56-Misión especial ( Paz Monserrat Revillo)
Una nueva remesa de Ángeles de la Guarda se encuentra en estos momentos aterrizando con mucha discreción en los principales aeródromos poco frecuentados del planeta.
Los espíritus alados −seleccionados entre las cohortes celestiales con mejores pedigríes y rigurosamente formados en Ingeniería, Literatura y Bellas Artes− son especialistas en frenado y desaceleración. Están entrenados para fomentar la lentitud y la cautela entre los habitantes de esta sociedad de niños que corren hacia sus actividades extraescolares, mujeres que estrenan climaterio a los cuarenta, velocistas entrajados, siniestros emoticonos, partos prematuros, jefes cafeínicos y estridentes despertadores.
Difícil cometido. Sus voces vibran en una frecuencia inaudible en las grandes urbes, son muy sensibles a los metales pesados y poca gente recuerda que la función de los Custodios no es decirle a la gente lo que debe hacer sino avisarles del peligro propinándoles un toque con su ala en el mismísmimo centro de la intuición.
Esta vez traen todos los permisos para pintar puestas de sol, diseminar musas entre escritores y pintores, fecundar la primavera con nueva clorofila, baldear música y abonar los cultivos de amistad.
Sabedores del efecto paralizante que provoca la Belleza, esponjan sus plumas de cachemir deseando ponerse sin demora, volando, en acción.
Hola, Paz.
Ese ejército divino que ha aterrizado tiene una misión realmente difícil. Ralentizar el ritmo de vida de alguna gente de este planeta, para que sepa apreciar la belleza que se están perdiendo, parece una operación cuasi imposible.
Me ha parecido muy original tu relato y creo sinceramente que podría llegar a tener premio.
Un cálido saludo.
Muchas gracias por tu comentario. Hacía tiempo que no me pasaba por aquí y una bandada de ángeles me han traído de vuelta. Y me gusta mucho. Saludos cariñosos
Coincido con mi tocayo Ángel Barceló (se ve que lo tuyo son los ángeles), este relato está lleno de magia, de una que quisiéramos que existiese, capaz de irrumpir en la realidad, esa tan agria y ajetreada que nos envuelve, para disfrutar del placer del instante y de la belleza, para refrenar tantas prisas para no llegar a ninguna parte. Aparte de original y simpático, está muy bien escrito.
Es verdad que se te echaba de menos, pero ha merecido la pena, porque esta reentrada en la atmósfera enteciana ha sido espectacular, en verdad, como reza el título: «Especial».
Un abrazo y suerte, Paz
Qué gracia que haya atraído a dos Ángeles a mi post angelical. Angel Saiz, a ti te vamos a nombrar representante de ellos en la tierra, arcángel o la mayor categoría que exista en su organigrama. Un abrazote