Mnstrscp2019 – R4 (ciencia ficción)- E1
R4 – E1 : El espacio infinito
Los participantes con los alias : FLAUTISTA DE HAMELÍN – ROBIN HOOD
- deberán un escribir un relato de 150 palabras máximo (título no incluido y frase no incluida)
- antes del domingo 1 de diciembre a las 12 de la noche (hora peninsular española)
- que nos hable de los viajes espaciales, experimentos en naves en órbita, migraciones a otros planetas, platillos volantes, también puedes hacernos viajar en naves conocidas como el Halcón Milenario o la Estrella de la Muerte de la saga la guerra de las galaxias.
- que use la emblemática frase de Blade Runner «naves en llamas más allá de Orion»
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Aviso importante a escritores y lectores
Nos han consultado sobre si se puede variar la puntuación (comas, punto…) de las frases propuestas en esta ronda ya que alguna no parece ser excesivamente correcta. Hemos dado libertad para que así sea y por tanto a la hora de votar que sepáis que se ha permitido este cambio en las frases.
Crisis migratoria del Flaustista de Hamelín
El aire estaba cada vez más irrespirable. Se rumoreaba que el humo provenía de unas naves en llamas más allá de Orion. Pero todos sabíamos que esa no era la verdadera causa.
Pugnamos por huir a Marte, alcanzar su burbuja artificial, donde aseguraban, había futuro.
Para eso hizo falta deshacerse de todo. Nada nos podíamos llevar y además hubo que pagar a las mafias que ofrecían trayectos a precios desorbitados, hacinando personas en naves espaciales destartaladas.
Ahora, flotando en el espacio, esperamos colarnos por alguna brecha de la blindada burbuja, antes de agotar los tanques.
En un pueblo de interior… de Robin Hood
Remigio nunca creyó las historias que explicaba su vecino Venancio. Lo de las naves espaciales y los viajes por las estrellas eran cuentos chinos. Así que cuando un platillo volante se paró sobre su cabeza, pensó: «¿Será un pron de esos? ¿Cron? ¿Droom?» Acto seguido fue succionado hacia su interior. «Pero… ¡esto es muy grande!» El artilugio alcanzó rápidamente una velocidad supersónica. Remigio miró por una ventanilla: «Vaya, se ha hecho de noche de golpe. Y veo como brilla, ensartado en una moneda, un anillo, será el que Emilia perdió en el erial.» Pasaron junto a naves en llamas más allá de Orión. «Claro, es San José, los valencianos ya andan quemando las fallas. Pues sí que viaja rápido el trasto este. Preguntaré al conductor si me puede dejar en Alicante, que hace tiempo que no veo a mi primo. ¡Oiga, chófer! Yo me bajo aquí… ¿Me oye?…»