Esta Noche Te Cuento. Concurso de relatos cortos

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CUMPLIR LOS TREINTA

Cumplir los treinta  es una de esas fronteras no visibles que uno, que una, encuentra inesperadamente por el camino. Nadie sabe en que momento, pero de pronto has abandonado la juventud y comienzan las primeras preocupaciones serias por hacer de nuestra entidad … una adecuada identidad.

Encontramos, casualmente, esa preocupación por «comenzar a cuidarse» en el encuentro de hoy. Vega, dentro de su Treinta y tantos,  llena de guiños que todos entenderemos como propios, nos dice «No ves que siento el pánico físico, / que aflora sin querer/ un gesto, antónimo.» Merece la pena detenerse a escucharla completa…

En la preciosa edición de SUEÑO de Haruki Murakami ( e ilustraciones de Kat Menschik) la protagonista (cuyo insomnio le provoca un estado de permanente reflexión) nos muestra esa misma preocupación. Aquí os dejamos un fragmento…

 

«Me gusta pararme desnuda frente al espejo. Me gusta contemplar allí sus contornos suaves, su armónica vitalidad. Puedo percibir cómo en su interior  late algo muy importante para mí. No sé qué es, pero no quiero perderlo.

Voy a cumplir  treinta años. Algo que comprendes al llegar a esta edad es que, a los treinta, no se acaba el mundo. A mí cumplir treinta años no me produce ningún placer, pero también hay cosas que resultan más fáciles con los años. Es una cuestión de enfoque. «

 

TEXTO: SUEÑO  de Haruki Murakami

TEMS MUSICAL: TREINTA Y TANTOS, de Vega

 

8 Responses

  1. Esperanza Tirado Jiménez

    ¿Recuerdas la serie ‘Treintaytantos’? Transcurría durante la época de los ‘yuppies’. Me ha venido a la cabeza al leer tu post. Cuando la emitían, esa edad me quedaba todavía muy muy lejos.

    Tuvo 4 temporadas y dramatizando/americanizando situaciones, reflejaba el cambio que mencionas: el paso de esa frontera en la que ya eres un adulto con responsabilidades y, en bastantes casos, familia de la que ocuparte.
    La recuerdo con cierta nostalgia posiblemente porque una de las protas se llamaba como yo.

    La intro: http://www.youtube.com/watch?v=hiSqroGvQMw

    Ficha de la serie: http://www.filmaffinity.com/es/film809575.html

    Conocía a Vega, pero no la canción que has puesto.
    Gracias 🙂

  2. Amélie

    Esperanza, me has recordado esa serie y ya lo creo que la miraba, pues me identificaba un poco con la protagonista, en esa época es cuando tuve a dos de mis hijos y tenía treinta y poco…a partir de entonces empezaron las preocupaciones serias.
    Gracias, Jams, por recordar aquel tiempo.

  3. Paloma Casado

    También me gustaba la serie de treinta y tantos…Quién los pillara. Si cuesta cumplir los treinta no te digo nada los 50

  4. Aurora Royo

    Treinta molan, pero molan más 25 ¡un cuarto de siglo!. Me pasé celebrándolo todo el año. Qué tiempoooooosssss!!!!

    Aunque también me molaron los cuarenta. Por circunstancias variopintas (ya os contaré -igual hago algún micro-) los celebré tres veces, al cumplir los cuarenta, los cuarenta y medio y los cuarenta y uno.

    Los cuarenta y dos ya no ¿eh? Solo una vez, aunque, bueeeeno, durante dos semanas…

  5. Yo también recuerdo esa serie, aunque era muy niña. Y ahora que los tengo pues, sí, tengo un crío y estoy separada. La verdad es que mis treinta y tantos están un poco avejentados, con tanto disgusto, tanto sinsabor. ¡Tengo ganas de divertirme un poco! Ya tanto sacrificio es demasiado. Bueno, gracias por tu texto nostálgico.

  6. El libro «Sueños» es muy bello. Soy una enamorada de los libros ilustrados y este ya forma parte de mi mesilla de noche para esos momentos en los que no puedo dormir. De esa forma, evito lo que le ocurre a la prota del libro (os lo copio):

    «Me senté en el sofá y continué leyendo Anna Karenina mientras saboreaba el chocolate. no tenía nada de sueño. Tampoco sentía el menor cansancio. Podía continuar leyendo indefinidamente, sin parar. Cuando acabé la primera tableta, rasgué el envoltorio de la segunda y me comí la mitad.»

    Y es que … como me levante de la cama…jaja…me como una tableta leyendo sin darme cuenta. Ahora agarrada a este libro me resisto a levantarme. 🙂

    De la edad no hablo, que luego toooodo se sabe, jiji.
    Besos a todas.

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