JUN60. CAMINARÉ SOBRE LAS NUBES, de Pedro del Río
Nunca alcancé el lago en mitad del desierto. Cuanto más caminaba aquella senda polvorienta y más quemaba el sol, más se alejaban aquellas acacias reflejadas en la orilla, espejo vibrante en el horizonte. Inalcanzable horizonte. Añoré las nubes, añoré la lluvia y el barro. Soñé soltar los plomos que atenazaban mis tobillos y poder volar, ligero, volar hasta el mar. Caminar más allá de la realidad.
Hoy se ha ido el sol. Se ha ido el azul. Algodones grises parecen cubrirlo todo. No hay reflejo, no hay luz, no hay camino. Añoro la lluvia, el agua cubriendo el sendero, un brillo… No sé volar, no sé nadar, pero si ponen un espejo en el suelo… yo bajaré hasta el cielo y caminaré sobre las nubes.
Me gusta mucho la imagen de poner un espejo y caminar sobre las nubes, sencillamente maravilloso. Precioso y poetico relato. Mucha suerte y Besos,
Ana, lo ha escrito Pedro del Río, a quien yo también felicito efusivamente. Una poesia preciosa, emocionante y emotiva, conmovedora, envidiable… yo tambien quiero un espejo para caminar sobre las nubes, qué bonito!!
Muchas gracias por vuestras felicitaciones y amables comentarios. Me alegro que os guste «mi espejo», es muy gratificante.