86. “Laverinto” con “v” de venganza (Petra Acero)
El bigote relamido del viejo conde me sonríe triunfante. Trago saliva ahogando cada lágrima heredada, cada “quizás”, cada “mañana”…
—El conde, el abuelo del señor —me anuncia doña Elvira.
Parpadeo, pero el laberinto familiar continúa ahí: sobre el rancio buró de filigranas, protegido bajo su bruñido marco de abusos y mentiras.
—No eres de por aquí, ¿verdad? —La estirada pasa negra me mira de arriba abajo con desgana, como si le doliera mi presencia—. Hoy en día es difícil encontrar chicas que limpien como las de antes…
Inspiro. “Como mi madre y mi abuela”, pienso al acercar mi rostro al retrato. Espiro: un halo de polvo titila entre la luz de los visillos.
Subo las escaleras de dos en dos. Aliso mi delantal. Llamo con los nudillos. Entro. La está besando. Carraspeo. Ella se ruboriza y agacha la cabeza. Él se relame el bigote, como su abuelo… Me guiña un ojo. Recojo la bandeja. Mi joven laberinto me mira el trasero. “¡Quizás mañana, conde!”, pienso mientras le sonrío… Yo no perdono.
Oh…oh…
A alguien le van a cortar la pilila…
En fin, que te voy a contar que no sepas tú misma, Amparo.
Ritmo cinematográfico, apabullante dominio del lenguaje (la vieja pasa me parece un hallazgo descomunal. Me parece estar viendo a la señorita Rottenmeier de Heidi), en una historia de secretos, sumisión, abusos, silencios. infinitas lágrimas en soledad, y una, ojalá, próxima venganza.
Ay bigotitos, algo me dice que te van a hacer pupita en el fistro sexual…
Muy, muy bueno Amparo.
Un besazo, y gracias de nuevo (que bien posas, demonios).
Modes, pero qué gracioso eres, jodido (como diría doña Rogelia).
A alguien le van a cortar… las alas:) sí señor, tieme toda la pinta.
Gracias¡por pasarte y hacerme reír. Dos besos
Gran relato, que bien eso del «joven laberinto».
Felicidades.
Me alegra que te guste, María, y que resaltes lo del «joven laberinto», pues representa un punto importante em el relato, en la venganza.
Un abrazo.
Amparo, esa «v» de venganza de ha acompañado en toda la lectura. Al final, sólo me la he podido imaginar y eso ha sido lo mejor de todo! Qué buena historia sobre lo que no termina de pasar… Felicidades!!!
Jo, María, muchas gracias por tus palabras. La «V» de «Venganza» hace girar su «laverinto», lo alimemta, es su principio y su fin… Vamos, que tú lo has explicado muy bien.
Un abrazo y gracias.
Amparo, me ha gustado tu relato. Sobre todo como lo llevas. Una historia de poner los pelos de punta, de esas historias trasnochadas que ya no pasan y puede que sigan pasando.
Amparo, está muy bien el ritmo que le has dado a las secuencias y ese final que nos quiere prometer algo. Suerte y saludos
Bueno, bueno, vaya historia. Esos bigotitos de rancio abolengo se creen los dueños de todo y de todos (o todas). Pero este me parece que se va a llevar una sorpresa.
Me ha encantado y te animo a ilustrarlo, ese bigotillo es un personaje irresistible, todo el relato es muy visual.
Besossss
Parece ser que esta vez alguien tomará medidas contra el hostigamiento de los hombres de esta familia. Me ha gustado, suerte.
Saludos.
En esa próxima venganza parece que por fin serán otRos los perdedores.
Nos has ambientado la historia con todo lujo de detalles. Lágrimas heredadas, marcos de abusos y mentiras, estiradas pasas negras, jóvenes laberintos… ¡qué cosas se te ocurren, Petra!.
Lo sabes, me encanta encontrarme con tu micro mensual.
Un beso, maestra.
Acabo de descubrir tu relato, y me ha hecho mucha gracia. Tiene ritmo y contenido.
Suerte
Eres una maestra sin duda, nos pintaste uno a uno los personajes y la sordidez de la trama con pocas palabras. Eres única amiga.
Un abrazo y mucha suerte.
Amparo me ha parecido precioso, muy descriptivo, a la mente me ha venido el libro «Criadas y señoras». Esa «pasa negra…»me encanta !!!
Suerte, un beso.
Amparo, me ha gustado mucho.
Tiene un ritmo muy bien marcado. Describes muy bien la historia que nos lleva a otros tiempos de telenovela, con V como tu laverinto.
El final genial.
Un abrrazo
Está todo perfectamente intrincado y tiene mucha fuerza (léxico, sentido…). Lo veo realmente muy trabajado. Te deseo mucha suerte 🙂
Hola, Petra.
Es un texto curradísimo, eso se nota, y muy visual tanto que me he imaginado al bigotes a mi lado… ¡Vamos, que lo he visto aquí!
Te deseo muchísima suerte.
Y te mando un besazo.
Muy bueno Amaparo y original esa «venganza» apunta bien. FElicidades y suerte.
Besicos muchos.
Muy bien ambientado y con una historia potente. Lo mejor las imágenes que nos vas dejando.
Suerte y abrazos
Muy visual, cinematográfico a tope. Suerte a esa protagonista que va a vengar a toda una saga familiar de abusos y vejaciones. Besos.
Leer vuestros comentarios ayuda, centra, enseña…, y anima.
Por eso hay una palabra que se vuelve mayúscula y se revuelve por salir y quedar bien plasmada aquí;
GRACIAS!!
MUCHAS GRACIAS A TODOS!!!
Amparo
Dibujas con precisión una escena cinematográfica, con precisión, color, volumen…vamos, con trazo de artista!
Un abrazo.
Creo que el título me soluciona lo que no capto del relato, ¿se trata de una hermana o prima del conde? ¿Va a vengar a su madre y su abuela? Aunque situado en un castillo a mí me recuerda ciertas oficinas y fabricas donde aún existen estas prácticas. Por cierto, Petra, que el derecho de pernada lo quieren volver a poner, al tiempo.