03. LA NOVIA CADÁVER – EPÍFISIS
De entre las páginas del libro de anatomía, el profesor sacó mi ficha y me encaminé con el bedel y tres compañeros más al arcón de mármol donde estaban los muertos en formol.
El líquido ambarino, turbio, dejaba entrever varios cuerpos y al estar mojados costaba sacarlos, yo cogí la cabeza y al reconocerla, la solté, golpeando los otros cadáveres.
Mi otrora novia, guapa, aunque hoy, las suturas de la cabeza y cuerpo la afeaban, me miraba. La depositamos en la mesa de autopsias y el formol se iba por los sumideros, el olor no.
Una cicatriz bordeaba el nacimiento del pelo y otra más grande su abdomen y tórax.
Ese pecho, que tantas veces había acariciado, ahora amarillento y húmedo, ese vello púbico, ralo y pegado, con el que me gustaba enredar mi dedo, durante aquellas tardes de verano.
Tirando de los hilos gruesos, el abdomen se abrió como una granada madura. El profesor con un estilete nos señaló el útero cortado sagitalmente, con un embrión. Se suicidó, nos explicó y donó su cuerpo por si se encontraba con el futuro estudiante de medicina y enseñarle a su hijo.
Me desmayé, golpeándome en la nuca, ahora estoy en Toledo.
Impactante el relato. Crudo a ratos pero muy bien tirado. Mucha suerte 🙂
Gracias Juan Antonio, crudo como la vida, en las salas de autopsias.
Un abrazo
Me temo que tu estudiante no va a poder curarse. El impacto mental, ha sido peor que su paraplejia.
Y ella ha tenido un poco de mala uva. ¿no?
Un beso.
La venganza, Virtudes, es lo que tiene, muy mala leche.
Un beso
Eso sí que es una venganza, a ver cómo supera esto el pobre estudiante, le veo hasta cambiando de carrera, eso si el golpe en la nuca no le ha dañado los circuitos neuronales, como destrozada tendrá el alma.
Un texto con fuerza y muy gráfico que no puede dejar indiferente.
Suerte y un saludo.
La paraplejía que le ha quedado, Ángel, le impedirá huir de su recuerdo.
Un abrazo
Me he perdido en el desmayo de Toledo ¿?? Mañana lo vuelvo a leer a ver si el olor del formol no me atontatanto. Pero la trama es dura dura…
Un beso Epi.
Eva, en Toledo está el Centro Nacional de Parapléjicos, una institución en España en cuanto a dedicación y tratamientos para accidentes medulares.
Es la venganza de la novia cadáver.
Un beso Eva.
Pues confieso que , afortunadamente, no sabía de la existencia de ese centro, pero claro, a´si si tiene sentido lo de Toledo. Pues nada, ya me puedo acostar, que me has enseñado una cosa más. Un beso y suerte, Epi.
Pobre chico, menudo golpe (y no el de la nuca precisamente). Excelente relato Epi, muy bien contado. Lo único que no entiendo es lo de Toledo, no sé si tiene alguna explicación.
Un beso
Pensaba Blanca que el centro de parapléjicos de Toledo era superconocido. Error mío, pensar por los demás. Es lo que tiene el centralismo.
Un beso
Epi, sí, conozco que existe ese centro en Toledo, pero la verdad que cuando leí (dos veces además) tu relato no me vino a la mente el centro de parapléjicos (será que me pilla un poco lejos la ciudad).
Gracias por aclararme la duda.
Un beso
Es la venganza del inframundo de la novia cadáver.
Un beso
El recuerdo del tacto con los cadáveres, Juan, es uno de los peores y que no se olvidan fácilmente, bueno y el olor a formol.
Un abrazo
Epi, menudo relato, muy visual y muy crudo, muy bien narrado e impactante. Muy bueno. Un beso
Concha, sacado de la experiencia con cadáveres de mi época de Anatomía, que no dejan indiferente.
Un beso
Epi, maquiavélica venganza sazonada con mucha ironía. Me ha gustado mucho. Abrazos.
Gracias Salvador, eso pretendía.
