JORNADA 10. ENCUENTRO 6. ANDALUCÍA A / CASTILLA Y LEÓN B
ANDALUCÍA A
Salva Terceño, Ezequiel Barranco, Pablo Núñez, María Posadillo, Tomás del Rey
CASTILLA Y LEÓN B
Raquel Lozano Calleja, Antonio Toribios, Mar González
Cada uno de los equipos aquí señalados tendrá que publicar en el espacio reservado a los comentarios de esta entrada del blog, un relato INÉDITO de un máximo de 180 palabras (sin contar el título) antes de las 20 horas (hora local española) del DOMINGO 18 de Octubre cumpliendo las siguientes condiciones:
CONDICION 1: PURO FOLCLORE
Tendréis que integrar en el relato cualquier aspecto o detalle relacionado con el folclore de vuestra Comunidad Autónoma correspondiente. Podrá ser una referencia directa o indirecta a cualquiera de los aspectos que componen este ámbito de la cultura tradiconal: fiestas, costumbres, música, danzas, leyendas, rasgos en la vestimenta o el hablar, creencias, artesanía… Podrá aparece como tema sustancial, como parte de la ambientación o como una referencia, pero deberá aparecer claramente y formando parte de algún modo de la historia principal del relato.
CONDICIÓN 2: ES FÁCIL, PALABRA…
Tendréis que incluir una palabra dentro del texto o en su título que pueda considerarse jerga, argot o vocabulario común en vuestra propia Comunidad Autónoma. Ejemplos: la guagua de los canarios, el peluco de los madrileños, el txirimiri vasco, el guaje asturiano…
PUNTO EXTRA: LA JOTA… O MEJOR… 10
No olvidéis que esta condición es voluntaria. A veces querer conseguir uno… supone perder dos…
Porque en esta ocasión conseguir un PUNTO EXTRA tiene una condición directa, o sea que bastará cumplirlo debidamente en el relato oficial de la Jornada para obtener el punto: tendrán que aparecer en el relato, incluido el título, un total de 10 letras J, ni más ni menos… Las palabras que contengan la J tendrán que aparecer en mayúscula; ejemplo: “JAMÁS aseguró que fuese el MEJOR vino de RIOJA”
No olvidéis que no es obligatorio. Podéis presentar un relato que no cumpla esta última condición del Punto Extra.
Consultadnos cualquier duda. Hay tiempo.
El relato puede ser presentado con cualquier usuario del equipo, y llevará el nombre del equipo, entre parentesis, junto al título.
Revisad bien el texto antes de publicarlo porque, una vez hecho, no habrá posibilidad de corregir ni reeditar.
El resultado de este encuentro se hará público en una entrada general de la sección ENoTiCias.
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La rodea (Castilla y León B)
“1521 y en abril para más señas, en Villalar AJUSTICIAN a quien JUSTICIA pidiera”
Romance de Los Comuneros.
Aprendí de pequeño que hay batallas que hay que celebrar, aunque se pierdan. Mi abuela cantaba todo el tiempo. No eran canciones alegres. “Son cosas de la vida, de la memoria”, me decía y arrastraba entre dientes la historia de los comuneros. “Desde entonces ya Castilla no se ha vuelto a levantar”. Entonces, ESTRUJABA con las manos la rodea que colgaba de su delantal. “De aquellos polvos vienes estos lodos, chico, JAMÁS lo olvides.”
Hay batallas que hay que celebrar para no olvidar. Como su olvido. Ella perdió la guerra contra la memoria. DEJÓ de cocinar. DEJÓ de conocernos. DEJÓ de muchas cosas, pero siguió cantando, a su manera, y siguió llevando a todas partes su rodea, ese VIEJO paño de cocina con el que lo mismo cogía una cazuela que te daba en el culo para que no te comieras las rosquillas.
Hoy, LEJOS de mi tierra, sigo teniendo esa rodea y la sigo ESTRUJANDO en días como hoy.
Más guantás da el hambre (Andalucía A)
Se crio entre fraguas y martinetes, y allí se inició en los secretos del cante JONDO. Siempre cuenta que conoció a Camarón una tarde LEJANA de porros y aguardiente, y que en su JEREZ natal lo llamaban para animar todas las zambombas. Acompañó a Rancapino HIJO en un concierto. Luego, aprendió a vivir de los turistas, a aprovechar la sorpresa sonriente de los JAPONESES con su rasgueos de guitarra, el QUEJÍO de su garganta rota y el zapateao de unos botines AJADOS pero siempre brillantes. Sabía que lo suyo no era el baile ni la guitarra, sino el dolor brotándole a borbotones garganta arriba desde algún JIRÓN del alma. Ahora ya no quedan turistas, y los lugareños no se DEJAN impresionar por sus excesos. Malvive dando sablazos, pidiendo una limosna encubierta con la amenaza de soltar todo el repertorio a los indefensos clientes de los veladores. Siempre lo acaba echando algún camarero, y él protesta con la dignidad ofendida de los borrachos. Luego, se recompone y se ALEJA mascullando entre dientes alguna maldición gitana.