72. De función
A veces se debate entre el cuento o la poesía, entre la carne o el pescado, entre el sueño o la vigilia, entre ser o no ser. Haber nacido bajo el signo de géminis no ayuda. No es mujer, pero a veces le gusta sentir deslizarse por su piel el tacto del nylon de unas medias, probarse un vestido o una falda o notar el encaje de unas bragas en sus ingles. Si gana la izquierda le gusta colocarse a la derecha, solo por joder. Y si es la derecha la que gana podría exiliarse a la concha de un molusco. Si va al mar añora las cumbres y el vuelo de los buitres. En lo alto de algún monte siempre le acompaña una capa de salitre y el rumor del pedernal arrastrado por las olas. Le da igual el cine o el teatro, pero se puede reír con el drama más aciago o llorar con la comedia más absurda. Si le aman tiende a la autodestrucción y al onanismo, si le odian se entrega como el más servil de los vasallos. Cuando ama muere, como el rayo que alcanza una noguera en un valle de la Alcarria.
Me ha gustado mucho esa sucesión de opuestos, cómica en algún punto, poética en otros, bastante realista en la mayoría. En cualquier caso, lo describes tan bien que me resulta muy visual.
Mucha suerte, un abrazo y Feliz Navidad, Juancho.
Se supone que los géminis tienen (o tenemos) que lidiar, por naturaleza, con una actitud concreta y con la opuesta, según sople el viento, o en contra de lo que se espera de ellos (o de nosotros). Tu protagonista posee una personalidad tan compleja como interesante, si bien, la convivencia con él o ella no debió ser fácil. No obstante, ese final amando es apoteósico, aunque tenga tragicas consecuencias.
Un relato en el que se respira el gusto por lo bien escrito, tu intención de transmitir un mensaje cuidando mucho las palabras y combinándolas con maestría
Un abrazo, suerte y felices fiestas, Juancho
Muchas gracias, Ángel, tus comentarios suben la moral al más pesimista de los escritores, como puede ser mi caso. No debe ser fácil convivir con un géminis, con esa bipolaridad en la que a veces nos vemos envueltos, pero no es fácil luchar en contra de lo que predeterminan las estrellas. En cuanto al final, creo que cuando amamos todos morimos un poco en favor de la persona que recibe nuestro amor, que no siempre tiene que ser una pareja.
Un abrazo grande y a seguir disfrutando, como seguro que lo has hecho hasta ahora, de lo que queda de fiestas, solo hemos pasado el primer asalto…
Muchas gracias, Ana, por la lectura y el comentario. La verdad es que releyendo el micro, creo que debería haber arriesgado un poco más, salir del tópico, llegar algo más lejos. Me alegro de que te guste, aunque tal vez algún día lo reescriba para darle un toque diferente.
Un abrazo fuerte y Feliz Navidad!!!
El auténtico espíritu de la contradicción. Un texto muy bien escrito, visual y también música. Creo que hasta he escuchado el «rumor del pedernal».
Un abrazo y suerte
Muchas gracias, Rosalía, por la lectura y por el comentario. Acabo de darme cuenta que eres la finalista del REC de la semana pasada y que ayer, jo, se me pasó escucharlo, luchaste por la final mensual (a ver si busco el podcast), espero que ganaras y tengas ya el pasaje para la final anual, si no ha sido así, seguro que habrá más oportunidades. Muchas suerte y muchas gracias otra vez!
Un abrazo grande y felices Navidades!!