45. SUEÑO CON ESCALERAS AL CIELO (Fernando da Casa)
–Qué razón tenía Machado cuando renegaba del cantar de los gitanos –proclamaba el nuevo pastor ante su feligresía–. ¿Para qué queremos escaleras que nos lleven a la cruz, símbolo de la mayor desgracia? Basta ya de lamentarnos y alabar el sufrimiento, gocemos del amor de nuestros prójimos y proclamemos la paz verdadera.
El escándalo removió los cimientos del pueblo, ¡un cura renegando de la cruz! Los más leídos redactaron una carta de protesta dirigida al obispo, la mujer del alcalde se declaró en huelga de hambre hasta que rectificara, las cofradías organizaron una procesión de desagravio, se suspendieron todas las bodas, bautizos y comuniones y la venta de cilicios se triplicó en un mes.
Cuando el sacerdote despertó, desterró la idea de su nueva homilía.
A este sacerdote le traicionó su subconsciente, porque una cosa es no discrepar de forma pública de prácticas de la organización a la que se pertenece, y otra no tenerlas. Por suerte para su continuidad profesional, todo quedó en el territorio de los sueños, con una premonición o advertencia sobre lo que podría suceder.
Un abrazo y suerte, Fernando