77.SECRETOS COMPARTIDOS (Concha García Ros)
La protagonista se llama como tú, eso fue lo que me hizo comprarlo. También tiene una relación tormentosa y escribe de madrugada. Desde el principio me enganchó, me sedujo la idea de saber más de ella. Leía ávidamente devorando su rastro. Confieso que, aunque sea una locura, me estaba enamorando.
Pero ahora no sé si quiero saber cómo piensa, en qué, en quién. Me atormenta, pero no puedo parar. Lo de anoche fue demasiado hasta para un curioso empedernido como yo. Me quería morir cuando llegaste feliz mostrándome una edición ilustrada del Libro de Monelle, un curioso ejemplar que, según dijiste, habías encontrado en una pequeña librería del centro. Un ejemplar idéntico al que su mejor amigo, que está loco por ella, le ha regalado.
Se acabó, esta noche lanzo al fuego este maldito libro.
Hola, Concha.
Una situación en la que entiendo que no pudiera parar de leer. Casi como un dejá vu.
Buena apuesta, me gustó.
Unos besos.
Sí, atrapado por una historia que le precede. Menuda situación. Gracias Towanda. Besos.
Concha, tu historia puede dar de si para un guion cinemetografico, al menos un corto, esta repleto de situaciones coincidentes. suerte y saludos
Gracias Calamanda, puede que desarrolle la historia. Un beso
Concha, inquietante descubrimiento, no sé si lo tirará al fuego, la curiosidad es poderosa. Coincido con Calamanda, da para un guión o una novela estilo Patricia Highsmith. Me ha gustado mucho. Abrazos.
Muchas gracias Salvador por tus palabras. Yo tampoco tengo claro que vaya a quemarlo. Aunque ya se sabe que «la curiosidad mató al gato». Un beso
Muy curiosa tu historia. Y muy bien trenzada. Mucha suerte 🙂
Gracias Juan Antonio por tu comentario. Me gusta que te resulte curioso el relato. Un beso
Sí, Ana, el pobre anda muy perdido y lo que le ocurre aún le complica más su situación. Gracias por comentar. Un beso
Coincidencias intelectuales y vitales, puede que sea el libro quien se asemeje a la existencia o viceversa, en un relato que, como bien se ha apuntado en otros comentarios, viene a ser un diamante en bruto del que podrían desarrollarse diferentes joyas.
El protagonista llega a tener verdadero miedo a leer, ante un contenido que ha abierto un abismo ante sus pies, eso no ocurre con tu relato, con un punto inquietante, pero muy ameno.
Te deseo mucha suerte y te envío un saludo, Concha.
El protagonista está atrapado por el libro, ya no distingue entre realidad y fantasía. Muchas gracias por tu amable comentario. Un beso
Justo lo que acabas de escribir tú, era lo que estaba pasando por mi cabeza. La vida es una casualidad, y a veces queremos ver en ella otra dimensión, un destino, una realidad paralela… Me ha encantado ese paralelismo entre realidad y fantasía de tu relato.
Gracias Edita. La vida es una casualidad tas otra, a veces benditas casualidades otras crueles. Un beso
me quedo con las ganas de saber…
Un saludo
JM
Habrá que continuar la historia. A ver si convenzo a mi prota y no quema el libro.
¿Y si al lanzar el libro al fuego se desata algún maleficio «infernal»?
Una historia que da para mucho. Te animo a continuarla.
Saludos y suerte
Gracias Montse, la historia, como casi todas está abierta a diferentes giros. El quemar el libro, como bien dices, puede traer consecuencias insospechadas. Un abrazo.
A veces las personas buscamos paralelismos y casualidades que nos confirmen nuestras propias inseguridades, y tu lo has plasmado muy acertadamente. Racionalmente sabemos que quemar el libro no solucionará nada, pero preferimos recurrir al pensamiento mágico antes que enfrentar la realidad y confirmar sospechas. Lo dicho, todos los detalles de tu relato están muy bien encajados y son creíbles. Muy bueno.
Suerte y saludos,
Muchas gracias Anna por tu comentario. Has hecho un buen análisis de la historia, a veces estamos tentados de «no querer ver». Me alegra que te haya gustado. Un beso