SEP103. EL DIABLO, de Rafa Heredero García
El trato carnal con brujas. Eso era lo que más le gustaba. Sin duda. Más que escuchar los alaridos de los infelices que caían bajo sus dominios, o el olor de su agonía que todo lo impregnaba. Por eso no le importó evitar la habitual ronda de inspección en la que solía disfrutar del sufrimiento de tanta alma descarriada: una nueva bruja estaba esperando y tenía prisa por conocerla.
Se plantó ante ella, expectante, y le sorprendió y agradeció su juventud; también se sintió orgulloso al descubrir el temor en sus ojos cuando supo adónde había llegado. Y es que al final todas acababan cayendo allí. Era inevitable. Disponía de los medios para que así fuera, y a esta, además, no iba a ser difícil arrancarle sus pecados. Pero ya habría tiempo para eso.
Con el dorso de la mano acarició la temblorosa mejilla de la muchacha, y muy despacio, suavemente, la deslizó desde el cuello hacia sus hombros desnudos… Sabía por su experiencia que para ellas, para las brujas, aquello suponía una tortura más dolorosa que cuando penetraba su carne con un hierro candente, y eso a él, como Inquisidor General, era lo que más le gustaba. Sin duda.
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Me encanta tu identificación. La comparto al cien por cien.
El miedo, la rabia, el odio, me ha recordado a la peli de Disney el jorobado de Notre Dame, esa peli me dió mucho miedo y pensé que no era para niñios.
Qué pasada, me gusta.
Gracias por comentar, Aurora. Cuando una persona se aprovocha de su autoridad, de su poder o de su fuerza para humillar al débil, no merece otra identificación (o cualquier otra peor que se nos ocurra). Estoy contigo.
Y respecto a las pelíclas de Disney (y alguna más de dibujos), sí, algunas son un poco sádicas, pero se ve que es lo que vende, ¡qué le vamos a hacer!
Un abrazo.
Sencillamente brutal, Rafa, mi mas sincera ENHORABUENA.
He leido un par de veces el relato, para empaparme bien de todo lo q quieres transmitir. Me parece muy sugestivo, valiente, bien llevado y de una dureza tan desgarradora, que no puede merecerse otro texto que el que tiene. Hasta ahi has dado en el clavo.
Mucha suerte.
NACHO RUBIO
Muchísimas gracias por tu comentario, Nacho; me alegro de que te haya gustado, y me encanta la forma que tienes de transmitirlo. Y la enhorabuena debería ser para ti, no solo por aquel (tiene toda la razón del mundo JAMS) memorable Bosque sobre las olas, sino también por tus éxitos recientes. Espero que este año puedas repetir, cuando menos, la final en REC, que pude escuchar en un audio en Internet, y además te vi en la fotografía en la que estáis todos los ganadores con el jurado del programa.
Un saludo, y repito, muchísimas gracias.
Demoledor el texto, que hay que leer dos veces porque en la primera estás pensando que es un relato fantástico, que el protagonista es el diablo como indica claramente su título, y que los personajes se encuentran en el infierno, premisas todas ellas ciertas en una segunda lectura excepto la primera. Estremecedor. Enhorabuena
Hola, Ana. Muchísimas gracias también a ti por tu cometario. Y sí, el relato resulta estremecedor, sobre todo cuando piensas que la «bruja» va a vivir su particular infierno.
Mucha suerte para ti. Saludos.
Me encanta este relato tan bien narrado, con ese ritmo que te va atrapando hasta la sorpresa final, que por cierto, es muy atinada. Y cuando se desvela, entiendes que no debería sorprender.
Paloma, tu comentario me ha recordado a los trucos de magia que son desvelados, y una vez que vemos la solución, también nos sorprende no habernos dado cuenta antes del «engaño». Me alegro de que te guste el relato y muchísimas gracias por comentarlo.
Muchas suerte con tus relatos. Un abrazo.
El inquisidor lo has reflejado muy bien, creo que de los malvados, casi todos tenemos muy claro su perfil y lo clavas.
Un abrazo Rafa
Gracias, Epi. A mi me encantan tus personajes graciosos y surrealistas; creo que la mejor definición para ellos es Berlanguianos, o así me los imagino yo, en una película coral del genial Berlanga. Pero tu médico malvado, nazi, persiguiéndote con las palas, también tiene su aquel, y más después del estremecedor shock visual que padeciste. Un verdadero sádico es lo que era.
A ver si uno de estos meses atas la suerte. Otro abrazo para ti.
Brutal tu relato, qué bien narrado, y qué bien identificado dejas al Inquisidor con el título. Parece que estás en el infierno cuando vas leyendo, hasta que caes en la cuenta al final, que el infierno está aquí mismo en la tierra, porque aunque la Santa Inquisición ya no esté en uso, siguen existiendo los que se creen con derecho a juzgar y condenar a otros, ya que tienen los medios para ello, teniendo medios se puede conseguir cualquier cosa.
Saludos y mucha suerte RAfa con este relato,
Hola, Yashira. ¡Cuánta razón tienes! Desgraciadamente hoy en día vivimos con muchos inquisidores generales, con muchos diablos, que como tienen la fuerza y el poder se creen con derecho a poder hacer su santa voluntad contra todos los que son más débiles.
Un fuerte abrazo y muchísima con tus relatos.
