella en su momento. Ahora recibirá una pensión de viudedad, con lo que no tendré obligación de mantenerla… Con un poco de suerte, hasta sufraga la mitad de mis gastos.
Pero no sé cómo convencerla para que me acepte como esposo. Tal vez si comparto las ganancias del seguro de vida que le hice a Cleanto… Pésima idea.
No creo que sospeche que lo maté para cobrarlo, no es eso. Es que es mucho dinero. Tendré que pensar otra cosa.
PSICÓPATA – Felicisteza
Después del último disgusto, escondió la cajita bajo su camastro. Por las noches velaba su tesoro hasta que la vigilia lo rendía y atravesaba al otro mundo a desposar a la joven Mariana; su figura allí se tornaba apolínea, sus ropajes lujosos, su voz timbrada, y a cada instante hacía acopio de una felicidad que recogía en sus amplios bolsillos hasta que éstos parecían empezar a reventar por las costuras. Sólo entonces, lastrado por el peso de la dicha, se dejaba caer en su cuerpo y despertaba de súbito. Luego era el ritual acostumbrado: alargar el brazo para palpar la caja, una mirada al lado frío de su lecho, y finalmente vaciar con sus manos ajadas los bolsillos imaginarios del jubón.
VAMPIRO – Leipreachán
ESCENA I: En un bosque irlandés, después de una lluvia torrencial, un vagabundo Harpagón encuentra a un viejo herido.
HARPAGÓN:
Veo que tienes la pierna rota, por algunas monedas puedo llevarte al pueblo.
VIEJO:
Ay, solo soy un pobre moribundo.
HARPAGÓN:
Entonces adiós.
VIEJO:
Espera, te recompensaré, ¿ves el arcoíris de allá?
HARPAGÓN:
Si.
VIEJO:
Al final hay una olla con diez mil escudos. Vi salir al duende y al correr hacia el tesoro, resbalé y me rompí la pierna.
HARPAGÓN:
¡Por fin seré millonario!
VIEJO:
Pero una advertencia: solo saca parte del contenido. Si te llevas toda la olla, estarás maldito y vivirás siempre preocupado por tu dinero, sin ojos para el amor.
HARPAGÓN (susurrando):
¿Y a quien le interesa el amor?