65 Extrañezas repentinas (Blanca Oteiza)
Te echamos de menos, aunque no sé quién de los dos te añora más. Cada vez que salimos al parque Sol te busca por cada rincón y yo en mis brazos vacíos. Por las noches nos acurrucamos bajo la manta en el sofá que se nos queda grande. A veces siento el impulso de llamarte, pero cuando recuerdo la cara de tu nueva compañía, se me quitan las ganas de nuevo. Otras veces deseo encontrarme contigo por la calle, aunque ya no sea yo, quien te coja de la mano.
Esta tarde hemos cambiado el paseo habitual por un nuevo barrio sofisticado a las afueras de la ciudad. Mientras Sol olisquea entretenido, observo desde la lejanía la luz de la ventana de tu nueva vida.
Cuando una pareja se rompe siempre hay una de las partes que sufre más, lo lleva peor o tarda en acostumbrarse un mayor tiempo. Si el ambiente habitual no cambia el dolor se acentúa, no solo el de la pareja afectada, también el del fiel amigo canino que no entiende la ausencia.
La luz del hogar en el que ahora reside quien ha rehecho su vida contrasta con la oscuridad de la noche desde la que es observado por quien no termina de aclimatarse al nuevo vacío.
Un relato sobre el desamor y el tiempo que precisan algunas personas para adaptarse a las nuevas situaciones, con la incógnita de si un corazón roto se puede llegar a enmendar.
Un abrazo y suerte, Blanca
Muchas gracias Ángel, siempre resumiento tan bien la esencia de los relatos.
Aquí vemos la oscuridad de quien se queda y la luz nueva que brilla en la otra de las partes. Esperemos que pronto pueda encontrar otra luz que le haga brillar.
Un abrazo
Hola, Blanca.
Hay situaciones en la vida difíciles de sobrellevar. Es necesario darse tiempo y, sobre todo, tomar conciencia y permitirse avanzar. Quienes protagonizan este relato aún están en una fase temprana.
Muy bien creada la atmósfera melancólica que envuelve el relato.
Un cálido saludo.
Muchas gracias Barceló por tu comentario.
Un abrazo
Me has engañado totalmente con Sol… qué bueno. Y qué difícil superar una ruptura cuando aún se quiere. Mucha suerte. Besicos.