Esta Noche Te Cuento. Concurso de relatos cortos

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JUL36. UNA COMA, de Javier Sánchez Campos

— ¿Profanar un clásico? ¡Estás loco!
—No te pongas así. Es una simple coma, una pequeña alteración visual. No puede ser tan grave.
—Por menos se han iniciado guerras. ¿No conoces aquello del aleteo de la mariposa?
—No.
—Te lo explicaré. Se dice que…
—La verdad, me da igual la mariposa y sus alas. Sólo me gustan, y poco, los gusanos de seda. Con sinceridad: prefiero la coma.
—Joven, descabezado e ignorante, ya veo. Si le perdemos el respeto a los clásicos, ¿qué nos queda?
—Todo. El inicio. Un comenzar de cero. Un mundo de creación. Reescribir literatura. Reescribir el presente. Quizá, por qué no, reescribir el pasado.
— ¡Atrevida inocencia! La verdad, preferiría no hacerlo. Pero es tentadora tu propuesta, he de admitirlo.
—En realidad, deseas hacerlo. Procedamos, pues, no te hagas el interesante.
Los dos se acercan a un cuaderno en el cual está escrito el clásico. El más joven puntúa el texto y coloca la coma un poco más allá de donde se hayaba la original. El resultado deja a ambos sumidos en ideas totalmente distantes.
«Cuando despertó el dinosaurio, todavía estaba allí«.

36 Responses

  1. A los aparentes pormenores de la lengua, que tienen gran importancia, deberíamos prestarles más atención. Poner las cosas en su sitio (tides, puntuación,…) tiene su mérito; jugar con ellos debe ser posterior.
    Muy ingenioso, Javier.
    Juan M

    1. Hola, Juan Manuel;
      Sin duda que sí. Aquello de los pequeños detalles como marcadores de diferencia, no es un capricho. Y ya hablamos sólo de «mérito», sino de cambios totales de significados. Imagina que en vez de un micro, habláramos de una Ley. Una coma puede querer decir lo contrario a lo que se pretende. Estemos atentos. Un abrazo.

    1. Hola, Arantza;
      Me encanta que te haga gracia, pues nada hay más que difícil que conseguirlo. Pobre dinosaurio, sí. ¡Y qué manía la nuestra de no tocar ni jugar con los clásicos! Debemos cogerlos y someterlos al presente (desde el respeto, claro).
      Un beso y a innovar!

  2. Una coma dice mucho, o quita mucho, en fin, no es cosa de broma. En este caso es la diferencia en que despierte un dinosaurio a tu lado, o no.
    Muy divertido.
    Saludos.

  3. Que ingenioso Javier y que razón tienes. La coma puede hasta salvar una vida.
    «Perdón imposible, que cumpla su condena» o bien «Perdón, imposible que cumpla su condena.
    Perdón por el atrevimiento.
    Me ha gustado mucho.
    Un saludo y suerte.
    Elena

    1. Hola, Pablo! Me encanta la metaliteratura, donde juegan y confluyen (o deberían confluir) tantos y tan buenos textos.
      La frase tuya es tan válida como la mía, y si le ponemos una admiración tenemos otra distinta al 100%.
      Un abrazo.

  4. Hola, Javier. Ingenioso relato. Te copio un correo de esos que circulan por ahí que viene al pelo.

    LA COMA

    Julio Cortázar escribía: ‘La coma, esa puerta giratoria del pensamiento’

    Lea y analice la siguiente frase:

    ‘Si el hombre supiera realmente el valor que tiene la mujer andaría a cuatro patas en su búsqueda’.

    Si usted es mujer, con toda seguridad colocaría la coma después de la palabra mujer.

    Si usted es varón, con toda seguridad colocaría la coma después de la palabra tiene.

    Saludos y muchas suerte.

    1. Hola, Rafa;
      Brutal Cortázar y este juego de palabras o microrrelato o lo que sea. Cortázar es un monstruo y verlo aquí reflejado en mi texto me provoca vértigo. En fin, gracias por pasarte y por el regalo. Un fuerte abrazo…

  5. Hola, Javier.

    Aunque una coma pudiera parecer algo insignificante, tú demuestras en tu micro que no lo es.
    El final es la leche.
    Felicidades y suerte.

    Un abrazo.

    1. Hola, Towanda;
      Me siento muy agradecido por tus palabras. Es cierto que lo más importante es el final, pues el texto va girando entorno a él. Y sí, ya lo he dicho: la clave viene marcada por los pequeños detalles.
      Un beso y, de nuevo, gracias.

    1. Esther, yo sí me quito el sombrero ante tus palabras. Y por favor, póntelo que hace un sol de justicia.
      Es cierto que el relato es como un juego, como el riachuelo que te lleva hacia la gran desembocadura. Esa era mi intención y parece que lo conseguí. Un beso.

  6. No lo había leído, alguno se me pasa y me lo pierdo, pero una vez leído, te felicito y creo que tiene mucho mérito, tiene imaginación, calidad y buen hacer y ha merecido estar como está entre los elegidos del mes.Abrazo.

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