72. Sentir ese azul (ana-liliana)
El color comienza a inundar las puntas de mis cabellos. Dos golpes y unas gotas de agua después, comienzo a actuar. Este es el gran momento del día.
No sé que será hoy. Quizá un mar, o solamente un aburrido cielo. Aveces son miradas desafiantes plasmadas en ese retazo de tela. Se decidió. Sí, ya tomó una decisión. Hoy son las alas de una mariposa.
Delicadamente, pincelada tras pincelada, el azul se desvanece hasta que termina. Siento el vacío en mí. Me sumergen en agua para posteriormente secarme con un trapo viejo. Me tiran junto con los demás.
Solo queda esperar para volver a sentir ese azul.
Has construido una bella “metáfora del pincel”, Ana-Iliana. Y consigues sugerir como el hecho de sentirse protagonista, aunque sea un ratito cada día, puede mantener la vitalidad. Incluso si uno no se ve reconocido, ni querido. El secreto está en sentir. Enhorabuena.
Un abrazo y mucha suerte.
¡Felices fiestas!
Muchas gracias por tu comentario. ¡Felices fiestas!