MNSTRSCP 2022 – R5 : Soy leyenda
Llegamos a la final del Monstruoscopio 2022 con estos 6 autores :
SIGFRIDO – ENT – TARZÁN – REY ARTURO – HÉRCULES – DARTH VADER
solo tres de vosotros entrareis en la leyenda del concurso alzándoos como ganadores de esta edición, publicando un relato en el librito anual y con el trofeo clásico de la figura de cristal de Juan Fuente, Telejuz, arte en vidrio.
Dedicamos esta gran final al clásico SOY LEYENDA de Richard Matheson. Para la ocasión mi amiga Paloma Casado nos ha dibujado esta acuarela, gracias Pa!!
Competís los 6 en este único encuentro donde publicaré los 6 relatos a la vez una vez entregados. Plazo límite miércoles día 2 de Noviembre a las 12 de la noche. Y estas son las reglas del juego.
REGLA 1 : El título, debe ser unos de estos 10 en homenaje al magnífico Richard Matheson
- El hombre menguante
- El último escalón
- En algún lugar del tiempo
- Hijo de sangre
- La casa infernal
- Nacido de hombre y mujer
- Más allá de los sueños
- Pesadilla a 20,000 pies
- Shock
- Soy leyenda
REGLA 2 : la extensión del relato como máximo 150 palabras, título no incluido
REGLA 3 : Debes usar en tu relato dos – o más si quieres- (no importa el orden en que las uses, solo que sea un título canción de cada lista):
- una de los títulos del álbum LEYENDA DEL TIEMPO de Camarón de la Isla
- La leyenda del tiempo
- Homenaje a Federico
- La tarara
- Bahía de Cádiz
- Tangos de la Sultana
- Romance del amargo
- Mi niña se fue a la mar
- Volando voy
- Viejo mundo
- Nana del caballo grande
- la segunda de los títulos del álbum LEGEND de Bob Marley
- ¿es esto amor?
- Puedes ser amado/a
- Soldado Búfalo
- Agítalo
- Disparé al sheriff
- Canción de redención
- Exodo
- No, mujer, no llores
- Tres pequeños pájaros
- Levántate, ponte de pie
- Un amor
- Esperando en vano
- Satisfacer mi alma
- Atasco
y nada más!!!! Ya que vais a dar lo mejor de vosotros en esta final, aquí os dejamos una preciosa canción, All of me de John Legend. Todo de mi, ya que vais a darlo todo para conquistar el podium del mosntruoscopio.
Aquí para votar (cuando estén los 6)
Más allá de los sueños de TARZÁN
Nada más dormirse, una voz le ordenaba: «LEVÁNTATE, PONTE EN PIE y sígueme». Era incapaz de negarse a obedecer. Despertaba en el lugar más insospechado, angustiado, exhausto y con una agobiante sensación de impotencia.
Todo se agravó el día que abrió los ojos en la BAHÍA DE CÁDIZ, a cuatrocientos kilómetros de su alcoba.
Los especialistas del sueño eran incapaces de darle una solución. Aquel episodio lo llevó al límite de sus fuerzas. Desesperado, buscó remedio en ciencias menos ortodoxas que la medicina convencional. Acudió a curanderos, sanadores y videntes. Algunos intentaron ayudarlo, otros se aprovecharon de su situación.
Estaba a punto de rendirse cuando conoció un chamán que le explicó que quien sometía su voluntad era UN AMOR de otra vida al que había hecho mucho daño. Solo tenía una forma de liberarse de aquella aparición: entonar la CANCIÓN DE REDENCIÓN. El muy desgraciado le estafó dos mil euros.
El hombre menguante de ENT
Últimamente, al afeitarme, tengo la sensación de que el espejo del baño está colgado cada mañana un poco más arriba. La semana pasada noté que la camisa me quedaba holgada, los pantalones me arrastraban por el suelo y los zapatos se me salían al caminar. He visitado a los más ilustres médicos, pero ninguno de ellos ha averiguado el origen de mi insólito trastorno, tan sólo han confirmado mi impresión de que su evolución es cada vez más rápida.
