Esta Noche Te Cuento. Concurso de relatos cortos

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Mnstrscp2018 – R2 – Encuentro3

Los participantes con el alias : MOZART – LUISA ROLDÁN – CÁNOVA

deberán escribir un relato que cumpla las siguientes bases:

PLAZO : antes de las 12 de la noche (hora peninsular española) del domingo 23 de septiembre.

CONFLICTO: Te despiertas y te han convertido en :Gárgola de Notre Dame

 

 

EXTENSIÓN : 150 palabras máximo sin incluir ni el título, ni la escultura ni el objeto

debe aparecer obligatoriamente este objeto : UN ANCA DE RANA

GÉNERO : Humorístico, simpático, gamberril … y todo que se te ocurra añadir

 

Deja tu relato aquí

Votación de este encuentro

9 Responses

  1. Melísima

    Qué jorobado de LUISA ROLDÁN

    Abrí los ojos y… me quedé de piedra, literalmente. ¿Era una gárgola, en serio? y aquello ¿era la torre Eiffel? ¿Cómo mierda ha ocurrido? Oigo ruido a mi espalda (joder, que no puedo girarme), como un arrastre de pies, y aparece una cabeza horrenda. ¿Quasimodo? ¡Ostia, si se te parece!, y empiezo a acordarme de todo, porque… me acuerdo.
    Me acabo de dar cuenta (de hecho caigo ahora) de que en la ración a la que me invitaste había un anca de rana que sabía distinta (un poco amarga), ¿recuerdas que te lo comenté?, tú dijiste que las ancas eran como las endivias, que siguiera comiendo y poniéndome gorda (un chiste de los tuyos), yo acabé con el plato masticando insultos para caer dormida justo después.
    Supongo que, ahora, de piedra y delgadita, no tendré la suerte de que vengas a verme y pueda dedicarte una cagarruta.

  2. Melisima

    PARIS, MON AMOUR de CÁNOVA

    Mi mujer y amantes coincidían en mi y que les recordaba, cuando practicábamos sexo, al movimiento de una Gárgola de Notre Dame. Esta útima comparativa que, repito, todas ellas me decían, me inquietaba. Pensaba que ,aunque disfrutábamos, algo no funcionaba.
    Acudí a remedios farmaceúticos y naturistas pero todas ellas siguieron igual. Pensé que no era el movimiento sino el chorreo que cae de las gárgolas cuando llueve. Pero se reían, me llamaban asqueroso y volvían a lo de siempre.
    Un día una de ellas, de lunar de pelos y nariz puntiaguda que vestía de negro y se dedicaba a la limpieza de hogares, me invitó a disfrutar de su lecho, después de ingerir un brebaje compuesto de ancas de rana. Acepté la proposición y acabamos extasiados y dormidos.
    Y, al despertar, me encuentro en Notre Dame, observando el cielo y las pálomas que cagan sobre mí, comprendiendo lo que ellas decían.

  3. Melísima

    PARÍS LA NUIT de MOZART

    Mi Erasmus había llegado a su fin y mis amigos me despidieron con una fiesta en la que solo comí un anca de rana y bebí tanto champagne que acabé durmiendo la borrachera a orillas del Sena, frente a Notre Dame.
    Por la mañana desperté con la peor resaca de mi vida, convertido en lo que soy ahora.
    Las vistas son espectaculares, pero tengo que permanecer inmóvil mientras cientos de parejas de todo el mundo se hacen selfies conmigo, besándose y repitiendo las mismas estupideces sobre la ciudad del amor. Vomitivo.
    Cuando se marcha el último turista empieza la diversión. Todas las noches aparece una morenaza de ojos verdes y piel gitana que me pone a cien con su bailecito. Me preocupan los dos cuernos que me han salido en la cabeza. Confieso que estoy celoso, aunque ella jura que soy su gárgola favorita y que mi dureza pétrea la vuelve loca.

    1. Diablote

      Para mi que es la misma gitana del encuentro 18, lagarto, lagarto, o anca de rana, anca de rana. Abrimos la votación y que sea lo que tenga que ser.

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