Un abrazo
El micro es duro. Si ella fue capaz de llegar a eso para vengarse ¡qué no le hizo ese joven estudiante en vida! Desde luego consigues que el micro se te quede después de su lectura. Enhorabuena
Cuántas mujeres sufrieron a los estudiantes de otra época, David, cuántas historias en la literatura universal reflejan el abandono de esas mujeres al quedarse embarazadas por el señorito de turno.
Un abrazo
Sobrecogedor, no me desmayo por lo de la nuca. El relato no pierde su puntito erotico ni en la sala de autopsias. Te deseo mucha suerte.
Un Beso
Esther y que no se pierda, es la sal de la vida. Sino todo sería más soso.
Un beso
Muy bueno el relato, se me han puesto los pelos de punta. Enhorabuena y suerte
Estibaliz, no he querido despeinarte, perdona.
Un beso
alejandro, vaya situación y vaya final para un romance. Quizas real como la vida misma… suerte y saludos
Espero Calamanda, que no sea real, es producto de mi mente calenturienta.
Un beso
Fuerte relato, que ocurriría para que ella tomara esa decisión, y él ha tenido un final muy trágico. Supongo que estar en Toledo alude al hospital de paraplejicos.
Me ha gustado mucho, sobre todo por la original trama.
Saludos
Asun, tienes razón en casi todo, pero no era necesario hace años que pasaran muchas cosas, era normal el abandono de chicas embarazadas, por cualquier motivo. Hoy día la sociedad es más responsable(no los tíos).
Un beso
Impactante Epi, como todos tus relatos.Un abrazo.
Nuria, gracias, ser tan trágico me gusta, pero tengo ganas de volver a pasarme a lo picante otra vez.
Un beso
El estudiante, un elemento, hoy día el género masculino ha mejorado algo.
Un beso
Desde luego que esa mujer era previsora. Me ha gustado.
Más que previsora, debía ser la desesperación, en otra época, la ayuda familiar era menor.
Un abrazo
¡ Pero que mala baba la de la mujer oye!
Muy buen relato, hasta he tenido que ponerme un algodón con perfume en la nariz, no por el formol, ni el hedor a muerte si no por el olor a venganza.
Begoña, habría que ver el sufrimiento de esa mujer-niña, para entender el que tomara esa decisión.
Un beso
De miedo este relato. La chica se las traía, hay que ver si algo notó en ella el estudiante, que opto por abandonarla, mira que planificar una venganza tan cruel, para ella y el novio. Un buen relato Epi, muy visual, se graban las imágenes en la mente del lector. Me gusta, suerte.
Saludos.
Gracias Beto, he plasmado el recuerdo del trato con los cadáveres y la facilidad con que se abandonaban a las chicas cuando se quedaban embarazadas y no se asumía la responsabilidad.
Un abrazo
Uff, Epífisis, que relato tan ingenioso. Y vengativo. Toledo y sus montes, ¡qué buen lugar! Suerte
Javier, después de la Semana Santa voy a Toledo al aniversario del Greco, me han dicho que está impresionante. Me encanta recorrer sus calles, bueno y sus restaurantes.
Un abrazo
Muy bueno, Epi. Todavía queda mucho desgraciado suelto y, aunque nadie merece visitar Toledo más que para ver al Greco, es un final perfecto.
¡Besos!
Gracias Patricia, no sabía como castigar al malvado y lo bueno de escribir uno el relato es ser como Dios, así que dije ¡TOMA!
Un beso
Este micro deja huella muy profunda, que sorpresa para el estudiante y su final no sabemos si se lo merecía pero la vida esta llena de sorpresas y esta para tu protagonista le dejó » cao».
Sorprendete Epi, muy bien narrado.
Besos.
Puri, yo creo que si se lo merecía, aunque todo es un poco exagerado, tanto lo de ella, como lo de él.
Un beso
Super original relato, con tu sello característico, Epi.
Jo María Jesús, el sello se me termina, voy a tener que volver a lo erótico otra vez.
Un beso
Buen relato. Todo dicho. «Sorpresa te da la vida, la vida te da sorpresas».
Felicidades.
María, no quisiera sorpresas de ese tipo nunca.
Gracias
Un beso
Una venganza de antología en un relato impactante. Y todo aliñado con el hacer experimentado de quien disfruta escribiendo sobre las pasiones humanas. Buen cóctel.
Un beso
Gracias Paloma por mencionar las cosas que me gustan, los aliños, las pasiones y los cócteles.