Hoy, al salir de casa, el último escalón del portal me ha parecido el Everest y, al aterrizar de bruces en la acera, TRES PEQUEÑOS PÁJAROS se han abalanzado sobre mi ya diminuta persona, disputándose ruidosamente el dudoso placer de engullirme. Y así, VOLANDO VOY de acá para allá, dentro del estómago del más intrépido, rezando para que mi exótica metamorfosis se revierta antes de que dé comienzo su proceso digestivo.
En algún lugar del tiempo de DARTH VADER
Los pocos que aún quedamos nos refugiamos en el fondo de la cueva, buscando calor. Los niños lloran de hambre, los pechos de sus madres se han agotado y cada vez están más delgados, la mayoría no llegará a la primavera. Hace años se decía que los insectos serían el alimento del futuro, pero hasta ellos escasean ya.
Todos los días, tras la puesta de sol, nos sentamos en torno a los ancianos. Nos cuentan historias del VIEJO MUNDO, cuando había combustible de sobra y los inviernos eran recibidos con alegría. Algunos han empezado a pintar escenas del pasado en las paredes de piedra, ESPERANDO EN VANO invocar a la abundancia.
Aunque no hay vuelta atrás, a veces convocamos reuniones en las que nos lamentamos de lo que pudimos hacer y no hicimos para evitar la hecatombe. Y nos contagiamos el miedo a extinguirnos, porque sabemos que somos los siguientes.
Hijo de sangre de SIGFRIDO
Brotó justo donde te encontramos. Habíamos removido la tierra intentando olvidar tu sangre tiñéndola. Imposible que algo quedara de tus ojos color agua, pero, cuando la cabeza de la rama más alta de tu árbol los abrió, eran como los tuyos.
Lo llamamos así: tú árbol. El primer año le crecieron pies. Delgados, encallecidos por el trabajo. Inconfundibles. La siguiente primavera se llenó de rizos negros y en la tercera, se escuchaba tu voz canturreando LA TARARA si soplaba el viento. Pero lo del color de sus ojos fue decisivo.
El patrón llegó una mañana con un hacha enorme. Más que la cuchilla que empleó cuando lo desafiaste. Estaba furioso. Tu árbol no se dejó doblegar. Tuvo que arrancarlo de raíz. NO, MUJER, NO LLORES. Si vieras qué bella es la flor que ocupa ahora su lugar. Se abre solo de noche, aprovechando que el patrón holgazanea en la taberna.
Hijo de sangre del REY ARTURO
Es conmovedor verla día tras día frente la tumba de su pequeño. Se sienta hecha un ovillo sobre sí misma y balancea su cuerpo en una danza demencial mientras que, con voz rota, canta una y otra vez LA NANA DEL CABALLO GRANDE, ESPERANDO EN VANO que llegue su salvación.
Su tono es tan melancólico, que más que una nana, parece una CANCIÓN DE REDENCIÓN.
Entre los majestuosos Cipreses se puede ver a TRES PEQUEÑOS PÁJAROS llorar, mientras nosotros, impotentes, no tenemos forma de dar consuelo a tanto dolor.
Solo el 1 de noviembre, día en el que a los muertos se nos da voz, nos unimos a su canto en un acto de amor y solidaridad, porque como nosotros, ella tan solo es un alma atormentada más.
El último escalón de HÉRCULES
Se levantó al alba y se preparó un buen desayuno. Al contrario que a otros, le sentaba bien hacer su trabajo con el estómago lleno. Llegó a la plaza que aún permanecía en silencio y se puso manos a la obra. En cuanto tuvo todo montado se fumó un cigarro y esperó en silencio.
Al mediodía el centro del pueblo ya se encontraba en plena ebullición. Se presentaba un día duro. Jamás habría imaginado cuánto. Cuando el reo subió el último escalón le quitó la capucha que escondía su identidad y apareció ella, la mujer de la que se había enamorado en la bahía de Cádiz. La besó por última vez antes de rodearse el cuello con la soga. El público clamaba espectáculo. Alguien debía morir aquel día en el patíbulo, daba igual que fuera el verdugo. Cuando todo acabó, tres pequeños pájaros se posaron en su cuerpo sin vida.