35. Es lo que hay
Cada mañana amanecía con dos o tres escamitas más. Sabía que en cuanto fueran más visibles no iba a poder salir a la calle, como mis padres que vivían encerrados hasta las noches en las que salían a ganarse el sustento.
Cuando trajeron a Helena, mi amor platónico, no pude convencerlos de que la dejaran ir, y tuve que cometer el gran parricidio.
Ella entendió lo que había hecho y se abalanzó sobre mi como si de Superman se tratara. La cosa fue a más y fuimos desprendiéndonos de la ropa.
Ni que decir la cara de asco que se le dibujó, en ese anterior lienzo de amor y deseo, cuando vio la extraña morfología de mi piel.
Voy a reconocer que me la comí, y que echo de menos a mis padres, y el que quiera juzgarme, que me juzgue, a mi ya me la pela.
Este monstruo va a lo suyo, le importa un comino su manera de actuar o su apariencia. El título y el cierre retratan a un ser irresponsable, de esos hay muchos. Buena historia, leo una crítica, entre líneas.
Saludos.
Gracias, Beto. Hay cosas entre lineas, sobre todo en cuanto a la obligatoriedad de pertenecer a un grupo marginal por no sentirse acogido por otros. Perdón si es pretencioso.
Un abrazo
Jijijijij!!!!!!!
Si es que hay amores que matan!!
Buenísimo, me ha encantado.
Beso.
Gracia, Auro. Está bien esa risa macabra.
Un beso
Cuidadín, que este es un monstruo en toda regla, a la vieja usanza. Pero además con cierta carga social, muy patente en cómo vivimos nuestro día a día. Tal vez un producto monstruoso resultado de nuestra sociedad actual.
Enhorabuena y suerte.
Ton, verdaderamente muy bien visto, me alegra la sintonia en la percepción aunque no siempre sea necesaria.
Un abrazo
jajaja…a lo suyo…¡claro que si! Si es que en el amor y en la guerra todo vale…y cuando el hambre aprieta…no hay monstruo que se resista.
El final «me la pela» es buenísimo.
Gracias, Reve. Si no te dejan otra, es lo que hay.
Tu comentario no me la pela, me alegra mucho.
Besetes
Gracias, Juan, por tu más que interesante comentario. Reconozco sinceramente no haber leido a Lovecraf, pero tus palabras son como una invitacion a ello.
Un abrazote
Explosiva fusión de monstruosidad y sociedad la que nos trae un original relato que sorprende a cada nueva frase. Un singular enfoque de la consigna que sobre todo da que pensar. Mucha suerte 🙂
Gracias, Juan Antonio, por verle el sentido y apreciarlo. Siempre grata tu presencia.
Abrazotes
Hola, Javier.
El pobre no podía hacer otra cosa, jajaja.
Madre mía, te has cargado hasta al apuntador, pero a mí me encanta la frialdad de tu protagonista que, como si de un macarrilla se tratase, concluye con esa frase que te deja con un sonrisón en los labios: «a mi ya me la pela».
Besos, y mucha suerte.
Gracias, Towanda, provocar alguna sonrisa es buen premio.
Muchos besetes
Sorprende el lenguaje aunque pensándolo bien un monstruo no tiene por qué ser políticamente correcto; seguro que es más creíble este que los malos de las películas maquillados hasta rabiar. Suerte.
Gracias, Lorenzo. De vez en cuando sienta bien salirse de lo correcto.
Un fuerte abrazo