19. CUANDO LO BELLO ACABA
Fue bello mientras duro.
Era tan hermoso verlos pasear por el prado. Como la fresca hierba acunaba sus no menos lindos cuerpos, mientras Lucas y Fany no cesaban en eternos juegos sobre ella.
Sin saber como, todo cambio, tornándose bronco y feo.
El acuerdo de divorcio estaba decidido. No podían seguir así, se sucedían las peleas, gruñidos, malos gestos, siempre marcando territorio. La separación parecía la única solución.
Dadas las circunstancias, seguro que sus hijos lo entenderían.
Mas, se dieron una última oportunidad, algo a lo que aferrarse, para intentar evitar la separación a toda costa.
Llamaron a un adiestrador, este, en menos de una semana, consiguió que Lucas y Fany volvieran a convivir juntos en armonía.
El matrimonio estaba feliz, ya no tendrían que separar a sus queridos perros.