69. Últimas voluntades (Alberto Jesús Vargas)
El impacto de un meteorito en las afueras del pueblo ha provocado un insólito efecto. Algunos muertos recientes, abandonando sus tumbas, han empezado a escaparse del cementerio. Iluminados por la omnisciencia que da el haber visto las cosas desde el más allá, vuelven dispuestos a enmendar asuntos que se han torcido o concluir cuestiones que quedaron pendientes. Y todos tienen tarea. La señora Gertrudis quiere impedir que se malvenda la casa que fue suya y legó a la sobrina que prometió conservarla. Don Argimiro se ve obligado a poner orden en las disputas que sus hijos, tan amados y tan piadosos, mantienen a causa de la herencia. Y Carmela, la mujer del boticario, va en busca de su marido con aires de zombi cabreada dispuesta a tirarle a la cara las flores que en vida nunca recibió de él y ahora, sin embargo, no faltan en su sepultura.
Si el retorno de la muertr fuese posible, sería curioso observar cómo sigue la vida sin los que se fueron. Las personas desaparecen, pero sus bienes pueden ser objeto de disputa, somos así. Lo que no tiene perdón es lo del marido y sus flores tardías.
Un relato original, humano y simpático.
Un abrazo y suerte, Alberto.