Me has metido en «el hereje» de Delibes y en las cuevas de Zugarramurdi. Tendrían que haber cortado las manos de aquellos puñeteros dominicos germanos que escribieron el Malleus Maleficarum. Fue el origen de toda esa mierda.
Muy buen relato. Si fuera jurado te llevarías el top de mis votos.
Hola,Jesús, me alegro de poder saludarte de nuevo. Veo que el tema de la Inquisición también te interesa y lo conoces, y además estamos de acuerdo con lo de los dominicos, aunque a mí me hubiera gustado ser todavía más drástico con ellos y con sus ideas.
Y muchas gracias por la apreciación que te merece el relato. Tus comentarios van a hacer que duerma muy feliz esta noche.
Un abrazo muy fuerte. Seguro que la familia Lavín esconde más secretos por ahí y nos sigue proporcionando geniales momentos.
Muchísima suerte.
Qué bueno, Rafa, buenísimo. Lo malo es que seguro que así discurría el poder y el dominio, en los tiempos de la Santa Inquisición y siempre.
Una abrazo.
Pues visto cómo discurre el poder hoy en día nos podemos hacer una idea de cómo ha sido siempre, Susana, tú lo has dicho; eso de humillar y cebarse con el débil por unas ideas, un sentimiento, por comodidad, o por lo que sea, parece muy arraigado en los seres humanos desde hace mucho tiempo.
Muchísimas gracias por tu comentario. Suerte con tus relatos, y otro abrzo para ti.
Ana, seguro que ya te has enterado de cómo algunos religiosos han procurado la salvación de las almas. Y por si acaso… ¡cuidado con los conjuros!
Saludos.
Rafa, me ha gustado mucho tu relato, es duro pero son hechos realea. Menos mal que no nos ha tocado vivir en tiempos como los que narras.
El titulo tambien me parece muy acertado. Quien tiene la mision de luchar contra el diablo termina convirtiéndose en uno de ellos.
Saludos y mucha suerte.
Bueno, José Ángel, también estos tiempos tienen sus cositas. Digamos que de momento hemos superado varias de las malas, por lo menos en algunos países. Pero sí, me alegro de no tener que estar pendiente de una Santa Inquisición.
Muchísimas gracias por tu comentario y suerte con tus relatos (y que te dé tiempo a participar en REC). Saludos.
Que cierto es que el infierno muchas veces está aquí mismo, y el diablo no necesita cuernos y rabo. El relato es estupendo,»engaña» y lo dicen muy acertadamente por ahi arriba, al final te das cuenta de que no te han engañado. Estoy en un grupo de teatro, estrenamos el 9 de noviembre una obra sobre historia vasca-navarra, hay un pasaje de brujas en la hogera y efectivamente el inquisidor nos dice las de Dios antes de entregarnos «al fuego salvador», nos tira de los pelos, escupe etc… las torturas anteriores se dan por supuestas, con tu permiso me gustaría leerles tu relato en el próximo ensayo, así para meternos en el papel. Puede ser? . Me parece un micro perfecto, genial.
Hola, María. Perdona por no haberte contestado antes, no he podido acceder a Esta noche te cuento hasta ahora.
¡Por supuesto que puedes utilizar «El diablo» como mejor te venga! No tenías ni que preguntarlo. Y estaré encantado si ayuda a tus brujas a meterse algo más en el papel y a que os salga mejor la representación; todo lo que ayude a luchar contra el fanatismo, la intolerancia, la hipocresía o el abuso de poder debe ser bienvenido. Así que ¡mucha mierda! para el día el día 9 y las sucesivas representaciones (espero que se diga así y no haber metido la pata).
Saludos para ti y tus brujas y muchísimas gracias por tu comentario.
Es un micro genial, y como fruta madura caera por su propio peso.
Me gusta el tema tratado, la precisión con que está narrado y la sorpresa final. Yo ya había visualizado al demonio traginándose a la bruja, jeje.
Un saludo
Muchísimas gracias por tus palabras, Miguel Ángel. Algo de lo que habías visualizado seguro que va a tener lugar.
Suerte con tus propuestas. Saludos.
Hola de nuevo Rafa,
debo contarte que leí a mis compañeros este relato para ambientarnos en la escena de la quema de las brujas donde el inquisidor nos tiraba de los pelos etc y les ha encantado!!, de hecho la estamos cambiando un poco (la actitud del inquisidor) para que efectivamente nos «acaricie» y sí da mucho más miedo… y las «ropas» que llevamos (unas cortinas viejas que se adivina la desnudez por debajo)les vamos a abrir un poco más para que se nos vean los hombros… Ya ves el relato de cada uno hasta donde puede llegar, no se de donde eres pero en un mes y poco esta idea tuya se verá por mi tierra vasca, je je… y gracias/eskerrik asko !!!
Me hace mucha ilusión lo que cuentas, María. Pensaré en vosotras desde Valladolid para que todo os salga como queréis. ¡Y cuidado con esas cortinas!, que los estrenos (y los «palabra de honor») suelen ser muy traicioneros.
Saluda de mi parte a tus brujas…bueeeeno, y también al inquisidor.
Me ha encantado, Rafa. Ha sido uno de los micros que más me han gustado. Por eso he pasado a desear suerte.
Aúpa!!!
Muchísimas gracias Ricardo por pasarte a desearme suerte; se agradecen tus palabras. Y superado ese «infinito» entuerto con tu nombre este mes y el pasado, espero que los comentaristas te dejen ya de molestar.
Mucha suerte para ti también con tus relatos. Saludos.