ENE149. CAMBIANDO DE BANDO, de Nicolás Jarque Alegre
Ya no sufría dolor y todo el cuerpo me pesaba. Sentí que me desvanecía en la camilla junto a esa enfermera desbordada que no podía darme ni consuelo. Cerré los ojos y se silenciaron los lamentos de los pobres diablos del hospital de campaña. Entonces, me vi en el valle donde nací, junto al río, en un día soleado en que los pájaros cantaban, mamá preparaba el almuerzo con la ayuda de Valentina y papá enseñaba a pescar a Juanito mientras yo estaba apoyado en un roble, escribiendo en mi cuaderno historias de amor. ¡Qué paz! Una armonía efímera, pues de repente el cielo se partió en dos y contemplé como se evaporaban los míos sin que pudieran oír mi auxilio. Lloré afligido la pérdida. Un telón negro cayó ante mí. Pensé que era el final del guerrero que fui y me despedí gritando ¡libertad! Pero en ese momento caí en un túnel húmedo de donde noté que una fuerza tiraba fuerte de mí para extraerme de la oscuridad. Y cuando desperté, horrorizado descubrí que era un bebé en brazos de un hombre vestido con el mismo uniforme contra el que luché. Sí, era mi final y el de ellos.
Se palpan las guerras; lo inservibles que son, la muerte, la belleza del día a día, la vida que continuamente reemplaza… Suerte y saludos.
Una reencarnación con memoria…Me gustó Nicolás.
Besos desde el aire
Me ha gustado, Nicolás. Es muy original. Eso de la memoria en nuevas reencarnaciones es una faena. Menos mal que no se da o sí?
Un saludo.
Qué bien contada esta reencarnación, lleno de detalles plasmados a través de los sentidos. Buena historia.
Un abrazo.
Como cuando llora un bebé en un entierro.
Un abrazo Nicolás.
Un relato bueno bien narrado. Te felicito, Nicolás. El título, muy bien escogido.
Un abrazo.
Suerte en este camino. Tus letras te llevan…
Me ha gustado mucho este relato tuyo, en especial cómo narras ese momento de la transición entre las dos vidas. Enhorabuena.
Buena atmósfera y muy bien narradas las sensaciones de ese semi -sueño.
También un final coherente con la historia de delirios.
Saludos.
Me ha gustado mucho cómo diriges la historia hasta ese final inesperado, revelador, y sin embargo un tanto desdibujado, que deja una rendija abierta a la imaginación del lector.
Muy buena historia.
Saludos.
Fina sátira de las componendas del mundo actual y de los heredados vicios como si fueran incrustados en los genes. Pone de manifiesto la estupidez del ser humano con una ironía muy bien llevada.
Es fantástico este micro. Una manera muy original de hablar de la reencarnación. Felicidades y suerte
Volver para nacer en un cuerpo del bando contrario. Quizás para aprender? Para ver los dos puntos de vista? Buen título, Nicolás y bien narrada esa transición y rencarnación.
Suerte
Besitos
Simplemente impresionante, me encanto, mis felicitaciones.
Simplemente impresionante, me encanto, mis felicitaciones.
Quizá el cambio de bando una nueva oportunidad? Historia de reencarnación bien llevada.
Un abrazo
Quizá el cambio de bando una nueva oportunidad? Historia de reencarnación bien llevada.
Un abrazo
Muy buen título, que guía la lectura, Nicolás. Nacer uno en el otro bando cambia la perspectiva sobre lo bien y lo malo, subrayando la relatividad de estos nociones en tiempos de guerra.
Un saludo
Perder la memoria de una vida a otra es una simple cuestión de supervivencia. Duro y muy original. Suerte, Escritor.
Un abrazo,
Jo, Nicolás se me había pasado tu relato, y es fantástico, un relato basado en la reencarnación, con esa transición tan bien narrada de un tiempo al siguiente, y para colmo, nacer al otro bando, es la vida, tenemos que probar todas las opciones, ya vés.
Un abrazo y mi felicitación por tan bella historia.