48. Esfuerzo numantino (Petra Acero)
Tras las doce campanadas: ¡nada de nada! Porque los muertos no esperan nada del año nuevo, y Natividad desea estar muerta… Como buena numantina no se rinde, y anticipa su glorioso final enarbolando el documento que así lo confirma. Le echa un último vistazo: “La víctima, dulce y tierna, se deshizo en… La muerta trató, heroicamente, de posicionarse en primera fila… La inmolada resultó de un gusto exquisito…” Nati piensa que tal vez se ha excedido con los sustantivos, que los adjetivos igual pecan de pretenciosos, que no estaría mal cambiar el término “muerta” por asediada, mártir, suicida o… elegida. Lo que no reconoce es que tanta literatura, tanto bodoque, filigrana y fantasía desvían la atención y le restan realismo… Pero sobre todo, Natividad olvida que ¡todavía no está muerta!, y que por mucho que redacte su ansiada necrológica cada Navidad, seguramente este año tampoco lo estará. Porque tras las doce campanadas, entre brindis de cava, turrones de Jijona, pan de Cádiz, polvorones y mantecados de Estepa o Antequera, mazapán de Soto y Toledo… ¿quién va a elegir una figurita de mazapán soriano?
Hola, Amparo.
¡Qué derroche de verbo! Cómo se nota el dominio que tienes de la palabra. Es un disfrute de colores, sabores y figuras (de mazapán son casi las que menos me gustan de la Navidad, prefiero las marquesitas)…
Desde luego, la numantina tiene una moral que pá qué.
Te deseo mucha suerte, reguapa.
Besos.
Lo que una figurita de mazapán puede sentir es la bomba (jajaja).
Parece irónico que su éxito dependa de que la coman, de morir en Navidad.
Y ese férreo deseo (numantino) de conseguirlo!!!
Pues a mí, el mazapán tampoco me hace mucha gracia, no te creas. Hombre, el de Logroño (el de Soto), ese es otro cantar.
Un abrazoooo grande
Ese no lo conozco, pero si dices que es bueno… ya buscaremos una excusa para tomarnos unas figuritas cualquier tarde, ¿hace?
Besos, bonita.
Cómo sería la vida de una figurita de mazapán???
A veces las grandes gestas se debaten sobre una bandeja de dulces navideños 🙂
La ironía de querer que te coman!
Los sorianos tenemos mucho de numantinos o cabezones 🙂
Un besazoooo
Hola, Amparo, mi guapísima amiga. A mí me pasa lo mismo cuando escribo los adjetivos los su… etc hay veces que me mareo. Un relato entretenido. Un fuerte abrazo y felices fiestas, Sotirios.
La ironía de una vida enfocada en la muerte.
Una necrológica absurda, exagerada, tentando la suerte, conjurando a su muerte…, a los comensales para ser elegida.
Un esfuerzo inutil. Un sinsentido (me llaman la atención los imposibles).
Un abrazoooo, Soti. Felices Fiestas. Ni se te ocurra comer mazapán: que sufra!! 🙂
Que rico y divertido relato. Texto de gran agilidad con unas dulces palabras que dan ganas de comérselas y de leerte otra vez.
un beso Petra
Amparo podía haber dado para más, creo que te has quedado con ganas jeje.
Suerte este mes y un abrazo
Desde luego a imaginación no te puede ganar nadie, mira que meterte en la piel (o en la almendra) de una figurita de mazapán. Me encanta! bueno yo tampoco la cogería, porque el mazapán tampoco es lo que más me gusta. Eso sí, mi marido se la zampaba a la primera de cambio.
Me uno a la propuesta de Towanda, podemos hacer una quedada para debatir sobre la importancia y variedades del mazapán, o de cualquier otro dulce navideño.
Un besazo
Desde luego, el más dulce de los relatos de esta Navidad. Has conseguido que, de ahora en adelante, me fije de dónde son los mazapanes que me zampe y, como pille alguno de Soria, sonreiré tanto como lo he hecho al acabar de leer tu micro, y me lo comeré en tu honor.
Abrazo tierno.
Una idea muy imaginativa con sabor a mazapán del bueno. Una dulce manera de afrontar el tema del mes. Suerte y saludos.
Amparo, imaginativo y no lleno de verdad este relato. Frente a los famosos mazapanes y bombones, los mas modestos se quedan en la bandeja año tras año. Suerte y felices fiestas
Amparo, súper original, al igual que las fallas tienen que arder para renovarse año tras año, tu protagonista, Natividad, tiene que perecer para dar paso a otros mazapanes. También veo un grito soterrado del débil ante los poderosos. Muy bueno. Abrazos.
|Son unas letras deliciosas.
Amparo, me encanta tu modo dicharachero de escribir, sobre mazapán, sobre flores, sobre lo que sea. Es fresco y chispeante, siempre original. Suerte y un beso grandote.
Hola a todos.
No busquéis realismo, aunque empaticéis, o no, con la pequeña protagonista.
Pues me apetecía salir de lo cotidiano, de seres a nuestra imagen y semejanza; de enfoques navideños habituales, más o menos razonables.
¿Qué desea en Navidad el ser humano? Paz, Amor, Igualdad, Justicia…
Pero, una humilde figurita de mazapán, ¿qué espera de la Navidad???
Y de ahí, mi preocupación y empeño en relatar la corta (o no) vida de una figurita de mazapán nada famosa 🙂
FELICES FIESTAS A TODOS LOS SERES HUMANOS!!! 🙂
Hola Petra. Yo de mayor quiero escribir como tú. Me parece un derroche de capacidad el redactado y el enfoque e historia explicado otra genialidad. Me ha gustado mucho por muchas razones. Textos así tendrían que leerse en los colegios, para ayudar a comprender a los niños hasta dónde puede llegar la palabra y la imaginación cuando se utiliza como tú lo has hecho. Un abrazo y mucha suerte 🙂
Un auténtico microrrelato de Navidad, de los que lo lees una y otra vez y no te empachas. Vas a acabar el año a lo grande.
Ja ja ja, qué bueno y divertido tu relato. No sé yo los mazapanes pero en Soria tienen unos dulces típicos que venden en las panaderías que son muy ricos. Unos tienen la fama y otros cardan la lana. Porque Soria está un poco a desmano pero casi que mejor porque es una provincia preciosa que los sorianos saben cuidar muy bien.
¡Viva Soria y sus mazapanes!
Besos
Interesante final, descolocas del todo. Que no ponga que es soriano que a mi me encanta probar cosas nuevas jaja.
Sabroso y original. El final me ha sorprendido tanto que creí no haberlo entendido bien y, tras otra lectura, confirmo que tu relato es sabroso hasta el final. Enhorabuena.
Suerte y Feliz 2015