36. Memento mori
Tras librar múltiples batallas por tierras remotas, volvió a casa como un héroe. Abriéndose paso entre la muchedumbre, desfilaba con un cachorro de tigre en brazos, junto a su anciano siervo en un carruaje tirado por cuatro caballos. Lucía una corona de laurel y la toga púrpura bordada en oro, a la espera de ser ovacionado. Sin embargo, conforme avanzaba la comitiva, el collar de piedras preciosas que llevaba el animal desató los murmullos de la plebe, que hartos de pasar hambre y calamidades, comenzaron a rebelarse. Viendo tal despropósito, el viejo esclavo le arrancó los rubíes arrojándolos a la multitud, un momento antes de interceptar con el pecho una lanza dirigida al amo.
Ha sucedido lo mismo muchas veces. La Historia la escriben los triunfadores, sin que se tenga en cuenta el papel fundamental de esposas, compañeros y hasta esclavos, que suavizan asperezas para que los elegidos para la gloria, tentados a no ver toda la realidad, no sufran percances; un servicio que prestan, incluso, a costa de su propia vida, como en el caso de este fiel y lúcido esclavo. Queda para la imaginación el último pensamiento de este hombre, así como la reacción de su engreído amo al ver su fatal desenlace, quién sabe si se le cayó la cara de vergüenza.
Un abrazo y suerte, Francisco Javier
Muchas gracias Ángel, como dices, espero que se le cayera la cara de vergüenza.
Un fuerte abrazo
Javier,
Los rubíes siempre tan caprichosos, igual levantan pasiones como que ocasionan una rebelión, ja ja ja
Una vergüenza como dices pero el propio título lo indica, ese «héroe» también morirá.
Me ha gustado mucho.
Abrazos
Muchas gracias Aurora, me alegro que te haya gustado
Un fuerte abrazo
Ese siervo… A pesar de ser su esclavo, ama y respeta a su amo. ¿Sigue sucediendo en el mundo actual? Al final hay relaciones, incluso en las que existe una gran diferencia de estatus o clase, en las que se demuestra quién es mejor, quién es realmente el héroe y merece los laureles y quién, por contra, debería avergonzarse. Me ha gustado, Javi. Abrazos y suerte.
Muchas gracias amigo Rafa
Me alegro que te haya gustado
Un fuerte abrazo