57. Barrendero nocturno (Blanca Oteiza)
Cada última noche de mes, recorre las calles más oscuras de la ciudad en busca de la persona agraciada. Suele encontrarlas entre cartones, con la mirada vacía de quién ha perdido la fe y sólo espera que el minutero detenga su corazón. Una vez escogido al afortunado, lo encandila hablando de una ducha caliente, ropa nueva y una deliciosa cena, incluso, de una noche entre sábanas limpias sobre un colchón mullido. Acompañado regresa a su casa, sabiendo de su buena acción, así se ganará el cielo, lleno de estrellas.
Entre manjar y manjar conversa interesándose por su vida, el porqué de esa situación, si tiene familia o alguien a quien amó. Tras el postre se ausenta a la bodega donde prepara el vino especial con el que finalizará la cena, un brindis y otra estrella que brillará desde esa noche en el cielo. Así, como dios divino que limpia la tierra de impurezas, el barrio sanará gracias a su ayuda.
Un iluminado peligroso. Los peores son los que, como tu protagonista, se creen imbuidos de una misión casi divina, con la que están convencidos de hacer un bien a la humanidad. Tal vez haría un verdadero favor a la sociedad si probase de su propio vino, pero seguro que no está en sus planes.
Un abrazo y suerte, Blanca
Muchas gracias Ángel por tu comentario.
Como bien dices, esa clase de personas que se creen elegidas por el divino para hacer «el bien» son un verdadero peligro.
Un abrazo
Pobres «sin techo» que se dejen abrazar por las promesas de este personaje » iluminado». Es un ser tan peligroso que se cree con la obligación de » limpiar» el barrio, como si fuera un Dios. Es mucho mejor seguir acampando entre cartones, al raso, que probar de esa sabrosa cena y ese vino tan » especial». Un abrazo, Blanca
Muchas gracias Gloria por tu comentario.
Como dices, más vale dormir al raso tranquilo que cruzarte en el camino de este «limpiador» de calles.
Un abrazo
Para este barrendero nocturno, el barrer es sinónimo de eutanasia. Impresiona el aplomo con el que escoge, engatusa y convida a sus víctimas con el «vino especial» con el que pondrá otra estrella en el firmamento, y el orgullo y convencimiento que tiene creyendo que así, con su «buena acción», se ganará el cielo…
Temendo micro, Blanca; me impactó.
Besos😘😘
Mariángeles😇😇
Muchas gracias Mariángeles por tus palabras.
Lo peor es que existen personas de ese tipo, iluminados que piensan que hacen un bien a la sociedad, cuando es todo lo contrario.
Un abrazo