431. ALLÁ POR EL SUR PATAGÓNICO, de Hiedra 3
Como siempre algún familiar o amigo disperso en el suelo Argentino, cuando vuelvan para festejar el Fin de Año, nos relatan interesantes historias de extensos bosques de: alerces, araucarias, arrayanes, cipreses,lengas, pinos, raulíes, que dan la nota mágica en esos desolados paisajes.
El hombre o algún cazador furtivom, suelen disfrutar de esos lugares, muchas veces olvidan apagar los fogones, provocando los famosos incendios forestales.
Y tal es así, estas últimas vacaciones me contaron: \»sabe que hace muchos años, viv{ia un aborigen en esas lejanas tierras y al observar estas anomalías, le decia a su Madre: \»Madrecita cuando yo sea grande cuidaré estos maravillosos Bosques, me haré una modesta casita y vigilaré que nadie se olvide apagar esas lindas y brillantes fogatas, pero tan peligrosas que cobran muchas vidas.
¿Que les parece si me acompañan para lograr mi sueño?, seré el mejor Guardabosques.
Después de mucho tiempo, al fin se han conectado mis sueños: reconociendo la tesonera labor del guardabosque y la valentía de bomberos desinteresados, que protegen los Naturales que nosotros solemos destruir.
¡No olvidemos cuidarla, Madre Tierra nos proporciona bellezas inagotables!