Un beso
Esto es increíble!!! Qué final más bueno. Ella se suicidaría, pero él… parapléjico! Menudo relato, peor que los amantes de Teruel.
Me gusta tu vena vengativa y trágica (sin olvidar la erótica que dominas).
Dale un abrazo a ese pobre estudiante de medicina 🙂
Es que cuando me pongo endemoniado, me crezco, al estudiante que le den, a ella y al curso completo.
Un beso
Me he escalofriado entera!!! Esta nueva faceta tuya, erótico-espeluznante, me parece muy buena. La novia por fin podrá descansar tranquila, aunque el pobre estudiante me da penita.
Besos, Epi.
El recuerdo de los cadáveres, su tacto y sus expresiones me vienen a la cabeza, alguna noche que no duermo, he llegado a notar que me cogen la pierna y tiran de mi. Inés, los muertos se resisten.
Un beso
¡diossss! un micro impresionante, como el golpe del chaval. Una venganza de las buenas, se nota que te manejas como pez en al agua, en estos temas.
Por cierto, no conocía el dato sobre Toledo. Gracias.
Un abrazo Epi.
Rosy, son venganzas extremas, pero los cadáveres en formol, todavía no se me han olvidado.
Un beso
Hola, Epi.
Me gusta esa venganza tan bien tirada. Eres la bomba y siempre sorprendes.
A ver si esta vez llegas a los altares.
Besos.
Gracias Towanda, pero si llego a los altares será en un relicario y no te digo que parte de mi cuerpo. En Murcia hay uno con una pluma del ala derecha de arcángel San Gabriel.
Un beso
Salute con tu relato amigo, sorprendes por la frialdad y el morbo.
Excelso, mil felicitaciones, me pareció de antología.
Un abrazo
El morbo Moli, es lo que tiene. Cuando me dijeron que si me descuido voy a entrar en obesidad mórbida, dije, fabuloso, viciosillo y guarrete, ja ja.
Un abrazo
Eres impresionante. No hay nadie como tú. Acojonante.
Un fuerte abrazo Epi.
La crudeza, Jesús Alfonso la adquirí en esas salas de hospitales, en las salas de disección y en lo efímero de nuestras vidas. En que poco tiempo todo puede cambiar a peor.
Un abrazo
Desconocía lo de Toledo y se me escapaba el final, llegué a pensar que del golpe había muerto y ahora estaba en otra facultad de cuerpo presente, también en formol. Por suerte los comentarios me sirvieron para entender mejor, aunque el trasfondo de la venganza ya lo había pillado.
La frialdad de la descripción del cadáver, combinada con los recuerdos que tiene él de cuando su novia estaba viva, me han parecido espeluznantes, muy visuales. Muy buen trabajo. Enhorabuena.
Suerte y saludos
Anna, el centro de parapléjicos, realiza una labor impresionante, además el personal tiene un carisma especial, para animar y enseñar a personas muy jóvenes que han quedado con lesiones medulares por accidentes de tráfico.
Un beso
La Virgen!!!
Y dicen que yo soy cañero…
Mira, afortunadamente lo pillé todo porque curiosamente me compré el DVD de MAR ADENTRO (aún hay gente que compra pelis?), y vi como Bardem preparó el personaje de Ramón Sanpedro en ese hospital.
Joder…tu relato es descomunal se mire por donde se mire.
Detallista hasta el dolor.
Sabes? Lo tuyo se llama talento superlativo.
Un abrazo de un tipejo que acaba de sentir absoluta admiración,
Epi.
Enhorabuena.
Gracias Modes, las crudités me gustan, tanto las eróticas como las otras.
Un abrazo
Menos mal que no eran gemelos o se lleva dos golpazos. El relato tiene su chicha, un poco de picante y un aderezo de horror ¿Qué habita en su mente, Doctor Epi?
Saludísimos.
Hora es que te comente. Muy buena historia, pero sobre todo excelente ritmo, impresionantes descripciones y una muestra de lo bien que puedes escribir y a menudo nos regalas. Tienes muchas facetas, y esta es de las que más me gustaron, pese al temita, que me mantuvo a distancia y que te confieso, leí por encima, porque me impresiona.Suerte y abrazo.